Hola, mi nombre es Alejandro Guerra Fountain, tengo 19 años y lo que mas me apasiona en la vida es la música...Esa fue mi corta e insignificante presentación en el primer día del segundo año en la universidad, todos los estudiantes de Lexington College nos conocíamos desde hace años, pues la mayoría asistimos a las mismas escuelas de Chicago, pero cada inicio de cursos era lo mismo, dar una absurda introducción en resumen de tu vida, a nadie le importo si quiera, todos tenían mejores cosas que hacer que prestar atención a cualquiera de las tonterías que dije, después de mi corto discurso entre al salón y me coloque en el rincón más apartado, no porque sea un tipo apático ni mucho menos, simplemente no me gusta importunar ni que se metan conmigo a la primera...
Poco a poco se fue llenando el lugar, vi llegar a mis amigos, tenían la misma falta de interés que yo, lo único que nos llenaba era la música como ya lo dije antes, para nosotros no hay nada mas cierto que poder expresarte a través de eso, mi instrumento favorito es el bajo, pero disfruto de otros como la batería, el piano, aunque aquí debo hacer un paréntesis, ya que mi gusto por la música no es porque mis padres me hayan inscrito en clases desde niño, no, ojalá hubiese sido así, pero para mi mala suerte o como le quieran llamar he crecido solo, mis padres tienen que trabajar en el pequeño negocio de la familia, un restaurante en el centro de la ciudad...
Mi gusto por la música surgió de repente, cuando descubrí que era mejor colocarme los audífonos a escuchar como mis padres discutían por las cuentas que había que pagar y a la fecha lo siguen haciendo, después con mis compañeros del colegio, los mismos que hoy me saludan con nuestro "saludo de rockstars" aprendi lo que hoy se, que en la música he encontrado todo lo que me faltaba, ellos y yo aprendimos sobre la marcha lo increíble de la música, esa magia que envuelve y transforma todo con un simple acorde de guitarra...
-Hey, que te pasa?- Me dice Mateo el mas rebelde de todos, si acaso hay alguien peor que yo en eso...
-Que me pasa de que?- respondo sin mas...
-No se, pero te noto extraño..- insiste
-Si te ves algo "raro"- afirma Diego apoyando a Mateo, los miro enmarcando mis cejas, no entiendo a que se refieren...
-No me pasa nada, es solo que esta estupida rutina de presentarnos me fastidia- cubro mi cabeza con mis manos...
-Tranquilo Alex, solo es el protocolo...- Dice Leo, dándome una palmada en la espalda....
-Estoy harto...- dije entre mi, así era, todo eso me tenía harto, cansado de siempre hacer lo mismo, como en esa película de bloques en la que todos están como programados para hacer lo mismo, así pasa aquí, en esta ciudad donde tus padres te dicen que estudiar, como condición para dejarte vivir como quieres...Mis amigos y yo elegimos mercadotecnia, porque? Porque en el momento de inscribirnos pensamos que nos ayudaría con nuestro proyecto "musical" porque para variar tenemos una banda, que jamás ha tocado frente a nadie mas que nosotros, intentamos "componer" canciones sin sentido, lo que nos salga eso hacemos, así que entramos a esta carrera que si no fuera porque mis neuronas aún se mantienen vivas ya hubiese desertado desde el primer día...
-Bienvenidos Jóvenes...- La inconfundible voz del profesor Márquez me hizo alzar la mirada, otra vez su discurso "motivacional"...
-Ya están a la mitad de su carrera, espero que no por eso dejen de poner todo su esfuerzo...- continuó mientras yo plasmaba una nueva "idea" para la próxima canción de la banda sin nombre, como le decíamos de broma...
-Usted que opina de eso Guerra?- Resople y me acomode en mi asiento, mientras todos me miraban esperando una respuesta, mi habilidad para estar concentrado en más de una cosa a la vez, sacaba de quicio a todos los profesores...
-Que opino? En verdad quiere saberlo? Me puse de pie...mis amigos me miraron tratando de "controlarme"...
-Por favor, díganos...- insistió el profesor...
-Pues bien, si usted insiste le diré que no se porque se empeñan en tratarnos siempre igual, por Dios! Ya no somos unos niños, mirenos! Cree que con venir a decirnos lo de cada año, vamos a ser como esperan todos?- Dije un tanto acelerado y agitado recargado sobre el respaldo de la banca de mi amigo Mateo que me miraba atónito, como el resto de mis compañeros...
