HOMOFOBIA || H O P E V [#1]

♧09♧

La hora de salida había llegado y el día había sido divertido después de que Taehyung aceptara saltarse las clases junto a Hoseok, se la habían pasado riendo y burlándose el uno del otro —con respeto—.

Habían prácticamente burlado a los profesores de guardia y lograron escaparse de las instalaciones, pero todo tenía un fin y esta era la despedida.

Ahora ambos estaban regresando a sus hogares ignorándose frente a los demás, no querían levantar sospechas, después de todo era la única condición que había puesto el mayor.

Taehyung fue el primero en llegar a su hogar.

—¡Ya estoy en casa!— gritó y su madre salió rápidamente de la cocina. —Hola, mamá.

—Ahora mismo me vas a explicar porque no fuiste a clases después de tu receso.— el ceño de su madre estaba notoriamente fruncido.

—B-Bueno...— sonrió nervioso y con un poco de miedo. —¿Recuerdas al c-chico que vino la ú-última vez a buscarme?

—Oh...— su madre pareció recordar y lo miró pervertidamente. —¿Hablas del lindo chico con el que engañas a tu novio?

—Mamá, no engaño a MinHo, por última vez...— suspiró cruzándose de brazos. —Sólo estuve ayudando a Hoseok en algunas cosas, es todo.

—Si, te eduqué bien para ser un caballero, pero exactamente, ¿en qué lo estabas ayudando?— Rió cómplice.

—¡Madre!— gritó Tae con las mejillas encendidas. —¡Eres tan pervertida, ya te dije que tengo novio y es Minho!, ash... iré a mi habitación.

—Seguro a pensar en él.— murmuró su madre para luego toser.

—¡Pude escucharte desde aquí!— gritó desde las escaleras. —¡No confundas las cosas, mamá!

Después de aquello, el menor subió a su habitación lanzando la mochila a su cama y se metió al baño de la misma para darse una relajante y larga ducha de agua caliente.
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No pasaban de las ocho de la noche cuando el timbre de los Kim's fue tocado, tanto el menor como su madre se miraron confundidos sin saber quién podría ser, asi que la mujer se levantó del sofá para abrir la puerta.

Cuando estuvo frente a frente con el no invitado, se sorprendió.

—Oh...— su hijo la miró curioso. —Buenas noches, jovencito.— sonrió amablemente. —Si vienes por mi hijo, está en el comedor, pasa.— se paró a un lado, dejando pasar al joven.

—Madre, ¿quién e...?— la pregunta se quedó en su garganta cuando vió a Hoseok entrando a su hogar.

—Buenas noches.— saludó con una sonrisa a la mujer y para sorpresa de ambos, el pelirojo ya había salido corriendo a su habitación.

Decir que Taehyung estaba alterado era poco; estaba nervioso, alterado, confundido y avergonzado, llevaba puesto su pijama de Stich, no podían culparlo, hacia frío, pero no iba a permitir que el castaño lo viera así, pensaría que es ridículo.

Escuchó pisadas acercándose a su habitación y lo único que pasó por su mente fue saltar a su cama y cubrirse totalmente con las mantas, su puerta se abrió y su corazón se detuvo por un momento.

—Taehyung, no seas mal educado.— dijo su madre quitándole las mantas, dejándolo expuesto y completamente sonrojado.

—Si te ríes, juro que voy a matarte, Jung Hoseok.— advirtió el menor con voz profunda y sin mirarlo.