Splendid no pudo soportarlo, así que no entró a ninguna de las próximas clases, lo que preocupó a estudiantes y maestros. Aún así, la noticia que había hecho Splendont se estaba transmitiendo como un virus, todos estaban sorprendidos en su mayoría.
El peli azul dejó sus cosas en casa, se cambió de ropa y fue al restaurante de su amigo Monk; sabía que podría estar bien en aquel lugar.
Abrió la puerta haciendo sonar la campana, caminó hacia la barra de pedidos y liberó todo el llanto que había estado aguantando durante todo ese tiempo.Monk escuchó el llanto y salió corriendo de la cocina para después ver con preocupación a su viejo amigo; podía sentir su gran tristeza. No sabía que hacer, así que simplemente comenzó a hablar con calma.
—Splendid.
—Mierda... Monk —el más alto trató de dejar de llorar y se limpió las lagrimas con su sudadera—. Perdona, tenía algo en el ojo.
—Las mentiras son un tipo de veneno —comentó con una sonrisa—. Te ocurrió algo, puedo sentirlo.
—Yo... —suspiró e hizo una pausa—. Tengo un secreto y hoy fue revelado...
—¿Qué tan malo fue?
—Demasiado malo... me quitaron el puesto como capitán del equipo y ahora mi popularidad corre peligro.
—Que innecesario quitarte tu puesto —caminó hacia una de las mesas para tomar asiento e invitó al contrario a que se sentara frente a él—. Y sobre la popularidad... no la necesitas para ser feliz.
—Me gusta la popularidad —comentó Splendid luego de sentarse frente a Monk—. Mi madre está orgullosa.
—Aún así, Splendid, ser popular hace que todos te miren y con ello te criticaran, si haces algo bueno o malo, ellos serán quienes te juzguen —lo miró—. Eres alguien de buen corazón, estoy seguro que la mayoría de tu popularidad se debe a tus acciones, pero... sigo sin saber qué pasó exactamente.
—Fue algo sobre mi persona —miró hacia otro lado—.
—¿Qué secreto podría afectarle a alguien como tú?
—Yo... soy homosexual, Monk —lo miró—. Soy gay, nadie lo acepta aún.
—¿Y el hecho de que te gusten los chicos hace que seas una mala persona? —frunció el ceño—. Me sorprendió eso pero dudo mucho que eso sea malo.
—Mi entrenador me quitó mi puesto por eso —se encogió de hombros—.
—¿Ignoró tus habilidades? —el contrario asintió—. Me sorprenden esas actitudes.
—Estoy seguro de que toda la escuela ya lo sabrá —se encogió de hombros—. Voy a mudarme.
—No —Monk negó con la cabeza—. No te rindas en esta batalla, Splendid, no te dejes influenciar por malos comentarios o tratos.
—Es difícil que me hagan esto, es injusto —un par de lágrimas recorrieron sus mejillas—. Y todo por un estúpido niño rico... quiero morirme.
—¡No! —exclamó Monk mientras se ponía de pie bruscamente y daba un golpe fuerte a la mesa—. ¡No digas eso! —lo miró molesto—. Te mostraré mis enseñanzas y podrás dar pelea en esta batalla.
[...]
—Flaky, ¿sabes dónde está Splendid? —preguntó Petunia a la pelirroja—.
—No, ni siquiera lo he visto —negó con la cabeza—. ¿Por qué?
—No entró a varias clases y estoy preocupada, ¿si vino?
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¡Hey, ladrón! ||Splendid X Splendont||
Fiksi PenggemarSplendid era muy popular. Era el capitán del equipo de quemados. Era muy atlético. Algunas chicas querían salir con él. Pero Splendont llegó... y todo acabó.