Lo mejor de mi

Especial #1

Una Boda Para Dos?

💒💒💒

Dije si. El día que Poche me pidió que me casara con ella, por más cliché que parezca, todas esas piezas perdidas en mi vida se acomodaron como si fuera ella la que tuviera todo este tiempo. Nuestra relación no había sido más que convencer y desesperar.

Ella necesitaba un escape y un lugar donde quedarse durante las vacaciones y yo necesitaba una mujer para fingir ser mi novia. Se suponía que nada más complejo sucedería; No era parte del plan pero, supongo, realmente no puedes planear el amor. Todas esas películas de romance cursi de las que solía burlarme; todos esos personajes de los que me burlaría por tirar tan fácilmente todos sus planes por una persona; Lo entendí ahora.

Al mirar a Poche al otro lado de la habitación, mi corazón latía uniformemente en mi pecho, supe que esta bola curva que salía del campo izquierdo valía la pena a pesar de todo el dolor que soporté. Poche me llamó la atención y sonrió brillantemente. Sí, vale la pena. Le devolví la sonrisa.

Mi familia estaba en un estado ruidoso a nuestro alrededor. Champagne se rompió por cortesía de Germán. No había habido más de veinte minutos entre la propuesta y Juli ya estaba asumiendo la planificación de la boda. Mi padre se unió, chocando febrilmente con Juli; ambos tratando de enfrentarse entre sí. Lo consideré cómico en ese momento, porque, por supuesto, mi compromiso con Poche se estaba utilizando como un juego de tira y afloja entre los miembros de mi familia. En retrospectiva, sin embargo, estaba lejos de ser divertido.

"Estoy pensando en una boda al aire libre, un entorno tipo naturaleza", Juli hizo un gesto grandioso delante de ella. Mi padre se burló. "Dani y Poche se verían hermosas vestidas de blanco entre tonos terrosos. Realmente explotarían ".

"¡Pero Imagínelas junto al océano!" Mi padre exclamó, derramando un poco de champán de su copa. "La puesta de sol a lo largo del horizonte en el fondo". Su voz se volvió soñadora y lejana.

"O, tal vez", finalmente hablé, "A Poche y a mi nos gustaría tener un aporte en nuestros propios planes de boda". Juli y mi papá se volvieron y me miraron, con los ojos desorbitados entre Poche y yo.
"Tienes razón, Dani, deberías opinar", dijo mi papá. "¿Dónde crees que te gustaría casarte?"
"Yo ... no sé ... todavía".
"¿Poche?" Juli preguntó, alejando la atención de mí.
"Oh, um, cualquiera de los dos que tú y Germán dijeron sonaba encantador", Poche sonrió fácilmente.
¿Ves, Daniela? Poche está de acuerdo con nosotros ", la sonrisa complacida de mi padre cavó debajo de mi piel.

Debería haber sabido que eso no iba a ser el final. Pensé que tal vez Poche intentaba mantener el ánimo ligero y la tensión baja, pero ese fue el comienzo de todo. El comienzo de que Poche solo tenía un interés personal en lo que mi familia o yo queríamos. Nunca escuché lo que ella quería o le gustaba. Durante meses después de nuestro compromiso, la planificación de la boda cayó en su apogeo. Se arrojaron ideas; Todos dieron su opinión y me refiero a todos: Tata, Sebas, Val, Alejo, tío Johny, incluso Bella tenía sus dos centavos para contribuir. Toda mi familia, pero no Poche.

Al principio, pensé que tal vez ella no sabía lo que quería. Tal vez nunca había imaginado cómo sería el día de su boda y lo entendí hasta cierto punto. Pero después de las primeras dos semanas, se hizo evidente que tal vez ella no sabía lo que quería. ¿Ella incluso me quiere?
Hace poco más de dos años, Poche me había dejado por Mario. Sé que cayó en el atractivo abrazo de la familiaridad y la comodidad. A pesar de los pocos años, las múltiples promesas y la montaña de confianza que tenemos la uno para la otra... mi mente no puede evitar ir a ese lugar. El lugar donde esas inseguridades y miedos permanecen latentes y todavía puedo escucharlos de vez en cuando, susurrando, haciendo eco, haciéndome retroceder ...