Me gusta saberlo todo y llegué tarde al reparto de los puestos en el zoológico.
Tal vez deba corregir mi presentación inicial y decir que tengo cierta tendencia por el chisme. No me avergüenza. O por lo menos no mucho. Estar bien informado la mayoría del tiempo a uno le trae varias ventajas.
En la escuela, por ejemplo. Cada vez que alguien quería enterarse de algo, su primera opción era obvia: debía buscar a Shrike. "¿Algún chisme que quieras confirmar? Yo lo tengo. ¿Algún secreto del que quieras enterarte? Los sé todos. ¿Alguna persona cuya vida entera quieras conocer? Te consigo datos, anécdotas, su pasado y hasta su historial clínico, si quieres". No es difícil en el sentido estricto de la palabra conseguir la información. Es algo que sé hacer bien.
Llegué al zoológico en busca de un lugar en el que pudiera pasar la mayor parte del verano. Ya que mi hermanita Mahia se fue a un campamento de verano con algunas de sus amiguitas del curso, hubiera sido muy aburrido pasar todo el tiempo en casa con mis padres. Aquí por lo menos me entretengo. Además, los animales me gustan mucho.
Aquí me encontré con varios compañeros de la escuela al principio, pero a algunos no los aceptaron y otros se retiraron por sí solos. Al final solo quedaron unos cuantos, entre ellos Daniel Avery y David Bike.
Es gracioso. Yo lo sé todo sobre David Bike y lo sé, precisamente, porque tuve que conseguir la información para Danny. Loco, ¿no?
Danny nunca me dijo para qué quería saber sobre David y yo tampoco se lo pregunté, aunque lo sé. Él nunca me lo ha dicho como tal (no por miedo, porque sé muy bien que no le avergüenza), pero yo sé que le gustan los chicos. Por mí está bien, Dan es mi amigo, lo quiero mucho, y es tan auténtico que no cambiaría aún si sintiera atracción por los moluscos.
También será un poco extraño que diga que fueron ellos quienes me ganaron el puesto que yo quería elegir. Soy amante de las aves, pero llegué tarde. Solo había cuatro puestos para eso, dos de ellos los eligieron Lauren y Noah, luego David y por último Danny. Pero no hay rencores. De hecho, cuando no estoy haciendo mi trabajo, voy a veces a ver a las aves y a hablar con los chicos. Todo bien.
Cuando supe bien quiénes serían mis compañeros de trabajo, me decidí a investigarlos a todos a fondo. No es que haya sido una necesidad imperante para mí, pero en el verano es usual que me quede sin cosas por hacer, y estaba aburrido en mi cuarto la noche en que se me ocurrió, así que me hice la misma pregunta que siempre me hago cuando me interesa investigar algo: ¿por qué no?
No me costó mucho. Ahora mismo podría recitar sus vidas si alguien me lo pidiera.
Dato curioso (por si alguien tiene interés en hacer esto y hacerlo bien): lo primero que hago yo para investigar a alguien es observar y conocerle físicamente. Empecé por Lena Higgins, la mayor. Tiene veinticuatro años, y los aparenta a la perfección. Es alta, pálida, de largo cabello oscuro que le cae sobre los hombros con mechas de color violeta. Siempre viste de cuero negro, lo único que varía en su atuendo diario son las camisetas de bandas que, para ser sincero, no conozco. Por lo demás, igual: el piercing en la nariz, el maquillaje violáceo negruzco, los labios pintados de un púrpura muy oscuro. Es amable contigo si lo eres con ella. Es como una madre. O más bien como una hermana mayor.
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Cuatro de agosto © [MEMORIAS #1]
Horror[GANADORA DE LOS WATTYS 2021] El zoológico de Saint James, en Nueva York, abre sus puertas a todos los jóvenes que deseen tener un empleo de verano. Muchos acuden a la oferta, chicas y chicos distintos entre sí, con sus propias historias, conflicto...