El rugir del corazón -Severus Snape y tu - [EDITANDO]

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Esta abrió la puerta de forma cautelosa, el ruido de adentro se había callado de forma abrupta y la castaña miro a los jóvenes con cierta sorpresa.

—Buenos días...— Habló la chica con una sonrisa y un tono tranquilo a los pequeños rostros jóvenes, los demás le respondieron el saludo de igual forma, al mirar de frente al escritorio del profesor, suspiro aliviada, camino en dirección al escritorio de Snape, notando que a su lado había otra silla, esta se fue a sentar justo allí, nuevamente los murmullos comenzaron, el joven Malfoy de vez en cuando se dedicaba mirar a la castaña por breves momentos, pues no quería ser muy "obvio" aunque claro, no era el único, la chica solo se limito a esperar a Snape e ignorar las pequeñas miradas, ni tarde ni pronto el profesor Snape no tardo en hacer su aparición en escena.

La puerta se azotó, asustando a todos en el lugar, la castaña dio un ligero salto pues también la había tomado desprevenida —Nadie agitara sus varitas ni hará encantamientos tontos en esta clase.— Dijo este mientras subía a su escritorio y notaba que la castaña ya esta allí sentada .—Por lo tanto, supongo que muchos de ustedes no apreciaran el valor que tiene la ciencia y el arte de la creación de pociones, pero aquellos y serán pocos, los que tengan la predisposición. —Miraba a todos con cierto recelo pues sabia que varios no iban a ser lo suficientemente capaces de lograr la perfección en su materia.— Les enseñare como dominar la mente y hechizar los sentidos, les diré cómo embotellar la fama, generar la gloria incluso ponerle un alto a la muerte... — La castaña parecía perdida pues los recuerdos vinieron de nuevo y Revivo la primera vez que lo conoció, aquellas mismas palabras se repitieron .—Aunque quizá muchos de ustedes hallan venido a Hogwarts dotados de habilidades tan formidables que se sienten con la confianza de no... prestar... atención.—La mirada del hombre se fijo en el pequeño chico de lentes redondos.

—Señor Potter, nuestra nueva celebridad.— Comento este haciendo referencia a aquel niño el cual le dedico una mirada algo sorpresiva.

— ¿Que obtendría si agrego polvo de raíces de asfódelo a una infusión de ajenjo?, ¿Ni idea?— Preguntó el mayor al joven el cual era notorio que no sabia nada.

—...— Se quedo en silencio.

— Entonces digame exactamente,¿A donde iría a buscar un Bezoar?.— Volvió a preguntar.

—Ah... No lo se señor...— Respondió el otro en un tono de pena.

—¿Cual es la diferencia entre acónito y luparia?—

—No lo se señor.— volvio a responder el pequeño, era notorio que sentia vergueza de que el otro lo hubiera humiyado.

—Triste... Es claro que la fama no lo es todo ¿o si señor Potter?— Dijo este con su tono de autoridad, mientras que la castaña se guardaba sus palabras pues recuerda que casi hizo lo mismo con ella.

—Es claro que Hermione sabe, es una pena que no le pregunté.— Le respondió en un tono retador, mientras que los demás rieron por ello.

—S i l e n c i o... — Hablo este con voz autoritaria y todo callaron, se veía bastante molesto por la rebeldía del joven, tanto que fue en dirección al chico. —Baja la mano niña tonta. — Este ordeno y se sentó frente a Potter mientras que la pequeña bajo la mano apenada. — Para tu información Potter, el asfódelo y el ajenjo hacen una poción de sueño tan poderosa que se conoce como la pócima de los muertos vivientes, El Bezoar es una roca extraída del estómago de una cabra y te salvará de muchos venenos, en cuanto al acónito y la luparia es la misma planta que se conoce como anapelo, ¿y bien?, ¿Por qué no están e s c r i b i e n d o todo esto?— Hablo demandante mientras miraba a los demás chicos los cuales habían quedado impactados y algo asustados, para luego escribir todo lo dicho con anterioridad por él.

— y griffindor's les informó que les quitaré cinco puntos a su casa por su compañero Harry. — La joven dedico una mirada de sorpresa y de desaprobación hacia el profesor el cual ahora se encontraba a su lado, este levanto la mirada haciendo que ambos cruzaran miradas, ella desvió la mirada

—Casi olvidaba decirles, aunque creo que no es necesario que se los vuelva a repetir, la señorita Dracoin nos estará acompañado en mi clase, espero que no se comporte tan incompetente como cuando estudiaba aquí. — Hablo este de forma superior mientras aun miraba a la chica sin alguna especie de sentimiento.

Esta solo dio un leve suspiro algo fastidiada regresándole la mirada algo molesta, cambio esa mirada por una mirada amable y dulce. —No se preocupe profesor Snape, ya no soy la misma incompetente de antes. — contesto ella en un tono retador, para después, dirigir la palabra a los alumnos — Sera un placer estar con ustedes. — Dijo en tal tono que todos sintieron una inmensa calidez, alguno de los presentes quedo flechado con aquella joven, como cualquier típico amor platónico que se da en los niños.

Y así surgió la clase, el profesor Snape casi siempre no dejaba que la joven se metiera entre sus asuntos, solo dejaba que esta les brindara algo de apoyo en la creación de pociones...
El tiempo paso bastante rápido, le gustaba convivir con los alumnos, hizo que ya no se sintiera tan "ajena" a los demás.

—Adiós Señorita Dracoin. — dijeron varios al acercarse a la joven, ella se despidió de varios, aunque algunos chicos quisieron despedirse de la chica de beso, sin embargo, Snape parecía mirarlos de forma amenazante haciendo que los chicos huyeran los más rápido de allí.

Lamento si hay faltas de ortografía o palabras sin sentido en el texto... Trato de que no haya muchas :(((.

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¿Podemos legar a la meta de las 70 estrellitas ovo para la próxima actualización?