Capítulo 33: Cuidado con su mal humor

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Marzo del año 2018

Universidad para Idols de Seoul

UPIDS

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—Gracias a ambas por todo su apoyo, nos vemos mañana Shin Hye-ssi y hasta el miércoles Lisa-ssi —se despidió agradecido Jae Suk.

Ya habían pasado unos 35 minutos después que Lisa dejó a Ji Ra copiando para ir a ayudar a Shin Hye y Jae Suk. Luego de que terminaron todo el trabajo, se despidieron de Jae Suk, quien les reiteró su agradecimiento por haber recibido el apoyo de ambas hermanas.

Gracias a usted por la paciencia, me hubiese gustado ser más útil. Hasta el miércoles Jae Suk sumbae-nim —respondió Lisa antes de hacer una última reverencia.

Necesitamos al menos dos fotógrafos junior, y de manera urgente, pues empiezo a creer que uno no es suficiente. El trabajo de Jae Suk-Sumbae-nim no es nada fácil, mira lo tarde que hemos terminado —comentaba Lisa mientras ella y Shin Hye caminaban por el pasillo del séptimo piso.

—Si, estoy de acuerdo, pero él dice que va a tratar de convencer a Hee Chul para que regrese, y que por ahora solo necesitamos conseguir a uno y eso haré.

Lisa hizo una mueca retorciendo la boca. —Eso estamos haciendo —le recordó a su hermana mayor—, y contrataremos al que haga el mayor esfuerzo, el que sea más talentoso —agregó la rubia mientras presionaba el botón del elevador.

—Exacto, no puede ser un cualquiera. Quien entregue el trabajo que más le guste a Jae Suk sumbae-nim el próximo miércoles, será la persona que vamos a seleccionar de inmediato para ese puesto.

—Si, pienso que a veces puedes tener excelentes ideas Unnie —expresa Lisa antes de reír por lo bajo. Inmediatamente se puso seria al percatarse de la mirada asesina que le entregaba su hermana mayor.

—¿A veces?

Lisa respondió afirmando la pregunta de su hermana solo para verle un poco más molesta.

—¡!Lisa-yah!!! —llamaba Jung Kook a la rubia cuando la puerta del elevador se abrió en el tercer piso. Lisa sonrió al mirar quien esperaba del otro lado de la puerta del ascensor.

—¡Uh! ¿oppa? ¿Qué haces aquí a esta hora
? —preguntó Lisa, borrando su sonrisa, su entrecejo mostraba confusión cuando vio a su hermano mayor acompañado de Nam Jun.

Shin Hye saludó con una reverencia al chico alto de cabellera rubia-platinada y luego se dirigió a su hermano menor por dos minutos de diferencia.

—¡Uh!, qué bueno que estás aquí, porque yo me temía que Lisa no tenía con quien irse a casa —expresaba la pelinegra por vez que empujaba a Lisa arrinconándola dentro del ascensor.

Los chicos se acomodan en el espacio que Shin Hye hizo para ellos.

—Pero yo no voy a casa ahora —informaba jung kook, quien tenía planes de irse directo al apartamento de Nam Jun—, ¿por qué no la llevas si de todos modos las dos van hacia allá?

—Porque solo a veces tengo excelentes ideas —a la pelinegra solían salirle los sarcasmos hasta por los poros. Nam Jun y jung kook no entendieron lo que quiso decir—. ¿Y quién te dijo que yo voy a casa?

El pelinegro se encogió de hombros haciendo una mueca que mostraba obviedad. —Nadie me lo dijo, solo lo supuse, ¿no irás a casa?

—Bueno, si voy —afirmó su gemela antes de desviar el rostro para mirar hacia cualquier lado de la cabina—, pero no quiero llevar al cuenco de lleno de huesos. Así que llévala tú —la puerta del ascensor se abrió en ese momento llegaron al piso cero que pertenece al estacionamiento—. Me voy primero, adiós Nam —Shin Hye se despidió antes de salir del elevador y dirigirse hacia su auto.

—Adios Shin Hye-ssi —vociferó Nam antes de mirar con reproche a la hermana menor de jung Kook—. ¿Y ahora que le hiciste, Lisa-yah?

El pelinegro se quedó mirando cómo su hermana gemela se alejaba —¿Por qué está así ahora?

