DIVINAS PALABRAS

Capitulo: 41 al 50.

Capítulo 41:    "Paseo por las nubes"

Poncho: (resopló demostrando incomodidad) viniste solo hasta aquí? quedamos en vernos mañana en Christopher: (interrumpió) en qué momento te dejaste caer de esta forma? (Poncho ni siquiera lo miraba a la cara) no puedes regalarle la vida a un sufrimiento Poncho
Poncho: no es tan fácil
Christopher: tan difícil crees que será todo esta vez? qué diferencia esta vez de las otras, quiero saber! (él lo miró desafiante y christopher le gritó) dime! por qué puedes hacerlo mil veces, pero no mil una?
Poncho: (fue hacia la puerta) dije que no quiero platicar...
Christopher: (fue tras él y lo agarró de un brazo) hay cosas que tienes que saber... Siéntate!
Poncho: (gritó) es que no quiero... qué no se me entiende?
Christopher: que si! pero que tengo que platicarte muchas cosas sobre ella, sobre ustedes!
Poncho: nada de lo que me cuentes hará cambiar las cosas (Christopher lo miró confundido y lo soltó) de eso es de lo que no te hablo... Ningún malentendido, ninguna discusión fuerte o ninguna noche con ella harían que me sintiera de otra forma
Christopher: papá
Poncho: (interrumpió) se acabó Christopher, déjame superar esto a mi modo, ok?
Christopher: muchas veces estuviste así y luego lo arreglaron! no seas negativo y échale ganas! tú verás
como
Poncho: (gritó) que no quiero! (le agarró de los hombros y gritó) veme! no quiero! ok? no quiero ni verla! no quiero tenerla cerca! ni quiero que me la nombren! solo quiero
Christopher: estar lejos? (Poncho agachó la cabeza) así no lograrás volver a ser él de antes
Poncho: (fingió una sonrisa) y quién te dijo que quiero ser el de antes?
Poncho salió de allí, dejando a Christopher sumido en su preocupación y muy disgustado. Se encontró con los demás sentados frente a la puerta. Any y Bj se levantaron nada más verle. Pero cuando Cristian le vió la cara, cuando vió ese frío en su mirada, supo que las cosas estaban mal. Cómo podía ser que después de haberse enfrentado a su mejor amigo, después de haber platicado sobre ella tuviera esa expresión de vacío... Enseguida se preocupó por Dulce y por lo que habría podido escuchar, porque si había frío en su mirada habría hielo en sus palabras. Entraron todos juntos y Cristian agarró el cel, la conexión se había interrumpido, tal vez Dulce hubiera colgado, o no... Necesitaba hablar con ella, y a pesar de intentarlo toda la noche no lo logró hasta la mañana siguiente.
Dulce:hola! ya sé! no te devolví las llamadas... pero es que estuve muy ocupada
Cristian: ocupada es sinónimo de?
Dulce:de atareada, de afanada...
Cristian: haciéndo qué cosa? digo, algo muy complicado tiene que ser que no te dejó un minuto para contestarme el cel
Dulce:haciendo maletas
Cristian: (se llevó las manos a la cabeza) y para dónde te vas Dulce María?
Dulce:para Hawaii, para dónde más? (Cristian enmudeció) Cris?
Cristian: si, si, te escucho
Dulce:llegaré el sábado a media tarde
Cristian: y por qué ahora?
Dulce:hiciste que le escuchara y le escuché... ahora tengo que verle
Cristian: está... no sé ni cómo decirte! pero no es Poncho
Dulce:ya...
Dulce:ya...
Cristian: escuchaste lo que
Dulce:(le interrumpió) le escuché cantar, pero no voy por eso
Cristian: además de cantar, regañó durisimo con Christopher. No debió ser muy agradable lo que dijo
Dulce:tengo que verle, es todo lo que puedo decirte
Cristian: vas a tener que guardarte los reproches... vas a tener que morderte la lengua hasta que te duela! porque ahorita las cosas
Dulce:(le interrumpió) solo voy a ir para pelear lo que es mio... es tan mio como suyo pero visto que él doblo los brazos
Cristian: yo creo que hizo más que doblar los brazos
Dulce:qué quieres decir?
Cristian: no sé. En realidad me confunde... Yo solo te digo que tienes que estar preparada para todo. Desde malas caras, indiferencia, otras viejas...
Dulce:lo soportaré
Cristian: lo de las otras también?
