Ángel de la Guarda

Capitulo 2

- Hola -dijo una chica castaña, ojos marrones y pestañas largas, estaba vestida con un conjunto deportivo Adidas negro, le quedaba algo suelto, parecía delgada

- AAAAH – grito Stiles cayéndose hacia atrás

- Ey no estoy tan fea – dijo la castaña, tratando de acercarse al chico, pero este retrocedió arrastrándose.

- No te conviene matarme, mi manada se enterará y vendrá a por ti, aparte mi padre es el sheriff tendrás muchos problemas – empezó a decir asustado el castaño.

- Niño ¿no te enseñaron que no debes amenazar a un sobrenatural cuando estas desprotegido? – puso en blanco los ojos la chica – no me dan miedo tus amiguitos...

- ¿Eres sobrenatural? ¿Qué criatura eres?, ¿tienes algo que ver con Sheila? ¿Por qué la mataste? ¿Por qué estás aquí?... – Stiles iba a seguir, pero la castaña lo interrumpió

- ¿No tienes miedo? – pregunto confundida – hablas y preguntas mucho

- Tengo TDH y cuando estoy nervioso tiendo a tener diarrea verbal, y no tengo miedo – mintió, estaba aterrado, pero no tenía por que saberlo esa niña

- Me llamo Odisea – le tendió la mano, el castaño la agarro y se paró – yo no mate a nadie, en todo caso vivo salvando a las personas – esto ultimo lo dijo en un susurro que si pudo escuchar el chico.

- No respondiste mis preguntas...

-Si soy un Ángel guardián, tu Ángel guardián, puede que, si tenga que ver con ella, ya dije no eh matado a nadie en mucho tiempo, estoy aquí para protegerte – lo soltó todo de repente – yo también tengo diarrea verbal – sonrió y continuo al ver que el niño la miraba con sorpresa – puede que...

- si claro y los cerdos vuelan – interrumpió – en serio crees que me voy a creer que tu una... - dejo de hablar por que estaba en shock por lo que estaba viendo

Odisea estaba en frente de Stiles con sus alas expuestas, el castaño no podía creer lo que sus ojos estaban viendo, eran las alas más grandes que había visto en su vida, de un color negro que brillaba por suavidad, aunque él creía que se sentirían suaves. Ella media un metro sesenta y un poco mas y sus alas la sobrepasaban, se dijo a el mismo, que era mentira, pero era obvio que era verdad todo lo que le decía Odisea, hasta su nombre era hermoso.

-Ey! – grito la castaña, sacando de su asombro al castaño – Lo siento, pero debes ir a tu casa, te dormiré – Stiles se alteró pensando que la chica le iba a hacer daño – tranquilo no te voy a hacer nada, solo es magia.

-Stiles! Despiértate, llegas tarde a la escuela – grito el padre del castaño

Este se despertó con dolor de cabeza, recordando todo lo que paso ayer, pensó que podría ser un sueño, pero seguía con la misma ropa, cuando se levantó se fue a tomar una ducha, ya cambiado y listo agarro la campera que se había puesto en la noche anterior, al sacudirla cayo una pluma negra, muy larga y brillante, abrió los ojos al recordarlo todo, alterado agarro las llaves de su jeep y sin desayunar se fue a la escuela.