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La Reina

El clásico sonido del chapoteo se escuchaba dentro en la habitación, los dos estaban disfrutando del día de descanso del yakuza, pero el rubio se empezó a sentir desesperado, por ende, empezó a sentir incomodidad y esto no paso desapercibido por su contrario. 

–¿Qué es lo que sucede? – Paro de penetrarlo

– Por favor, hay que salir lo más pronto de aquí, no preguntes porque, tampoco le digas a alguien, solo hay que hacerlo – El mayor lo miro extraño, pero le hizo caso, se puso su ropa y espero a que el menor hiciera lo mismo – Dame tu celular
Asami solo miraba como el rubio buscaba entre sus contactos desesperado, como si estuviera pasando algo de vida o muerte, no podía entender que era lo que estaba pasando con Akihito, ¿le estaba ocultando algo? ¿lo había traicionado y arrepentido?, miles de posibilidades pasaban por su mente mas no era hora para averiguar que era lo que estaba pasando, confiaría en su pareja.

~Kirishima ve a la salida trasera del departamento de Asami. No preguntes sólo hazlo~
~ ¿Quién eres? ~
~ Soy Akihito, has rápido lo que te digo ~

–Dame tu arma – Asami se miró dudoso, pero al ver la mirada desesperada de este no lo dudo más – Vamos tu atrás de mi

Cada uno de sus pasos y movimientos eran cautelosos, no quería cometer el mismo error dos veces. La idea era salir por la puerta trasera esperando que Kirishima ya los estuviera esperando para así poder salir.
Al estar en la salida miro a todos lados verificando que no hubiera nada fuer de su lugar y tras ver como Kirishima ya los estuviera esperando. Salió del edificio rápidamente, pero fue más rápido el sonido de un arma siendo disparada.

–¡Asami! – El grito del rubio fue desgarrador, ver como su pareja estaba cayendo al suelo por el impacto fue doloroso

Los ojos ámbar del rubio reflejaron un odio puro, aquellos ojos que siempre estaban con un hermoso brillo ahora estaban rodeados de un aura que a cualquiera que se le ocurriera verlos podría quedar aterrado de miedo, podrían asegurar que aquella mirada podría matar. Y no lo dudo ni un segundo, apunto su arma y de un tiro limpio le dio aquel que se había osado a herir a su pareja.

Kirishima se acercó rápidamente ayudando así a Akihito a que subiera al azabache al carro, necesitaban llegar cuanto antes al hospital.

–Resiste Asami – El menor apretó la herida del mayor tratando que la sangre parara de salir

–Aki, por favor se feliz y recuérdame siempre –

–No te despidas maldito idiota. Tienes que estar conmigo y tus pequeños – Sonrió levemente con unas pequeñas lágrimas en sus ojos – Estos embarazado de gemelos, Asami. Se fuerte y no me dejes – Deposito un suave beso en los labios del mayor

Era una escena romántica y a la vez trágica, los ojos de cada uno miraban al otro con amor y esperanza, esperanza de que pudieran seguir una vida juntos, una vida con sus futuros hijos, una vida plena, sus miradas fueron separadas cuando los doctores y enfermeras empezaron a ayudar al yakuza. 

–Joven Takaba ¿Cómo supo? – Este miró sus manos que se hallaban llenas de sangre de su pareja

–Solo sentí un mal presentimiento – El sonido del celular del mayor lo saco de su pequeño transe

~Bueno ~

~Asami debes salir de tu departamento, te van a atacar~