Dulce:sí Cristian
Cristian: mejor, porque sí o sí, Poncho se marcha para Argentina cuando termine aquí. Así que mejor échale ganas y que cancele el viajecito porque todo ese cuento de la amiga argentina no me gustó nada
Dulce:igual era un invento, solo para fastidiar
Cristian: se cree el ladrón que todos son de su condición, verdad?
Dulce:no me estoy riendo...
Cristian: pues bien que haces! y de que se va, se va! es por Ana Paz y ya sabes lo importante que era esa chavita para él
Dulce:Ana Paz está en Argentina?
Cristian: eso me contó... y está en un mal momento o algo así y quiere ir a verla
Dulce:si bueno, en un mal momento! esa niña con que haga tronar los dedos tiene a los papás sacando la cartera... desde siempre si se mete en líos es porque ella los busca porque su familia no hace más que preocuparse por ella
Cristian: no juzgues así! puede que no se trate de dinero
Dulce:no claro! se trata de atención... y como Poncho siempre estuvo bebiendo mares por sus huesos... es que es igual de lo que se trate! siempre termina llorandole, y él con lo sobreprotector que es con ella...
recuerdas que cuando conocimos a Poncho creíamos que era su novia?
Cristian: siempre la trató más parecido a una hermana... pero le celabas como loca y por cualquiera!
Dulce:y él a mi... hasta de tí tuvo celos
Cristian: este Herrera... y pensar que con los años solo ha ido a peor, verdad?
Dulce: verdad!
Cristian:ay! pero mírala! tú no mejoraste sabías? te volviste una adicta a los dramas sentimentales y una escapista patológica
Dulce: el cuento del huír mejor se lo cuentas a Poncho
Cristian:seh seh para lo que me pela...
Dulce: a mi me pelará
Cristian:ya lo veremos!
Dulce: si! ya lo veremos!
Cristian:voy a recogerte al aeropuerto?
Dulce: no, ya iré yo porque no sé a que hora llegaré
Cristian:cuando sales?
Dulce: en cuatro horas
Cristian:qué? sales en cuatro horas y llegas en dos días?
Dulce: si! es que tuve que comprar haciéndo mil escalas caray y es que no había más opción si quería llegar esta semana
Cristian:pues ven la semana próxima
Dulce: no! ahora!
Cristian:y si te digo que tal vez sea tarde para ahora?
Dulce: (ironizó) no me animes tanto que no puedo soportar el entusiasmo
Cristian: yo ya te prevení, tú haz lo que quieras
Dulce: pues obvio! eso hago siempre! (él soltó una carcajada) nos vemos ya mismo Garza!
Cristian: nos vemos ya mismo Espinoza!
Dulce: te quiero *******
Cristian: y yo a ti más, terca del demonio!
Cristian bajó a la playa con los demás. Christopher estaba tomando una piña colada y Bj le hacía una trenza a
Any en el pelo mientras ella ojeaba una revista.
Christopher: con quién era la conferencia pollo?
Anahi: si, porque llevas al cel media hora!
Cristian: con Dulce
Bj: conseguiste platicar con ella?
Cristian: si... estuvo muy acupada hasta ahorita (los miró y sonrió viéndolos tan tranquilos, ajenos a lo que estaba por pasar) estaba haciendo las maletas
Anahi: y por eso no te contestó?
Cristian: si! y también porque debió quedar parada del miedo que tuvo que sentir escuchando al otro
Christopher: si escuchó lo mismo que yo, no me extraña que arme valijas Bj: y te dijo para dónde se iba? porque apenas está llegando de Cozumel y
Anahi: (interrumpió) creía que había estado en playa del Carmen?
Cristian: si... pero también en Cozumel Anahi: cuando fue eso?
Bj: después de Metztitlan... puede ser?
Christopher: estuvo en el pueblito de los abuelos de Poncho?
Cristian: si! pero eso fue hace muchisimo! luego te platico bien como estuvo todo
Anahi: ya... acá cuando llega?
Cristian: sale hoy, pero llega el sábado
Anahi: qué?
Christopher: viene en canoa?
