38. Punto de partida

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Tres días, ¡Tres! Ya habían pasado tres días desde que colocaron el micrófono en la sala de profesores y aún no tenían noticias de Hatsume. La paciencia nunca había sido el punto fuerte de Bakugou y menos en aquellas circunstancias, cuanto más tiempo pasaba sin noticias más impaciente se sentía. Por lo que tenía que usar todo su autocontrol, o más bien Todoroki y Uraraka tenían que detenerlo, para no aporrear la puerta de la inventora varias veces al día en busca de información.

Por desgracia, las pocas veces que finalmente si había ido a preguntar qué tal iba la investigación habían acabado en un completo fracaso. Lo único que había conseguido era que la inventora lo echara de mala manera de su extraña habitación-taller, sin que le dijera nada de nada. Pero ahora sí que había alcanzado su límite, si la chica no pensaba decirles nada tendría que hacerla hablar por la fuerza.

- ¡Espera! Bakugou-kun ¡Por favor! - Suplicó Uraraka agarrándolo del brazo.

- Ya me harté de esperar - Replicó Bakugou - Se acabó.

Bakugou se deshizo del agarre de la chica y se encaminó dando grandes zancadas hacia la habitación de Hatsume.

- ¡Todoroki-kun di algo! - Pidió la chica mientras miraba con ojos suplicantes a Todoroki.

- No creo que nada de lo que diga consiga hacerlo cambiar de opinión - Contestó Todoroki - Además, Bakugou tiene algo de razón, han pasado tres días y no sabemos nada tal vez ha llegado el momento de ver cómo van las cosas.

Bakugou se sorprendió al ver a Todoroki dándole la razón pero no dejó que la emoción se reflejara en su rostro. Simplemente se dirigió hacia su objetivo esquivando las manos de Uraraka que aún intentaban retenerlo.

- Visto así, bueno vale, supongo que tenéis razón - Se resignó Uraraka.

Uraraka se giró hacia Bakugou mientras decía esas palabras pero al hacerlo se dio cuenta de que el chico se encontraba bastante lejos de ellos.

- Si no os dais prisa os dejaré aquí - Gritó desde lo lejos Bakugou.

- ¡Espéranos!

Todoroki y Uraraka se apresuraron a alcanzarlo y en seguida estuvieron en la habitación de la chica. Nuevamente el desgastado cártel y la maltrecha puerta de metal los recibían. Uraraka alzó su mano para llamar pero antes de que pudiera abrir la puerta Bakugou se adelantó y la abrió bruscamente.

- ¡Bakugou! ¡¿Qué haces?! - Susurró Uraraka horrorizada - ¿Es que no sabes abrir puertas de forma normal?

- ¡Ehh! Tú, han pasado tres días y no nos has contactado. ¿Es que acaso tu cacharro se ha roto? - Soltó Bakugou mientras se adentraba en la habitación, ignorando completamente a Uraraka.

La pequeña habitación se encontraba tan desordenada como el primer día que la visitaron y entre el montón de trastos que se acumulaban por toda la habitación se encontraba Hatsume. La chica, que se encontraba sentada en el suelo con un portátil sobre sus rodillas, escuchaba atentamente a través de unos auriculares conectados a este y su expresión reflejaba gran concentración. Al verlos alzó su mirada y los observó con fastidio.

- Otra vez tú - Le echó en cara Hatsume - La paciencia no es lo tuyo, ehh. Aunque hoy estás de suerte.

Y entonces contra todo pronóstico sonrió ampliamente y les hizo señas con la mano para que se acercaran. Bakugou se adentró en la habitación sin dudarlo un solo segundo, esquivando los objetos que había por el suelo se dirigió hacia Hatsume, Uraraka y Todoroki compartieron una mirada emocionada antes de seguirlo. Al llegar junto a la chica esta se quitó los auriculares y sonrió una vez más antes de hablar.

- Los tengo - Dijo con voz triunfante - Justo están hablando de ello ahora mismo.

