MI DESTINO NO ESTA AQUI [SUSPENDIDA POR EL MOMENTO]

CAPITULO 6

Desperté en mi cama ya estaba amaneciendo y tenía que arreglarme para ir al colegio, hoy era uno de esos días donde Kat me venía a recoger en su Volkswagen para irnos juntas.

Era ya la hora del almuerzo y por alguna extraña razón no le comente nada de lo de ayer a mi amiga como tampoco le conté sobre ese chico Emilio, en cambio me pase recordado todo lo de la noche anterior y en ese rato cuando me dirigía a mi lugar junto con kat me di cuenta de algo, Emilio no era un humano, él era un ser de otro mundo.

-          ¿Por qué tan callada? Me pregunto mi amiga al darse cuenta que no había hablado con ella desde la mañana.

-          Nada, solo ando un poco distraída. – respondí sin dar tanta importancia.

-          De eso ya me di cuenta. Me lo puedes contar si quieres – me propuso Kat.

-          No es nada solo no pude dormir bien anoche, tuve algo así como una pesadilla.

-          ¡Mejor cuéntame antes de que se te haga realidad! – me dijo esta ya que ella era muy creyente en esas cosas y bueno, yo también lo soy desde que paso todo esto.

La campana que anunciaba el final del almuerzo sonó y de un salto me levante para irme dando gracias por primera vez en mi vida de que la campana sonara ya que así no tenía que contarle la verdad a mi amiga. Pero esa felicidad no duraría mucho ya que más tarde me encontraría con ella en el estacionamiento.

-          ¡CELESTE! – una voz muy familiar me gritaba desde lo lejos – Espérame.

-          ¿Qué pasa? – le dije algo cansada y con un tono un poco alto en mi voz, más de lo que quería que fuera.

-          Tranquila solo quería decirte que lo de anoche fue algo más que un simple sueño.

-          ¿Qué quieres decir?

-          Que eso no fue…… - no pudo terminar la frase porque mi querida amiguita nos interrumpió.

-          ¡Cele! pensé que no te encontraría – nos dijo, al tiempo en que se quedaba mirándolo a él con una sonrisa de oreja a oreja. Y ahí entendí todo, a ella le gustaba Emilio.

-          Él es Emilio. – le respondí a su pregunta no formulada.

-          Y ella es Katherine mi amiga de toda la vida. – le dije a Emilio mirándolo a los ojos, y por su rostro me di cuenta de que también se dio cuenta de lo mismo. Kat estaba enamorada de él pero él, no de ella.

Las clases pasaron más rápidas de lo que me esperaba y me encontraba saliendo en dirección al estacionamiento donde comenzaría un mar de preguntas y respuestas por parte de Kat.

Me encontraba mirando hacia el suelo algo usual en mí ya que no quería chocarme y caer por culpa de una que otra piedra. Mi amiga se encontraba parada enfrente de su coche y de espaldas hacia mi algo que agradecí ya que no quería que me viera cuando llegara, pero desafortunadamente esta se dio la vuelta y coloco su mirada fija en la mía y me pude dar cuenta de que lo que venía no iba a ser nada bueno.

En el instante en que nos estábamos subiendo al coche pude ver a lo lejos un coche que venía a toda velocidad en contra vía  directamente hacia mi amiga impactándose contra ella y su auto y yo quieta como una estatua con mi respiración agitada y toda yo sudando de la desesperación. Hasta que reaccione completamente.

-          ¿Cele que te pasa? – me pregunto a la vez que me observaba con detenimiento y lo único que salió de mí fueron dos palabras que sonaron como una sola.

-          ¡CORRE KAT! Y sin más pensarlo la cogí del brazo derecho y la jale hacia el otro extremo del estacionamiento haciendo que se tropezara con una roca y que cayera al suelo.

-          ¿¡QUE MIERDA TE PASA!? – me grito desde lo lejos, sin hacerle caso a sus insultos me dispuse a correr en su dirección. Después le explicaría todo. En el momento en que ya faltaban unos pocos pasos para llegar a su lado se escuchó un ruido muy fuerte y al voltear a ver lo único que pude observar fue a un Volkswagen totalmente destruido.

-          ¿Qué fue todo eso? – mi amiga seguía tirada en el suelo aún en estado de shock por lo ocurrido hace un momento.

-          ¿Cómo sabias que iba a pasar todo eso? – me pregunto con tono sorprendido pero a la vez muy alarmado.

-          No lo sé, solo fue un……..presentimiento. – le dije sin mirarla a los ojos.

-          ¿Qué fue lo que paso aquí? – preguntó nuevamente aquella voz tan llena de paz. Emilio.

-          Un choque – respondí aun atónita por lo que acababa de pasar, y es que hasta ahora me preguntaba como carajos pude haber tenido aquella visión en donde mi amiga era literalmente aplastada por aquel coche sin control.

-          ¿y que hacen acá? – pregunto nuevamente.

-          Celeste se quedó parada ahí – señalo al otro lado del estacionamiento -  unos segundos y después me empujo hasta acá y después de un segundo vi como un coche chocaba contra el mío – iba ablando mi amiga mientras una lagrima caía por su rostro y con ella muchas más, hasta que todo fue un rio de lágrimas a su alrededor y yo junto a ella abrazándola.

Me encontraba dirigiéndome hacia mi casa en un colectivo ya que después del accidente Kat llamó a sus padres para que la recogieran y se llevaran lo que quedaba del coche de ella que por cierto no era nada lo que quedaba de ello. Y a mi lado izquierdo se encuentra Emilio que después de que le conté sobre la ‘visión’ que tuve no me ha dejado sola ni un instante y a decir verdad había algo en él que me hacía sentir más segura de lo que pensaba me sentiría alguna vez con algún hombre, pero hay que decir que él no es cualquier hombre, mejor dicho él no es un humano.

Después de algunas horas me encontraba en mi habitación sola; mis padres se habían ido de viaje esta mañana y como era hija única no me quedaba más que esperar hasta que sean las 6:00 de la tarde ya que a esa hora llegaría Emilio para hablar de lo sucedido esta tarde, porque según él, esto es un caso de vida o muerte no solo para mi sino para el resto del mundo.

-          Ya he llegado -  habían pasado cuatro horas desde que llegué a mi casa y por fin estaba él ahí.

-          Bueno y ¿qué es eso tan importante que tienes que decirme? – le pregunte a la vez que me sentaba en el sillón de la otra vez donde tuve ese extraño sueño o lo que allá sido eso.

-          Para empezar te tengo que dar una noticia, no sé si la tomes a bien o la tomes a…..- le corte, quería que fuera directo y sin rodeos.

-          ¿Cuál es la noticia? – creo que notó la urgencia en mi voz por lo que se dejó de rodeos y lo soltó de una sola, dejándome aún más atónita.

-          Tienes un poder – al decirlo note como su cuerpo se tensaba al mismo tiempo que el mío lo hacía.