La rubia se encoge de hombros, sin sumarle importancia a la forma en que Nam Jun la estaba observando —mhm, nada importante, ya saben cómo es ella—. Se cuelga alegremente del brazo de su hermano —oppa, ¿me llevas a casa por favor?

Jung Kook se queda pensativo un breve momento antes de responder. Llevaría a su hermana y luego iría al apartamento de Nam Jun.

—¡Claro que sí! —afirma sonriendo hacia el rostro de su hermana—, ¿cómo voy a dejar a mi única princesa tirada?

La rubia continuaba prendida del brazo de su hermano y comenzó a dar saltitos de alegría provocando leves sacudidas a Jung Kook —me gusta mucho cuando estás de buen humor —celebraba una Lisa satisfecha y feliz.

Nam Jun, esperanzado, aprovechó el momento para preguntarle a su dongsaeng si iba a quedarse en su propia casa esta noche. Sin embargo, la respuesta del moreno no era la que esperaba.

—Claro que no —responde con demasiada obviedad de sus facciones—, solo dejaré a Lisa en casa, aprovecho para darme un baño y luego caeré en tu apartamento, hyun-nim.

El rubio perdió la oportunidad de deshacerse del menor, al menos por esta vez — bien, así que... ¿nos vemos? – preguntó Nam frunciendo los labios y rascándose la nuca con la yema de sus dedos.

Jung kook se percató de la reacción de su líder, pero no le importó. No creía que cumplir con su objetivo de pasar un rato en el balcón de su habitación le haría daño en lo absoluto. Así que para continuar con el plan debía apurarse a llevar a lisa a casa.

Lisa siguió la señal de su hermano de que apurara el paso, pero de repente se detuvo, provocando que éste chocara contra su espalda —oppa, acabo de recordar que necesito ir por mi material antes de irnos.

La menor se giró sobre sus pies y sintió el peso de la mirada que su hermano le entregaba, su lengua chocando ansiosa contra las paredes interiores de sus mejillas. Ella se sintió culpable por su torpeza, era más que evidente que esto molestó a Jung Kook, quién rápidamente cambió su expresión por una más risueña, después de haber soltado un largo suspiro.

El pelinegro posó sus manos sobre cada hombro de su hermana, parecía luchar para no perder la paciencia —yo voy por él, ¿dónde está?

—Lo deje en el salón 1-D del edificio C —balbuceó la menor con una sonrisa culpable.

El pelinegro reaccionó soltando un "¿Qué?" para luego agarrarse el puente de la nariz —¡¿en un salón de los edificios para docencia?! —preguntó incrédulo—. ¡Creía que te referías a una de las oficinas de aquí!

La rubia comprendió que la situación ha servido para comprobar que a su hermano le sigue molestando algo, no es común en él molestarse por cosas como esas —está bien, si estás tan cansado iré por mis cosas yo misma, tú espérame en el vestíbulo. Ya regre...

La menor inició su camino devuelta hacia el ascensor, cuando fue detenida por el agarre de su hermano, él había cerrado su mano alrededor de su antebrazo, impidiendo que continuara sus pasos.

Ella volteó para ver al moreno con el ceño más fruncido que nunca y escucharle decir que ella no iba a ninguna parte. El mayor le recordó cuánto le disgusta ir allá, antes lo hacía solo cuando era necesario, pero les disgusta más aún que su hermanita fuera y menos sin ser necesario. Luego de su recordatorio dictaminó que ella es la quien debe esperar en el vestíbulo.

—¿En cuál salón dijiste que era?

La chica por primera vez se sentía intimidada por su hermano. Con algo de dificultad le repitió la ubicación del salón —en el 1-D del edificio C.

—De acuerdo —respondió Jung Kook por vez que tomaba a una silenciosa Lisa de la mano —te dejaré en el vestíbulo y nos veremos al rato.

Tan pronto como la puerta se abrió el pelinegro se precipitó a correr hacia el campus. Lisa quedó muy preocupada, porque desde el viernes pasado su hermano no se ha estado comportando como normalmente lo hace, con esos pensamientos Lisa llegó a una de las áreas del vestíbulo y se encontró con Tae Hyung, quien se había quedado dormido en uno de los muebles. 

𝓛𝓪  𝓬𝓱𝓲𝓬𝓪  𝓭𝓮  𝓵𝓪  𝓪𝔃𝓸𝓽𝓮𝓪 [ IU x JJK ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora