Happines

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Un mes antes

Departamento de inteligencia

Gran cantidad de shinobis recorrían apresuradamente las instalaciones del departamento de inteligencia todos ellos con expresiones mortificadas en sus rostros, Sakura camino esquivando a cada uno buscando a su amiga.

— ¿oye puedes decirme en donde se encuentra Ino? — pregunto deteniendo a uno de los shinobis que pasaba junto a ella

—En la sala al fondo...deja de estorbar—respondió el shinobi esquivándola y saliendo rápidamente evitando cualquier ataque por parte de la peli-rosa un suspiro extremadamente pesado escapo de la Haruno mientras caminaba hacia lo más profundo de las instalaciones.

—por una vez que estoy libre...—gruño con molestia mientras intentaba abrir la puerta cosa que le fue imposible, ya casi perdiendo la paciencia miro por el cristal de la puerta hacia la sala.

Ino se encontraba con la mano en la cabeza de un hombre calvo que parecía sufrir, unos segundos le bastaron para discernir que lo que sea que estuviese pasando era extremadamente serio.

— ¿qué sucede? —se preguntó así misma extremadamente curiosa, Ino retiro la mano de la cabeza del hombre y empezó a hablar con Ibiki, presa de la curiosidad se centró en los labios de su amiga e intento leerlos.

—realmente no conseguí mucho este tipo era apenas un bandido cualquiera al cual excluían de temas importantes—Sakura leyó de los labios de Ino despertando aún más su curiosidad, era una lástima que no pudiese ver los labios de Ibiki.

—Si, en su mente hay varias locaciones en las cuales se reunieron varios bandidos más con Sasuke— dijo Ino, sorprendiendo a Sakura y haciendo que se pregunte si se había equivocado al leer los labios de su amiga—no por el momento no representa más peligro que el de bandidos robando varios cargamentos para luego venderlos a sobre-precio—espera un momento estaban hablando de Sasuke, sentimientos que ella misma había obligado a apagarse se encendieron—la última información que tiene de Sasuke es que se encontraba en la aldea de la neblina—el corazón de la peli-rosa empezó a revolotear—por su trayectoria no me extrañaría que en uno o dos meses llegara al país de las olas o a alguna aldea cercana—cuando vio que la rubia se quitaba el gran abrigo plateado supo que debía apartarse del sitio.

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Ino salió corriendo en busca de Sakura, ya hace más de 30 minutos que debían encontrarse y estaba segura de que con la poca paciencia que tenía su amiga ahora estaría súper enojada —Sakura lo siento mucho pero surgió algo y me retrase—dijo al llegar a ella mientras juntaba sus manos y serraba los ojos a espera de que su amiga hiciera una de sus rabietas por las que era muy conocida

—...no hay problema—dijo Sakura de manera pensativa, Ino la miro como si le hubiese salido una segunda cabeza

— ¿estás bien? — pregunto la rubia sin recibir ninguna respuesta de la pensativa peli-rosa—oye tranquila—agrego Ino poniendo su mano en el hombro de Sakura—si tuviste algún problema con Naruto estoy segura de que lo arreglaran— le aseguro creyendo que ese era el problema—...quien lo diría ahora tienes una hermosa hija y en un mes te casaras con un buen hombre—Ino golpeo levemente el hombro de su amiga con su puño—debo admitir que te tengo algo de envidia—

— ¿...envidia? —pregunto Sakura mirando con confusión a su amiga misma que sonrió a pesar de la expresión melancólica que su rostro adquirió

— Sí, envidia—repitió la rubia deteniéndose un momento para señalar el anillo en el dedo anular de su amiga—linda casa, un empleo que te apasiona, una hermosa hija y en menos de un mes unirás tu vida con la persona que amas...es mucho más de lo que muchas kunoichis tuvieron—

La imagen de Naruto vino a la mente de Sakura en donde una de Sasuke la remplazo—yo amo a Naruto—el tono usado por Sakura parecía más una pregunta que una afirmación

—Así se dice—dijo Ino con una sonrisa mientras la tomaba de la mano y la arrastraba hacia algunas tiendas de moda

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ACTUALIDAD

Naruto se sentó pesadamente en su cama, con cuidado tomo a su hija dormida y se levantó—...así que lo de ayer no fue solo una pesadilla—dando pasos lentos bajo hacia el comedor en donde coloco a su hija en el carrito que se encontraba ahí, cuando camino hacia la cocina lo vio el anillo que le había dado a Sakura sobre un papel, lentamente tomo el anillo dorado con adornos de flores de cerezo y la hoja completamente blanca a excepción de una frase "los siento" —lo que hiciste esta vez no se resuelve con un lo siento...Sakura—murmuro mientras sus manos eran cubiertas por un manto rojo que desintegro la hoja y el anillo convirtiéndolos en polvo

"¿y que harás ahora?" pregunto Kurama sonriendo levemente ante la imagen mental que le llegaba de la hija de su contenedor.

—"seguir viviendo" —respondió Naruto mientras preparaba la fórmula de su hija—"el mundo no se detendrá únicamente por que Sakura decidió irse" —

"¿qué hay de la propuesta del puesto de kage?" pregunto Kurama mientras que fuera Naruto tomaba delicadamente a su hija y la alimentaba.

—"lo rechazare" —respondió tranquilamente—"si acepto ese puesto no tendré tiempo de cuidar a mi hija...sin Sakura ella solamente me tiene a mi" —

"realmente lo rechazaras...puede que ahora seas un héroe para la mayoría de las bolsas de carne que caminan en esta aldea, pero los concejeros siguen viéndote como aquel niño desequilibrado que proclamaba que sería hokage a los cuatro vientos, esta puede que sea tu única oportunidad de cumplir tu sueño" dijo Kurama con seriedad, mientras tanto Naruto golpeaba levemente la espalda de su hija para que expulse los gases.

—"realmente no me importa abandonar mi sueño si con eso puedo asegurar que ella tenga la infancia que me hubiese gustado tener" —respondió Naruto mientras apartaba algunos mechones rubios que amenazaban con entrar a los ojos verde jade de su hija.

"Realmente haz madurado" dijo Kurama con una sonrisa mientras a su mente venían las imágenes de una peli-roja muy gritona y de un rubio afeminado "tus padres habrían estado muy orgullosos de ti" con eso dicho el gran zorro de nueve colas se durmió