30 days challenge.

OO8.

so I could take the back road
but your eyes will lead me straight back home
and if you know me like I know you
you should love me, you should know.

-Friends, Ed Sheeran.

Cuando Mark anunció que iba a casarse con Yeji en Londres, casi todo el grupo salta a su cuello a ahorcarlo. Sobretodo RenJun, JiSung y DongHyuck, que no tenían tanto dinero como los demás y pagar un pasaje desde Manhattan hasta el Reino Unido era un gusto que definitivamente no podían darse. Pero, cuando Mark aseguró que pagaría sus pasajes, todos se calmaron.

JaeMin hubiese preferido no ir; ver a su hermano mayor casarse por segunda vez, mientras que él seguía sin poder hacerlo, no le causaba la menor risa. Aún recordaba con cariño a su última pareja, y lo mal que había terminado todo cuando JaeMin mencionó que le gustaría adoptar niños en algún futuro, y poder contraer matrimonio. Que su hermano le embarrase directo en su cara que él podía hacerlo a falta de una, DOS veces, le ponía los pelos de punta y los celos al palo.

Jeno, por otro lado, no podía estar más feliz. Había logrado ganarle a RenJun el ser el padrino de la boda (aún no estaba del todo seguro cómo), y hasta había planeado el discurso que daría. Lo que tal vez no le agradaba tanto, era que ChenLe seguramente le arrastraría junto a JiSung a recorrer Londres, y Jeno jamás fue muy fanático de salir solos a conocer lugares nuevos. Intentó convencer a Mark de que fuese con ellos, pero no fue posible.

Pero, había algo con lo que Jeno no contaba, y era la belleza de Na JaeMin. Jeno llevaba enamorado de su vecino desde hacía meses ya, tal vez años, pues siempre estuvo ciertamente inmerso en su simpleza etérea. Los cabellos marrones chocolate de JaeMin que muchas veces tapaban parte de su frente, y sus ojos grandes y brillantes. Hasta solía distraerse con sus largas y delicadas pestañas, o sus labios finos y rotos. La forma de su mandíbula, o sus pequeñas y finas manos, cuyo toque asemejaba al del terciopelo. Jeno no tenía forma de saber si JaeMin le observaba con tal detalle, ni si alguna vez llegaría a mirarle con ojos diferentes a los de ahora. Pero, claro, nunca estaba de más mantener la esperanza.

A Jeno le costó aceptar la verdadera razón por la cual jamás le agradaban las parejas de JaeMin; lo que terminó de asegurar sus sospechas fue la pequeña felicidad de saber que las cosas entre Na y SiWoon no habían funcionado. Sentimiento, claro, que tan pronto notó, le hizo sentirse como la peor basura que jamás había existido. Porque no es como si fuese a poder decirle la veracidad de sus sentimientos a JaeMin, no cuando Mark era su hermano sobreprotector, no cuando había dejado en claro tantas veces que ellos eran solamente los mejores amigos, y ya.

ㅡ ¿Jeno Hyung?

JiSung le llamó la atención, pues hacía más de 15 minutos que Jeno había posado la mirada en JaeMin y no había vuelto a formar parte de la conversación. La boda aún no comenzaba, y de todas formas Lee no parecía capaz de apartar sus orbes de JaeMin. Llevaba un traje normal como el resto, aunque Jeno estaba seguro de que realmente querría usar alguna de sus prendas extravagantes que tanto le gustaba, y de todas formas se veía más hermoso que cualquier presente; la camisa que llevaba era de un salmón suave que hacía juego perfecto con su cabello rosado, y el negro del chaleco y los pantalones parecía brindar vida. Llevaba un moño rosado por igual, y Jeno estaba seguro de que tenía algo de maquillaje en sus ojos que terminaban de dar el toque perfecto a su imagen. JaeMin tranquilamente podría eclipsar a la novia, estando meramente sentado en la primera fila de sillas.

Al notar la mirada de Lee, JaeMin dirigió sus propios orbes a los ojos del mayor. Jeno observó como las mejillas del menor se teñían de carmesí, al tiempo que levantaba la mano derecha de manera delicada, tan sólo un poco, para otorgarle un saludo suave y breve, antes de voltearse al escuchar cómo la música comenzaba. Jeno estuvo seguro de que el mundo se caería a sus pies al instante.