30 Days OTP Challenge [Soukoku, BSD]

Día 17: Primer Beso

Fifteen AU

Desde que Chuuya había entrado a la Port Mafia, estaba en constantes entrenamientos; siendo acompañado por Dazai, pero este solo se quedaba observando; molestando a Chuuya con tan solo su presencia.

Los días pasaban y pasaban, Dazai a veces aparecía en sus prácticas y otras veces no, suponía que era porque estaba en misiones. Agradecía cada vez que no estuviera allí, porque solo se dedicaría a molestarlo.

- ¿No sabes hacer nada más que estar sentado allí? Eres muy débil - le comentó acercándose a Dazai.

-Todos pueden pelear - Dazai coloca su dedo en la frente de Chuuya - pero les falta eso.

Chuuya comprendió sus palabras y pateó a Dazai con demasiado fuerza haciendo que se estrellara contra la pared. Preocupado por lo que acababa de hacer, se acercó a Dazai para ayudarlo.

-No fue mi intención hacer que te chocaras con la pared - comentó dándole su mano para que se levantara - ¿Te encuentras bien? ¿Necesitas algo?

-Te preocupas demasiado, pero si podrías hacer unas cosas por mí - comentó tomando su mano para levantarse.

-Sí estás bien, puedes salir de aquí, saldrás lastimado de nuevo - comentó entre molesto y preocupado.

Dazai sin más que decir, salió del cuarto de entrenamiento dejando a Chuuya solo, quien no demoró en retomar sus prácticas.

Kōyō había empezado a practicar con Chuuya, usando su poder contra él, Chuuya tenía prohibido usar su poder, sólo podía defenderse con su cuerpo. Aunque Kōyō odiara lastimar a Chuuya, era parte de su entrenamiento y su trabajo.

Pasaron las semanas y Chuuya no volvió a ver a Dazai, lo cual fue un alivio para sí mismo, pero había algo dentro de él que le hacía sentir ansioso; algo que le impedía concentrarse en las prácticas. Ese día le tocaba practicar con sus poderes.

Los había estado usando casi siempre, así que no fue tan difícil, hasta que le exigieron ampliar su rango de efecto. Fue duro, pero después de varias clases y varias semanas lo logró.

Había pasado ya un mes sin ver a Dazai, lo cuál se le hacía extraño, ya que la mayoría del tiempo que estaban en la Mafia; siempre estaba con él. Ese día le habían asignado a una misión donde varios agentes de la Mafia habían sido capturados y matado, como Dazai no estaba, lo mandaron a él.

Cuando llegó al lugar que le asignaron, vio a varios de sus camaradas que le habían ayudado a entrenar; descuartizados. Las personas responsables empezaron a reírse en su rostro diciendo que la Port Mafia era una basura y era muy débil.

Chuuya molesto con ellos, activó Corrupción por primera vez. Le dolió el cuerpo, pero pasó a un estado de inconsciencia que no le permitía tener control sobre su cuerpo, varios minutos después se pedía a sí mismo que lo sacaran de ese estado, pero nadie lo escuchaba; su cuerpo hacía lo que quería.

No recordaba nada, despertó en la camilla de una sala de emergencia de la Port Mafia, con dificultad miró a su alrededor y notó a Dazai sentado al lado suyo.

-Dime que eres real - fue lo primero que salió de sus labios al verlo. Dazai se sorprendió ante sus palabras y sonrió.

-Soy real - Chuuya suspiró aliviado - al fin despertaste, después de 1 semana inconsciente.

-¿¡1 SEMANA!? - preguntó alterado - ¿Dónde estuviste todo este mes? ¿Qué hago aquí? ¿Qué haces tú aquí? ¿Cómo están los demás?

Chuuya empezó a bombardear a Dazai en preguntas, Dazai un poco irritado por las constantes preguntas de Chuuya se acercó y a él y posó sus labios sobre los de él, callando abruptamente a Chuuya; sonrojado lo miró.

-Al fin te callas - comentó sentándose nuevamente - haz todas las preguntas que quieras, pero con calma, estaré todo el tiempo aquí hasta que te den de alta.

Las preguntas que Chuuya quería hacerle no salían, aún estaba en estado de shock, no esperaba que Dazai lo callara de esa manera, lo esperaba más con un golpe o a gritos, pero no con un beso; había sido su primer beso.

-¿Ya no vas a preguntar nada? ¿O el ratón te comió la lengua? - lo miró y sonrió con malicia - No me digas... - fingió sorpresa - es tú primer beso - el rostro de Chuuya se tornó aún más rojo por la vergüenza, Dazai empezó a reír ante la reacción de Chuuya - No esperé que fueras un niño, no fue para tanto.

- Dejate de estupideces - fue lo primero que dijo luego de estar en shock, su rostro ya no mostraba vergüenza, sino molestias por la actitud de Dazai - Dime cómo llegué aquí y qué pasó en esa misión.

-Hmm... Cuando llegué a la Port Mafia, de una vez me mandaron a tú localización; por si llegabas a usar Corrupción, y no se equivocaron, lo usaste, anulé tus poderes y ahora estás aquí.

- Oh vaya...

- ¿No vas a preguntar nada más? ¿Ni dónde estaba?

- ¿Para qué querría yo saber en dónde estabas tú? No soy tú niñera o algo para estar cuidándote.

-Yo tampoco lo soy, pero pudiste haber muerto sino llegaba a tú rescate, un minuto tarde y estarías muerto.

Aquellas palabras dejaron sin palabras a Chuuya, había quedado en blanco mirando al techo repitiendo la palabra "muerte". Dazai notó que había hecho que Chuuya empezara a encerrarse en sí mismo nuevamente. Tomó su mentón e hizo que lo mirara.

-No soy tú niñera, pero soy tú compañero - Chuuya lo miró sin entender - de ahora en adelante, cuidaré tu espalda, así que necesito que confíes en mí, cómo yo lo hago en ti.

Chuuya meditó sus palabras, no quería pelearse con Dazai, pero no quería dejarle las cosas fácil. Pensó por unos minutos más olvidando que tenía a Dazai esperando impaciente su respuesta.

-Está bien, confiaré en ti, pero si haces alguna estupidez estarás muerto.

-Con eso me basta - rápidamente le plantó otro beso a Chuuya para despedirse - vendré más tarde, nos vemos, compañero.

Sin más Dazai salió de la enfermería dejando nuevamente en shock a Chuuya por esas repentinas acciones que impedían que reaccionara de forma correcta.

- ¡Tú! ¡Estúpido Mackerel! - gritó Chuuya a los cuatro vientos sin esperar que alguien le respondiera.