☁︎ Capítulo ;; I I I

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Los tres se encontraban comiendo en la mesa para sólo cuatro personas, la comida de la madre de YoonGi era muy rica y tenía un olor exquisito

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Los tres se encontraban comiendo en la mesa para sólo cuatro personas, la comida de la madre de YoonGi era muy rica y tenía un olor exquisito.

— Te enseñaré a hacer comida, cariño — JiYoon le sonrió precioso a JiMin — Así podrás conquistar más a mi hijo — ambos rieron contentos — ¿Verdad, YoonGi?

Éste asintió mientras llevaba una cucharada de comida a su boca, se miraba sereno por fuera, pero por dentro era un mar de pensamientos tontos; YoonGi seguía viéndose volar, después de perder toda su felicidad, con unas alas grandes y negras.

— YoonGi... — una voz lejana le llamaba — YoonGi — la voz de una mujer — ¡YoonGi! — volvió en sí, sentado en la mesa con la cuchara entre sus dedos, la comida caía poco a poco, nuevamente al plato.

— ¿Sí?

— ¿Estás bien? — preguntó preocupada su madre.

— Sí, estoy bien — dijo — Iré a dejar esto a la cocina.

Se paró y dirigió a esta, dejó el plato en la barra; su corazón latía desenfrenadamente, sus ojitos empezaban a aguarse, su respiración era irregular; necesitaba a JiMin, necesitaba sus abrazos y caricias.

Quizás pidió demasiado al menor, que éste llegó a los pocos segundos, abrazándolo y susurrándole que todo estaría bien.

JiMin sabía porqué YoonGi se quedaba quieto, sin musitar siquiera una simple palabra; sabía que en la mente de éste vagaba ese deseo de ser alguien increíblemente horrible: sabía que se veía como el demonio del libro que ambos leían. Y también sabía el miedo que tenía, que le hacía sentirse y ponerse de esa manera...

— Yo no moriré, estaré siempre contigo — susurró en su oído, su voz fue tranquila y cálida — Yo no soy el protagonista de ese libro, amor — caricias dejaba en los cabellos negros del mayor — Estaré contigo toda mi vida.

— Te amo — musitaba dolorosamente — Te amo, quiero que estés conmigo para siempre — parecía un niño caprichoso — Quiero cuidarte, quiero que me cuides — JiMin no supo en qué momento comenzó a llorar también — Tú y yo hasta ser ancianos, amor — se abrazaron, estar entre los brazos de el contrario, era en pocas; la calma para sus almas y corazones.

Ninguno de ellos dos se dio cuenta que la señora JiYoon había presenciado todo.

Ya era hora de despedirse, JiMin debía regresar a su hogar, puesto que ya estaba oscureciendo; nadie le esperaba, pero aún así debía volver

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Ya era hora de despedirse, JiMin debía regresar a su hogar, puesto que ya estaba oscureciendo; nadie le esperaba, pero aún así debía volver.

— Mamá, dormiré hoy con él — dijo YoonGi para después simplemente salir de la casa e ingresar a su auto, la señora Min sólo batió su mano derecha, despidiéndolos. Ésta sonrió con pesar, debía de decirle a su hijo lo que pasaba con ella, pero también tenía miedo de que se rompiera más de lo que ya estaba.

Mientras que JiYoon ingresaba a su acogedor hogar, dos chicos iban platicando de una cosa en particular, el libro.

— En el libro el chico bueno muere — dijo YoonGi con un nudo en la garganta.

— Nosotros no somos los protagonistas, amor — comentó un inquieto JiMin — Somos Park JiMin y Min YoonGi, dos hombres que se aman con todo su corazón y que sólo tienen sueños raramente lindos.

— Aún así, tengo miedo — YoonGi no era como los otros chicos, de caráter fuerte y pensamientos firmes; éste era un joven con problemas de ansiedad, inseguridad, nerviosismo, estaba mal en pocas palabras.

Siguieron discutiendo hasta que llegaron al departamento del menor — Tomaré un baño — fue lo único que JiMin le había dicho.

Se encontraban en la cómoda cama, abrazados y diciéndose bonitas palabras al oído

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Se encontraban en la cómoda cama, abrazados y diciéndose bonitas palabras al oído. JiMin era la única persona que podía calmar a YoonGi, y YoonGi era la única persona que apoyaba a JiMin.

Ambos se complementaban, ambos eran la parte pérdida de ellos mismos.

— Te prometo estar contigo hasta el último día de mi vida — el menor alzó su meñique pequeño y regordete — Prometo quererte hasta el último suspiro dado por mí antes de morir.

El azabache juntó sus labios, no quería escuchar a JiMin hablar de su muerte; odiaba el hecho de saber que algún día lo perdería.

Las manos grandes y venosas del mayor, vagaron debajo de la remera del castaño, acariciando suavemente su piel, tan cálida. JiMin se estremecía, y sonreía inocente, aún sabiendo lo que se avecinaba.

— Te amo — dijo mientras pegaba sus labios nuevamente, yendo en un compás irregular, ninguno pudo tomar el ritmo del otro.

— Te amo también — esas eran las palabras que se decían, antes de entregarse en cuerpo y alma.

Eran una pareja linda y tierna, con sus momentos malos y buenos, con problemas; pero sobretodo, su amor era mutuo y lo seguiría siendo. Eso es lo más importante, el cariño, apoyo y respeto en una relación, y en esta, lo había.

Esa noche hicieron ver todo el amor que se tenían, sus cuerpos chocaron, sudaron y se estremecieron; los jadeos, gemidos y los te amo, tampoco faltaron.

Ambos se sentían tan bien, tan correctos.

Ellos hicieron de la felicidad su prioridad.

Pero quizás ellos, muy dentro de sus corazones, sabían que su historia de amor no tendría un final feliz.

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Yo no soy muy buena en esto del cuchicuchi, pero- no importa, tampoco es como que valla a poner capítulos +18 ;)

Espero les guste este capítulo, me ando esforzando mucho.

Gracias. 💕 vale95UwU
sweet__kisses
Bombon_Kim07

—🦉🦋

Black Wings ♡ yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora