ANDRÉS

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Subo las escaleras que se dirigen a mi habitación. Azul llegó de la nada y se abalanzó sobre mi para abrazarme muy fuerte.

- ¿Qué paso contigo? Estaba preocupada por ti, dejaste la fiesta sin despedirte - yo no respondi. Solo seguí con mi camino - ¡Joaquín detente!, hablame

- tuve una conversación interesante con renata anoche - le digo serio

- ¿Estás bien?

- ella sabia cosas de mi, cosas que no he compartido con alguien nunca

- ¿y?

- alguien ha estado hablando con ella, alguien que a leído mi archivo - digo bastante obvia y sigo mi camino a la habitación

- ¡claro eso tiene mucho sentido! - dice para ella misma, pero haciéndolo tan alto para que logre escucharla - ¡traicione tu confianza a un matón desalmado y despiadado, poco imaginativo, origen sospechoso y dificultades de lenguaje ¿a cambio de que? Haa un pircing de cuerpo libre y un tatuaje de prisión! - dice con sarcasmo - Estaba tan segura que me saldría con la mia - sonrió - pero me atrapaste.

- bueno, al menos eres lista para admitirlo - le digo finjiendo seriedad y enojo

- ¿Qué pasa de verdad? - me pregunta algo triste, hiba a hablar pero nos interrumpen unos chicos.

- has leído mi archivo ¿verdad? - le digo con una mediana sonrisa

- claro - me dice mientras entramos a la habitación

- de manera que sabes sobre... -

- ¿tus sombras? - me quedo callado - ¿todavía las ves?

- si

- ¿las ves en este momento?

- no, pero desde que estoy aquí se han vuelto peor y tengo miedo - le digo mirándola con gran temor - me asusta que alguien salga lastimado

- no seas ridículo

- yo, no, Andrés estaba ahí de pie - logró verlo voltiando hacia mí con su hermosa sonrisa y sus ojos iluminados al verme - estaba ahí de pie y nosotros... -

- esta bien, tranquilo, dime exactamente qué sucedió -

- Andrés actuó como si no existiera todo el año, y de repente estaba coqueteando conmigo... -

El y yo estábamos frente al mar

- ¡ven sube a la cabaña conmigo! -

Y así lo hice, entramos a ese lugar riéndonos como siempre lo hacíamos cuando estábamos juntos

- solo una vez quise sentirme... Normal - le digo a azul y sigo recordando lo que paso

El se dirige a la pequeña barra de bebidas que hay en la cabaña

- ¿quieres un trago?

- emm.. Claro - ambos estábamos tomando mientras yo me reía de los gestos que hacía.

De repente ya estábamos en el sofá, el me recostaba mientras yo lo miraba a los ojos.

Nos empezamos a besar. de la nada empecé a escuchar un aleteo y volteo, el comienza a besarme el cuello...

- ¿escuchaste eso andy? - le preguntó inquieto - ¿seguro que estamos solos? - el para de hacer lo que está haciendo y me mira

- hey, amor tranquilo - y me vuelve a besar el cuello, por un momento me dejó llevar, pero mi vista se enfoca en una gargola que está como decoración en la esquina de la cabaña.

Y volteo hacia arriba donde estaba una calavera, enfocó mi vista hacia un orificio donde hiba el ojo y de la nada sale una especie de mosco.

- no, detente ¡quitate! - le digo algo alarmado, el se encuentra en el suelo debido a que lo empuje

- ¡rayos! - dice con algo de fastidio

- ¿por favor sal de aquí? - le digo asustado

- ¿que te sucede joaco? - entonces veo las sombras venir con relámpagos dentro de ellas y se ha cercan a mi

- ¡NO! ¡NO! - grito algo histérico

- ¿joaquin? -

Las sombras eran más grandes que nunca Y de repente todo... Explotó.

No se como pero de repente yo ya estaba afuera...

- y Andres no lo hizo - le digo azul entre sollozos

Estaba afuera de la casa en llamas. llegaban muchas personas alarmadas por el fuego. escuche el grito de la madre de andres

- ¡¿Andrés!? - yo solo lloraba desconsolado

- ¿donde esta andy? ¡Dime! - me pregunta desesperada

- yo.... Lo siento mucho, lo siento -

- ¡estas demente! ¡¿Qué le hisiste!? -

- es mi culpa, lo siento -...

- y esta muerto porque hay algo en mi - le digo a azul - y estoy contento de que seas mi amiga, pero debes alejarte porque soy peligroso - digo en un mar de lágrimas

- ¿quieres que muera? - pregunta seria

- no, claro que no

- ¿tratas de hacerme daño?

- no

- entonces no es tu culpa, no estás solo joaco, necesitas un amigo - me dice y volteo a mirarla - deja que te ayude

- ¿Por qué? - pregunto en un hilo de voz

- porque eso es lo que hacen los amigos - dice, y se lanza a abrazarme yo solo me aferro a ella y lloro.

Por primera vez en mucho tiempo siento que realmente le interesó a alguien.

FALLEDDonde viven las historias. Descúbrelo ahora