Tras decir esas palabras la chica desconectó los auriculares del portátil, dejando que todos escucharan las voces que había estado oyendo a través de ellos. Bakugou reconoció las voces de All Might, el director, Mid Night y Present Micro aunque otras voces desconocidas para él participaban también en la conversación.

- ¿Podemos fiarnos de la información? - Escucharon hablar al director.

- Si, no fue fácil obtenerla pero los datos obtenidos concuerdan con los hechos ocurridos durante el torneo - Contestó una voz desconocida.

- Entonces, ¿El joven Midoriya está siendo controlado por alguna clase de quirk? - Preguntó All Might.

- Así es, se trata de un quirk de control mental y pertenece a una chica llamada Chloe Ravendolh - Añadió la voz desconocida.

El corazón de Bakugou dio un vuelco, así que era cierto que todo había sido a causa de un quirk. Una sonrisa empezó a formarse en sus labios, de repente parecía que había desaparecido un gran peso sobre sus hombros. No es que no confiara en Deku pero al escuchar la verdad de labios de aquellos héroes profesionales sintió un gran alivio.

- A continuación tenéis una foto de la chica, memorizad sus rasgos pues ella será uno de los principales objetivos en la operación de la semana que viene.

¿Operación? ¿La semana que viene? Bakugou apretó sus puños con fuerza, la emoción lo desbordaba. Ojalá pudiera ver la foto también.

- El día de la operación atacaremos por la noche, el objetivo de nuestra misión es rescatar al joven Midoriya y desmantelar la base de operaciones enemigas - Dijo All Might con voz seria - Será una operación a gran escala, no os descuidéis, no podemos fallar.

- Con esto concluye la reunión - Anunció el director.

Bakugou sintió un escalofrío recorrerle, su bello completamente de punta. Cerró los puños con fuerza en un intento de controlar el ligero temblor que sacudía sus manos. Miró hacía su derecha y Uraraka le sonrió con alegría, lo habían conseguido, aquel era su primer paso.

- Estoy recogiendo en un documento toda la información sobre la operación de rescate - Dijo Hatsume - Os lo entregaré en breve, cuando acabe de retocar los últimos detalles.

- ¿Sabemos el lugar donde tienen a Midoriya? - Preguntó Todoroki.

- Por supuesto, absolutamente todos los detalles de la operación se encuentran en el documento, mi micrófono funcionó perfectamente solo queda que se autodestruya esta noche.

- ¿Puede hacer eso? - Preguntó Uraraka sorprendida.

- Por supuesto, es lo mínimo que debe hacer un buen micrófono de espionaje - Contestó Hatsume - ¿O acaso piensas volver a por él?

- Eres impresionante - Bromeó Uraraka ocultando una risa.

- Por supuesto que lo soy - Contestó Hatsume orgullosamente - Aunque es una pena tener que destruir un micrófono tan impresionante.

- El mejor de los micrófonos - Dijo Uraraka arrancando una sonrisa satisfecha de Hatsume.

- Por desgracia no tiene cámara ni nada parecido así que no podremos obtener la foto de la que hablaban los héroes - Dijo Hatsume.

- Pero al menos sabemos que es una chica llamada Chloe - Dijo Todoroki - Tendremos que estar alerta.

- Espero que estéis preparados porque vamos a estar muuuuuy ocupados esta semana. Hay muchísimas cosas que planificar y preparar, ¡Crearemos nuestra propia operación de rescate!

Hatsume empezó a reír histéricamente tras estas palabras pero Bakugou no le hizo caso, por una vez no le molestaba la aparente locura de la chica. Estaba realmente emocionado, aquella era la primera pista real que lo acercaba a Deku, aquel era su punto de partida. Solo podía pensar en que estaba un poco más cerca de ver a Deku de nuevo y esta vez no permitiría que nadie ni nada los separara.

Ojos que no venDonde viven las historias. Descúbrelo ahora