Cristian: es que fue lo único que consiguió para esta semana... lo compró tan tarde que
Bj: (interrumpió) como sea! viene para acá, que es lo más importante
Christopher: yo no estoy tan seguro... en este momento si Poncho la ve
Cristian: (interrumpió) yo le dije! yo la advertí! en este momento hay puro hielo en la boca del Herrera Anahi: Dulce saldrá lastimada
Christopher: (asintió) puedes estar segura... le conozco muy bien y estuve al lado de Poncho todas las veces que ellos pelearon y puedo jurar que nunca ví en sus ojos lo que ví ayer
Cristian: coincido contigo en eso...neta, lo veo muy difícil
Bj: me tocará ser el optimista! porque les digo que, tal vez no los conozca desde hace tanto como ustedes, pero los vi regañar y contentarse, los vi llorar y morir de risa, pero nunca los ví dejándose de amar y si tienen eso, tienen lo más importante chavos
Esa noche, Poncho quedó en cenar con ellos. Y a pesar de que la reserva era para cinco, seis fueron los que se sentaron a la mesa. Poncho invitó a una de sus compañeras de reparto. Era una actriz venezolana muy guapa, no tenía más de veinte años y aquella película era su primera intervención en el cine. Pasaron una noche muy agradable, aunque hablando sobretodo de trabajo. Eran casi las doce cuando se despidieron de ellos y tomaron juntos el elevador.
Cristian: y quién era esa?
Christopher: Adriana, no escuchaste?
Anahi: (puso en blanco los ojos) te pregunta si te habló de ella! que si son amigos o están...
Christopher: no tengo la menor idea. No me contó nada, en realidad no me habla de nada así que no es extraño que no sepa que onda con esta chava
Anahi: (lo acarició) bebe, no te preocupes, volverá a ser el de antes. Tú espera a que llegue Dul...
Cristian: (suspiró) no te aferres a eso con demasiadas ganas... si trajo a esta chava no es solo para que la conociéramos
Anahi: (lo miró extrañada) desde siempre, Dulce fue la cabeza y Poncho el alma. Dulce podía amarle con todas sus fuerzas, pero si su cabeza decía no era no
Bj: en cambio Poncho no podía dejarla por más que se lo propusiera porque le ganaba siempre el corazón... nunca tuvo fuerza de voluntad, solo sentimientos
Christopher: tal vez eso sea lo que vemos distinto, que está actuando con la cabeza por primera vez en su vida
vida
Anahi: no puedes proponerte amar a alguien si es lo que estás insinuando que está haciendo Poncho con esta recién pintada
Christopher: claro que no! igual que no puedes dejar de amar.
Bj: Dulce sabría bien de lo que hablamos...
Anahi: entonces?
Christopher: puedes poner por delante otras cosas antes del amor. Y no digo que esta tipa signifique algo, que lo dudo, pero que llegará otra que si será todo, llegará... y que Dulce por más méritos que haga lo tiene pero muy difícil, eso también te lo digo. Este le está poniendo una cruz a ese amor desde hace rato y no se va a permitir ni el menor signo de debilidad.
Cristian: venga Dulce o el Rey de España, Alfonso Herrera dictó ley de la indiferencia y no habrá mortal que pueda derrocarla (Anahi sonrió de una forma tan amplia que sorprendió a Christopher) qué?
Anahi: que esa niña lo tiene todo en contra, absolutamente todo, y a pesar de ello lo logrará
Los tres se la quedaron mirando confundidos.
Christopher: enloqueciste, y con la cabeza también perdiste el oido? ninguna Dulce arreglará esto
Cristian: si piensas que fuiste tú el que la enloqueció es que te sobrevaloras Se abrieron las puertas y Christopher le sacó la lengua a Cristian.
Anahi: escucho con el corazón y eso me hace estar más cuerda que nunca
Cristian: (asintió no muy convencido) buenas noches werita
Christopher: nos vemos en el desayuno...
Bj: si! a las once en la terraza
Las puertas se cerraron y Any y Christopher empezaron a caminar hacia la puerta de su habitación.
Christopher: (la abrazó de lado) qué te pasa tan calladita?
Anahi: (se detuvo y lo miró) creo en ellos (él la miró confundido y asintió) porque viéndoles a ellos aprendí que el amor cuando es verdadero resiste incluso a la muerte. Creo en Dulce y Poncho porque ellos me explicaron, sin usar palabras, que si luchaba por ti no te perdería. Lo entiendes? Si luchas, si peleas por quien amas...
Christopher: (se acercó y la besó con suavidad y con dulzura) eres como un milagro en mi vida y te amo por eso, pero sobretodo te amo porque esperas siempre un milagro en los demás. Ese corazón de niña que tienes no cree en los imposibles y adoro que seas así, soñadora, pero yo soy tu toma de tierra. Soy tu suelo y me necesitas, necesitas esa dosis de realismo para no terminar perdida entre las nubes...
Anahi: (le miró fijamente con picardía y susurró) nubes eh? apuesto que te gustaría que te diera un paseo por las nubes ahorita mismo
Christopher: (sonrió nervioso) creo que ya me están saliendo las alas
Anahi: (lo rodeó con sus brazos por la espalda) aja... echemos a volar!