¿Segura? - Calle Y Poché |PAUSADA|

26. Ciudad Amurallada

Calle pov.

- Bebé despierta - escuchaba a lo lejos la voz de Poché llamarme, no sabía qué hora era pero una cosa tenía clara, era muy, muy temprano - Dani arriba, llegaremos tarde - haciendo caso omiso a sus llamados me volteé dándole la espalda

Luego de unos 10 minutos de intentar dormirme de nuevo, podía escuchar a la chiquita por toda la habitación moviendo cada cosa que se encontraba

- Déjame dormir - gruñí un poco de mal genio

- Te avisé ayer que hoy saldríamos muy temprano de la casa - sentí somo se echaba encima mío - Levántate y puedes dormir en el trayecto a nuestro destino - besó mi frente y se dirigió al baño

Con cero ganas me levanté de la cama y empecé a alistar la maleta que me había indicado ayer Poché, después de tener todo empacado busqué mi celular para revisar algunas cosas y enviar unos mensajes. 5:45 a.m. ¿qué carajos?

- María José no son ni las 6 de la mañana - le dije tan pronto salió del baño y me tomaba de la mano para llevarme adentro de él

- Demórate lo menos posible - dejó un pico en mis labios para después tomar ambas maletas y bajarlas

Tardé casi 20 minutos en ducharme velozmente y cepillarme los dientes, no tuve tiempo para más ya que tenía a la peliazul tocando en mi puerta cada 30 segundos

Terminé por bajar las escaleras y escuché a Alejo en la cocina así que me dirigí hacia allí

- No te preocupes, ya todo está cuadrado, solo intenten no llegar tarde al aeropuerto y todo saldrá a la perfección - oí que decía el moreno

- ¿Al aeropuerto? - María José volteó tan pronto me escuchó y soltó una risa nerviosa

- No preguntes nada, debemos irnos ya - tomó mi mano y me tiró fuera de la casa al mismo tiempo que le decía a Alejandro que nos veríamos mañana

El trayecto al aeropuerto fue un tanto extraño, le preguntaba mil cosas a Poché y no me respondía nada, cada vez que intentaba sacarle información terminaba con su boca sobre la mía y aunque no me molestaba en lo absoluto, necesitaba saber a dónde nos dirigíamos

- Sala de espera número 4 - habló la chica tras la ventanilla - Tengan un buen viaje - sonrió entregando nuestros boletos que hasta el momento no había podido ver

- No me muevo de aquí si no me dices a dónde vamos - hablé tan pronto salimos en busca de nuestra sala de espera

- Qué impaciente eres - rodó los ojos y se acercó para tomar mi mano - Sabes que viajo mañana, así que decidí que quería pasar tiempo contigo a solas - entrelazó nuestros dedos y me miró - Tenemos 24 horas para hacer en Cartagena lo que se nos venga en gana - finalizó besando mi mejilla y reanudando nuestro paso

- ¿Hablas en serio? - susurré y vi como asentía - Iremos a Cartagena - dije como niña pequeña emocionada por viajar - Y estaremos solo tú y yo - hablé cayendo en cuenta que sería nuestro primer viaje juntas

- Eso es lo más interesante - me ofreció una sonrisa coqueta y un guiño a lo cual solo pude responder riendo

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No sé con quién había hablado Poché pero apenas aterrizamos en la ciudad amurallada, ya nos estaban esperando del hotel para llevarnos hasta allá

- Holiday Inn - susurró para si misma - Mira gorda, ahí nos están esperando - me señaló a un elegante señor que sostenía un cartel con nuestros nombres

Luego de unos 15 minutos en el auto llegamos a recepción y la entrega de nuestra habitación fue bastante rápida, agradecí al cielo porque necesitaba subir y cambiarme de ropa, el calor era infernal comparado con el clima de Medellín

- Necesito ducharme - dije tan pronto entré al cuarto - Pero solo traje la muda de ropa que tú me dijiste - achiqué los ojos mirándola tirada en esa gigantesca cama perfectamente hecha

- No te preocupes por eso, dúchate, saldremos a buscar un lugar para almorzar -

Y así fue, ambas nos duchamos y cambiamos nuestras ropas, salimos en busca de un restaurante que nos recomendaron en recepción. El lugar terminó siendo mejor de lo que esperábamos, la comida estaba exquisita

- ¿Qué quieres hacer? - me preguntó la pequeña delante de mí una vez salimos del restaurante

- Caminando hacia acá pude ver que había un museo ¿podemos ir? - dije de manera mimada

- A donde tú quieras amor - se empinó para dejar un suave beso en mis labios el cual no pude responder y ella lo notó - ¿Qué pasa? - miró mis ojos fijamente

- Me gusta que me digas amor - sonreí y esta vez fui yo quien la besó

Nuestra tarde se fue en ir al museo y comprar cualquier artesanía que veíamos por ahí. Volvimos al hotel pasando las 7 de la noche, no tenía idea sobre qué haríamos así que tan pronto llegamos decidí tomar una pequeña siesta para no andar muriendo de sueño

Cuando desperté no vi a Poché a mi lado, la llamé varias veces pero no contestó así que decidí escribirle un WhatsApp pero tampoco respondió, estaba a punto de ir al baño cuando escuché dos toques en al puerta principal y abrí para ver si era ella

- Señorita Calle, me pidieron que le entregara ésto - habló el joven, que supuse era un botones del lugar, colocando frente a mí una caja de tamaño mediano con un lazo cubriéndola - Junto con ésto - dijo ahora tendiéndome un sobre, recibí ambas cosas y antes de que pudiera gesticular alguna palabra lo escuché de nuevo - Primero lea el sobre y después abra la caja, la Señorita Garzón estará esperándola en la terraza del hotel a las 9 p.m. - sonrió y se alejó dejándome allí parada

Dejé la caja sobre la mesa y tomé el sobre:

Dani:

Lo siento por no estar junto a ti cuando te despertaste, prometo que valdrá la pena el no haberte respondido cada duda que tenías respecto a este viaje.

Gracias por estar aquí conmigo, te quiero cerquita siempre.

No te demores, te espero en la terraza, amor.

Poché

- Besos pa' todos