Día 5

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Bien, de nuevo a la escuela, el domingo no se circula así que Kaminari tuvo que pasar un día sin regalo

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Bien, de nuevo a la escuela, el domingo no se circula así que Kaminari tuvo que pasar un día sin regalo. Afirmaste tu mochila mientras la Bakusquad caminaban juntos por los pasillos rumbo a su salón.

A pesar de que Mina y Katsumi eran tus mejores amigas, Katsumi siempre se iba por su lado junto a Shouto y Deku. Más conocidos como el trío idiota que siempre hacia pelotudeces y se metía en problemas por el simple hecho de respirar. En serio, el único cuerdo en esa relación era Deku.

Pero volviendo al tema principal, tenías algo bastante simple pero que creías que le gustaría al rubio eléctrico. Era un pequeño frasco de vidrio con papelitos y dulces dentro.

De nuevo esperaste hasta que llegara la hora del almuerzo y le pediste a Izuku, Katsumi y Shouto (quien se enteró por Deku) que dejara el paquete en el lugar de Kaminari mientras tu te ibas junto a la Bakusquad.

— Siempre me había preguntado que clase de chico le puede llegar a gustar a las chicas del salón y en serio que no dejan de decepcionarme con sus gustos —murmuro el bicolor con curiosidad mirando el frasco sobre la mesa del rubio—, la que sale con el gritón Tsundere y a la que le gusta el pervertido que carga los celulares.

— Cállate que yo no sé cómo Izuku se fijo en alguien como tú —gruñó la pelirosa golpeándolo—. Hijos míos, la misa de hoy a terminado, podemos ir en paz.

— Aleluya, aleluya —respondio el bicolor desde el piso.

— ¡Vámonos perras! —y los tres salieron corriendo del salón.

Todos regresaron del almuerzo con ganas de ver qué se encontraban ahora en el salón

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Todos regresaron del almuerzo con ganas de ver qué se encontraban ahora en el salón. Kaminari entro saltando cuál dulce oveja por la pradera emocionado y eso te puso feliz y celosa.

Si cualquier otra chica fuera la que usaba el truco de los treinta días, Kaminari iría así por la vida por esa persona aunque lo no conociera, justo como lo estaba haciendo en ese preciso momento. Aunque también te ponía feliz porque eso solo quería decir que aunque no le gustaras tu, le gustaban tus detalles y quizá si podía verte de forma diferente el día que tú tuvieras que decirle las cosas de frente.

El rubio tomo el frasco con cuidado y todos rezaban internamente porque no se le resbalara y se rompiera en mil pedazos, superstición de grupo, no podían llamarlos paranoicos si todos creían lo mismo. Pero no fue así y todos respiraron tranquilos cuando el frasco estuvo seguro, sano y salvo dentro de la mochila del rubio.

Abrió la carta ahí mismo pero no la leyó en voz alta, se sentó en silencio a leerla mientras Mina y Hagakure trataban de ver qué decía pero el rubio no lo permitió.

»"¡Kami!.
No vas a creer lo que me pasó,
me pelee con mi hermano en
un Walmart porque los dos
queríamos la misma bolsa de
dulces. ¿Adivinas quién ganó?,
Pues yo.. obvio que yo, soy
la mera chingoneria.

Ah, sobre el regalo, es sencillo,
es bonito y creo que te gustará.
Se que normalmente no eres
alguien a quien siempre se le
ve comiendo, pero un dulce
de vez en cuando no hace mal.
Me voy a poner modo cursi,
los papelitos dentro del frasco
son algunas de las cosas que
me gustan de ti y frases MUY
cursis, lo siento, pero me
pongo medio estúpida
cuándo se trata de tí.

En fin, es todo lo que tengo para
decir hoy, me he estado matando
con tarea así que estoy medio
muerta y no pienso bien.
Me gustas mucho.

Hasta aquí mi reporte Joaquín."«

El rubio sonrió, juraba que había escuchado esas expresiones antes, pero no recordaba nada en concreto y lo frustraba. Al menos ahora tenía más piezas para su rompecabezas. Sabía que eras de uno de los cursos de héroes, no sabía específicamente en que año así que podrías ser mayor o de la misma edad y que al menos una de las chicas del salón sabía quién eras. Pero todas habían negado cuando el pregunto.

— Oye Denki.. ¿Vamos a comprar dulces al Walmart después de clases? —preguntaste con toda la intensión del mundo, pero la cara del rubio claramente decía: "cargando..".

— Claro —respondió echando humo por las orejas, se estaba esforzando mucho.

Mina y Katsumi intercambiaron miradas confundidas y suspiraron decepcionadas.

Mina y Katsumi intercambiaron miradas confundidas y suspiraron decepcionadas

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Detalles【 Kaminari Denki 】Donde viven las historias. Descúbrelo ahora