La resiliencia de Allison Sallow.

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•DarcyI•

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Allie.

El día había llegado, finalmente hoy será el día en el que mis investigaciones progresaran inmensamente. Viviendo en el territorio Armstrong como la compañera de su líder tendré mucha ventaja para obtener información. En unas cuantas horas Alexander vendrá a buscarme, le ha pedido a Chloé acompañarle para garantizarme comodidad, mientras todo esto pasa yo empaco mis cosas y algunas pertenencias de Chloé que busque en su casa. Mi abuela aún está sensible, la idea de tenerme a unos cuantos kilómetros se le hace difícil pero no mortal, mi padre por su lado se muestra afectado pero está tomando las cosas con calma, tiene presente la ventaja que nos da todo esto y Aidan promete a cada instante mantenerme informada sobre cualquier cosa relevante de la manada.

Las cosas estaban tensas en el mundo sobrenatural, tras haber encontrado aquel cadáver en el bosque los humanos que vivían en este lugar decidieron mudarse de Misterywood, haciendo la relación entre Elle y Trevor muy difícil. Elle ya posee la mayoría de edad y puede hacerse responsable de sí misma, por ello ha decidido emanciparse y en algunos días lo habrá logrado, para eso Artie le ha ofrecido empleo y Trevor un lugar en su casa. Ha sido tan extraña la partida de los humanos, que me resulta agobiante, todo es agobiante, Eastwood se siente tan extraño.

Recuerdo el día siguiente de haber encontrado el cadáver de aquella chica, Jeffrey me citó en su oficina para hablar de lo ocurrido, descubrió todo lo que hice y me pidió que no me preocupara, además de reñirme pues si no tuvimos nada que ver con el asesinato no teníamos porque crear una cuartada y sí; le hablé de la cabaña, en cuanto a eso me tranquilizó pues no mencionaría la existencia de ese lugar.

Termino de empacar mis últimas cosas justo cuando el pequeño Chris entra a mi habitación, no se notaba tan triste como con la partida de su hermana, además que siempre que Chloé viene de visita la abuela lo busca para que platiquen.

-¿Ya te vas?-Pregunta mientras cierro mi equipaje, ante su pregunta negué con la cabeza.

-¿Cuando te vas?-Pregunta cubriendo sus palmas con las mangas de su suéter borgoña.

-Cuando Alexander pase por mí. -Respondo dejando mi equipaje y dirigiendo toda mi atención a él-, quizás sea en unas horas, o unos minutos.

-¿Por qué te tienes que ir?-Reprocha con tristeza notoria-, ¿Por qué Chloé y tú ya no quieren vivir junto a mi?

-No, no, Chris escucha-Tomo su pequeño rostro entre mis manos-, Chloé y yo siempre estaremos para ti, porque te adoramos ¿vale?

-Vale-Responde inseguro-, pero se siente así. Ya ni siquiera pude contarle a Chloé sobre Marcus, el amiguito que hice en el parque, ella siempre se va muy rápido.

-Chloé viene hoy, ¿Qué te parece si le cuentas eso?

-¿Chloé viene hoy?-Pregunta con emoción y yo asiento a su interrogante-, le voy a contar todo.

Unos golpes en el marco te mi puerta nos interrumpen; era Aidan.

-¿Pasa algo?-Digo al mirarlo, me pongo de pie y sacudo mis pantalones,

-Alexander está abajo-Informa-, ha quedado con que Kian irá los sábados para los entrenamientos, él ha puesto las millas que conforman su ampliada vivienda a tu disposición, para los entrenamientos.

Dirijo mi mirada a Chris quien ya estaba saliendo del lugar totalmente preso de la curiosidad por saber quien es Alexander, además Chris era un niño, pero no tenía ni una pizca de tonto, sabía que Aidan tenía algo que contarme, cumpliendo su promesa de mantenerme al tanto.