♧14♧

47 9 3
                                    

Jimin estaba corriendo por los pasillos de la universidad mientras preguntaba a los estudiantes que se encontraban fuera de sus salones si habían visto a su amigo, estaba desesperado, el pelirojo se veía demasiado destrozado cuando lo vio llorar frente a la puerta del salón para luego desaparecer.

—¡Taehyung!— gritó cuando estuvo ya en la azotea, era el único lugar que quedaba por revisar. —¡Maldita sea!— pateó la puerta enojado.

—¡Jimin!— Taehyung apareció y se abalanzó sobre el pelinegro. —Tenías razón, siempre la tuviste...— sollozó con fuerza. —Él solo estaba jugándome una maldita broma, debí quedarme con MinHo, él no me mentiría, fui un idiota.

—Eso no importa ahora...— lo consoló acariciando su espalda. —¿Quieres que llame a tu madre?

—Por favor...— se separó limpiando sus lágrimas. —Sólo quiero irme a casa...— su nariz estaba roja y sus ojos estaban vidriosos.

Park asintió soltando un suspiro y tomando la mano del menor para salir de ahí, de ahora en adelante, lo protegería mucho más.

Hoseok se había perdido las tres primeras clases, su corazón dolía y sus lágrimas ya habían abandonado sus ojos hace mucho, estaba en el lugar donde siempre la pasaba con Taehyung hablando, riéndose e insultándose, donde se habían besado.

Sabía claramente que había hecho una estupidez, pero no pudo aguantar el dolor que sentía en el pecho al enterarse lo que su padre había hecho.

Su madre se lo había dicho de la manera más cruel que podía y no supo como reaccionar, talvez pudo hablar con Taehyung y evitar todo lo que estaba pasando, pero no lo hizo, en cambio solo rompió el corazón del pelirojo diciéndole cosas que no debía ni pensaba.

—Soy un completo imbécil...: susurró para sí mismo arrugando la pequeña carta que tenía en la mano donde le explicaba a Taehyung todo y que no le había dado. —¡Un completo imbécil!

Taehyung estaba dormido sobre su cama hecho bolita y cubierto con muchas mantas, su corazón aún no había dejado de doler y las lágrimas ya se habían secado en sus rosadas mejillas.

Soyeon estaba hablando por teléfono con Jimin.

—Se lo dije señora Kim.— suspiró el chico a través de la línea. —Jung Hoseok no es ni será bueno para Taehyung, nunca.

—Esta bien, Jimin.— respondió secando sus manos mojadas con un trapo. —¿Has visto a Hoseok ahora?

Él está con sus amigos.— gruñó. —Lo odio, quiero golpearlo más.

Dile que venga a casa, necesito hablar con él.— Jimin soltó un grito de confusión. —Park Jimin, acabas de romper mi tímpano.

¿Se está escuchando, mamá? —preguntó llamándola por el apodo.

Si quieres puedes llevarte a Taehyung, pero yo tengo que hablar con él.— dijo para luego colgar la llamada.

Suspiró cansada dejando su celular sobre el sillón y subió las escaleras entrando a la habitación de su hijo.

—Taehyungnie, ven a cenar, cariño...— se acercó a la cama y se sentó a un lado de él.

HOMOFOBIA || H O P E V  [#1]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora