Rompecabezas [taejin]

Capítulo 4

―Me gustó mucho el detalle de la nota ―dijo Taehyung sonriendo―. Hace que la invitación sea mucho más interesante

Seokjin observaba cada fragmento del rostro de su invitado, pero al momento que este sonrió sintió que el corazón se le desbocaba, le parecía hermosa la manera en que Taehyung sonreía al hablar de forma natural, como sus ojos se le hacían pequeños y como separaba minuciosamente los dientes para dejar salir casi una silenciosa risa.

―Jin es todo un detallista –dijo Usook al notar que su amigo no respondía―. Una vez me hizo una carta para pedirme que no me demore tanto en la ducha, hasta me hizo llorar, ni me mejor novio me había escrito algo tan sincero

―¿Ustedes...? –Preguntó Taehyung apuntándolos a ambos.

―¡No! –Dijo Seokjin apresurado.

―Podríamos ser la pareja perfecta desde luego –agregó Usook―. Pero a Jin no les gustas las...

―¿Cenemos? –Interrumpió Seokjin.

Usook preparó la mesa, mientras tanto Seokjin estaba en la cocina preparando los últimos detalles, Taehyung jugaba con su hijo con los autitos de juguetes que este trajo de su casa.

Haneul estaba feliz, le parecía grandiosa la idea de cenar con uno de sus profesores favoritos, lo admiraba, se sorprendía con la gran capacidad que tenía Seokjin para enseñar. En algunas ocasiones le había preguntado a su padre si es que su profesor era un robot, ¿Cómo es posible que sepa sobre todo?, ¿le pusieron un chip en su cerebro? Le había preguntado.

Una vez estuvo todo listo se sentaron alrededor de la mesa. La comida se veía deliciosa, a Taehyung y a su hijo se les hizo agua la boca de tan solo oler el plato que tenían frente a sus ojos.

―¡Wow! Profesor Kim Seokjin esto huele delicioso –dijo Haneul con los ojos brillando.

―Adelante, ya puedes comer –respondió Seokjin.

―Es un excelente cocinero, ayer hizo unos cupcakes que me dejaron hablando otro idioma –agregó Usook.

―Así que además de ser un magnifico profesor, también tienes habilidades gastronómicas –añadió Taehyung mientras se llevaba el calamar a la boca

―No exageren, por favor –respondió Seokjin sonrojado.

―Es lo mejor que he comido en mi vida –dijo Haneul.

―Hijo, no hables con la boca llena –lo regañó Taehyung―. Pero tiene razón, está estupendo, deberías invitarnos a cenar más seguido –bromeó

―Opino lo mismo –dijo Usook―. Siempre somos solo Jin y yo, un poco de compañía nos haría bien ¿cierto Jin?

―Si... ―respondió el mencionado―. Para la próxima oportunidad podría traer a su novia

―¿Papá tienes novia? –Preguntó Haneul botando la comida de su boca de la sorpresa.

―Yo... ―Taehyung no sabía que responder―. No...

―¿Dije algo malo? ―preguntó Seokjin.

―¿Papá tienes novia? ―insistió Haneul.

―Hijo... ―respondió el padre mirando al techo―. Es un mal entendido...

―¡Haneul! –Interrumpió Usook― ¿qué te parece si vamos a dar una vuelta al parque? Estoy segura que harás muchos amiguitos, te encantará

―¡Sí! –Respondió animado el pequeño―¿hay muchos juegos?

―Muchísimos, nos vamos a divertir mucho –agregó la chica poniéndose de pie.

...

―Disculpa Taehyung –comenzó a hablar Seokjin a penas se quedaron solos―. Pensé que tú y la madre de Haneul...

―No importa –respondió―. No me gusta hablar de mis temas personales, pero para no seguir con malos entendidos...

―No es necesario que me expliques...

―Con la madre de Haneul nos separamos hace años, no he tenido pareja desde entonces, por eso creo que mi hijo se sorprendió tanto al escuchar la palabra novia –se sinceró Taehyung―. No suelo hablar estos temas con Haneul, es muy pequeño...

―Discúlpame por favor –insistió Seokjin.

―No te preocupes, se le olvidará –sonrió―. Y si no se olvida, simplemente le explico, es un niño muy inteligente

―Sí, lo es

El corazón de Seokjin palpitaba a toda velocidad, no sabía si era porque acababa de meter la pata o por la sensación que le causaba estar a solas con el hombre que últimamente era protagonista de sus pensamientos. Las manos le sudaban e intentaba ocultarlo, quería seguir hablando con él pero las palabras no le salían de la boca, tenía la garganta seca, sentía que su saliva se había atascado en algún lugar de su cuerpo.

―¿Es muy lejos? –preguntó Taehyung interrumpiendo sus pensamientos.

―¿Disculpa?

―El parque donde llevó Usook a Haneul –respondió Taehyung―. No es por desconfiar, pero no suelo dejar a mi hijo con desconocidos

―Es a dos cuadras de aquí, te llevo

...

―Estaba deseando que me tragara la tierra –dijo Seokjin.

―Por lo menos ya sabemos que está soltero –respondió Usook con ánimo.

―Es un buen padre –dijo Seokjin observando como Taehyung jugaba con el pequeño en el pasto.

―Invítalos a cenar nuevamente, así recompensas la fallida cena de hoy

―¿Crees que acepte?

―No ha salido arrancando aún, así que creo que le agradó esta tarde de cenas fallidas –dijo Usook con su buen humor, como siempre.

...

Después de la clase de Habilidades Comunicativas, Taehyung por fin había cumplido su promesa ante Jungkook, irían a comer a un McDonald's. Salieron de la universidad directo al local de comida rápida más cercana que tenían, no le quedaba a más de cuatro cuadras por lo que no se les difícil ir a pie.

Pidieron 2 combos mas 2 porciones de papas fritas extras, eran todo unos glotones, y se sentaron a conversar de la vida, de sus gustos, de sus planes, lo típico que puedes hablar cuando recién estás conociendo a un futuro amigo.

―Vivo muy cerca de acá –dijo Jungkook―. Como a 3 cuadras

―Muy cerca –respondió Taehyung.

―Podríamos pasar... a tomar algo

―No bebo los días de semana, soy padre

―O a jugar PlayStation –agregó Jungkook.

―Claro, pero solo un rato, en unas horas llega el autobús de Haneul

Jungkook vivía en un sofisticado departamento de un antiguo edificio en el centro de la ciudad, solo tenía una habitación donde cabía su cama, la televisión, una pequeña mesa, una diminuta cocina y un frigobar. Lo único que necesitaba para subsistir una persona soltera y sin compromisos.

Taehyung necesitaba distraerse un poco, su vida prácticamente se basaba en estudiar, trabajar y ser padre, poco y nada de tiempo le quedaba para la diversión. Aunque no se quejaba, tener un hijo era la tarea mas agotadora y divertida a la vez, aún así no hacía mal un poco de tiempo libre.

Así fue como inesperadamente comenzaron la tarde jugando PlayStation y la terminaron desnudos bajo las sábanas negras bañados en sudor.