-Esa no es forma de dirigirse a su profesor...- Respondió nervioso, hice una media sonrisa de satisfacción, tome mis cosas y salí directo a detención, como siempre, ni siquiera los castigos habían cambiado con el paso de los años...Entre al salón, la profesora Stevens me miro nada sorprendida, solo había dos tipos jugando poker al fondo, me sente junto a la ventana más grande, la que daba a un pequeño jardín solitario, como mi alma, no les he contado que también soy poeta? Pues lo soy, pesimo por cierto, porque todo lo que escribo siempre es oscuro, deprimente, pero que se puede esperar de un sujeto con una vida tan vacia como la mía?
Una risa escandalosa irrumpe en el lugar, no quiero ni voltear pues se bien que se trata de Támara Hanes, la más "extrovertida" de la universidad y mi compañera en varias clases, parece que hace cosas a proposito para que la manden a detención cuando yo estoy ahí...
-De nuevo tu por aquí?- Le dice la profesora Stevens, justo lo que yo me preguntaba...
-Ay si ya se lo que me va a decir Profesora Stevens, pero le juro que yo no hice nada malo!- como me pone de malas su voz chillona...La profesora Stevens le pidió tomar asiento y que hizo ella, obvio, buscar el lugar más cercano a mi, como si yo quisiera hablar con ella, al notar su inútil estrategia regrese a mi cuaderno de canciones y notas, estaba por terminar una estrofa de la nueva canción para mi banda cuando Lindsay interrumpió...
-Puedo ver que escribes?- tratando de acercarse a mi cuaderno...
-No, no puedes...- Lo cerré de golpe.
-Eres un pesado!- gritó golpeándome con su bolso..
-Y tu una gol....- me interrumpió la profesora Stevens...
-Alejandro! Que son esos modales?-
-Eso, no son modales y si me disculpa me iré...-Salí del edificio, para ser el primer día ya llevada dos discusiones, nada mal para mi, en la explanada principal ya me esperaban mis amigos, tenían un balón de fútbol americano, ese deporte era otra de las cosas que nos gustaba hacer para no estar en casa, los padres de mis amigos también tenían problemas, y la mejor manera de evitarlos era estando lo menos posible con ellos.
-Que cara traes!- Grito Leo lanzandome el balón.
-Ni me digas...- se lo pase a Diego..
-Pues que paso?- Lanzando el balón a Mateo, este último se lo quedo, esperando que yo respondiera su cuestionamiento...
-Pfff.....Támara...eso paso...-
-Pero que esta golfa no piensa dejarte en paz? No se en que momento se te ocurrió...- Dijo Mateo a lo que yo lo fulmine con la mirada...
-Maldita sea Mateo! Hasta cuando dejarán de recordarme esa estupidez?-
-Hey! Calmate Alejandro, Mateo solo esta diciendo la verdad...- Y una vez más Diego y Leo poniendose en mi contra, lo bueno que son mis amigos...
-Lo siento Alex, no quise molestarte...- susurro Mateo dandome la mano...
-No, tu no tienes la culpa, ninguna la tiene, solo yo, por idiota, si tan solo me hubiera dado cuenta de sus intenciones cuando la conocí...-
Recapitulando, Támara y yo nos conocimos en la secundaria, ya saben yo todo inexperto conquistador y ella lo contrario, sabia muy bien como mover sus piezas, entro en mi vida en uno de los momentos más difíciles para mi, cuando mis padres estuvieron a punto de divorciarse, me salí de la escuela, me aleje de mis amigos y totanmente creí que solo la tenía a ella para apoyarme, mentira, lo que Támara quería era tenerme sometido, arrastrandome detrás de ella, lo peor fue que así termine, mi familia destruída, sin amigos y sin animos de nada, todo por su culpa.
Pero fue entonces cuando la música me rescato una vez más, mis amigos formaron la banda y necesitaban un bajista, me buscaron día y noche, durante meses hasta convencerme de unirme a ellos, después de pedirles miles de disculpas, hablar con mis padres y regresar a la escuela, pero para Támara la historia no ha terminado, ella piensa que aún tiene influencia sobre mi, que equivocada esta, por eso es que aprovecha cualquie ocasión para hostigarme, para amedrentarme y yo sin pena hago de todo por ofenderla, por hacerle saber cuanto me dolió lo que me hizo, que s aprovechara de mi situación para su beneficio, para mostrarle a todos que yo formaba parte de su colección de novios, amantes, pues si con ella también tuve la mala suerte de estrenarme en eso de la intimidad, en fin, solo nombrarla o verla me pone mal, demasiado mal.
NOTA IMPORTANTE: Esta historia formará parte del concurso "Los Oscares de Wattpad" por lo que quiero dedicar este capítulo a Eleanorigbysdream
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Arriesgado Amor
RomanceAlejandro y Renata, dos almas perdidas en un mundo en que las apariencias pesan mas que los sentimientos. "Eres eso que siempre pedí a la vida no conocer..."