Mini Dragon Slayer

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Natsu, Lucy, Gray y Erza se fueron por una petición de trabajo. Fueron contratados para matar a un monstruo y cosechar su sangre para una poción. Se las arreglaron para derrotar a la bestia con facilidad antes de volver al alquimista que quería la sangre. Mientras esperaban que el viejo completara la poción en su tienda, Natsu, siendo el idiota que es, decidió revisar algunas de las pociones que había dentro de la tienda. Descorchó una al azar y se la bebió. Erza se dio cuenta de lo que hacía justo a tiempo para verle terminar el frasco. "¡Natsu!" Ella gritó.

El alquimista levantó la vista de su trabajo y le golpeó la palma de la mano en la cara de forma molesta. "Sabes, la mayoría de la gente no va por ahí bebiendo pociones al azar que podrían hacer Dios sabe qué." Dijo sarcásticamente.

"Natsu no es la mayoría de la gente." Gray dijo en un tono avergonzado.

"¿Bebió algo peligroso?" Lucy preguntó preocupada.

El alquimista se levantó y cogió la botella de la mano de Natsu. "No lo parece. Bebió una poción para encoger".

"¿Una poción de encogimiento? ¿Por qué harías algo así?"

El viejo se encogió de hombros. "No uso las pociones. Sólo tomo las peticiones y las hago. No es asunto mío lo que la gente quiera hacer con ellas".

"Por favor, no me digas que es caro." Lucy suplicó.

"No te preocupes, no lo es. De hecho, el comprador canceló. No sé por qué, pero lo hicieron. No te preocupes, no te descontaré nada de tu paga". Él dijo,

"¿Qué pasa con Natsu? ¿Qué le pasará?" Preguntó Erza.

"Se volverá muy pequeño en 3... 2... 1... ahora." Por supuesto, Natsu comenzó a encogerse, haciéndose cada vez más pequeño hasta que pudo caber en la mano de alguien.

El cazador de dragones miró a todo el mundo y se volvió hacia sí mismo. "¡Woah! ¡Mirad esto! ¡Soy tan pequeño como cuando luché contra Gildarts!"

"Por favor, dime que esto desaparecerá." Erza dijo desesperadamente.

El viejo asintió con la cabeza mientras se acariciaba su pequeña barba. "Volverá a la normalidad al final del día. Por ahora, asegúrate de que nadie pise al idiota."

"¡¿Cómo me llamaste?!" El pequeño Natsu gritó.

"¡Te llamé idiota! ¡¿Me has oído?!" El hombre gritó.

"¡¿Quieres que te golpeer, viejo?!" Natsu lloró. "¡Apuesto a que todavía puedo golpearte!"

El anciano puso su dedo medio sobre su pulgar y puso su mano delante de Natsu. "Lo dudo, hijo." Soltó su dedo y tiró a Natsu por la habitación, tirándolo a un cubo de basura.

Después de sacar a Natsu del cubo de basura, los magos regresaron a Fairy Tail con Happy llevando a Natsu en la cabeza. Después de explicar lo que le había sucedido a Makarov, el gremio se llenó de risas. El pequeño Natsu intentó luchar contra ellos, pero cada vez que alguien aceptaba el desafío, quedaba literalmente sorprendido por sus oponentes.

Cuando las risas se calmaron, Natsu empezó a cabalgar por el gremio a espaldas de Happy. "¡Adelante! ¡Reclamaremos la victoria este día!"

"¿Qué soy yo, tu caballo?" preguntó Happy.

"¡Tonterías! ¡Tú eres mi corcel! "

"Es lo mismo, Natsu..."

"¡A LA VICTORIA!" Gritó...

"Lo siento Natsu, pero estoy cansado. Quiero un pescado." Tan pronto como dijo eso, Happy se sumergió en el gremio, haciendo que Natsu se aferrara a la vida hasta que finalmente perdió el control, enviándolo en picado hacia el suelo.

Las travesuras de NatsuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora