─ 𝐏𝐑𝐎𝐃𝐈𝐆𝐈𝐎.「мυιcнιяσ тσкιтσ」

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—¿Entendiste?,— asentí con la cabeza agachada. —puedes levantarte.

Hice lo que me dijo, mientras cubría mi espalda que estaba rojiza por los golpes que me propinó mi padre momentos atrás.

—Hazlo de nuevo.

Sujete la katana con fuerza, volviendo a atacarlo. Pero este sencillamente me esquivó.

—¡Así no!

Con su pierna me golpeo en el estómago, haciéndome retroceder y chocar con un árbol. Escupí la sangre que se acumuló en mi boca de manera rápida por la fuerza que uso.

—Ya vas a cumplir diez, ¿Cuándo va a fomentarse en ti el linaje de nuestra familia?

Mi mirada estaba clavada en el suelo, sin saber que responder, mis brazos temblaban ligeramente y una mueca se formó en mis labios. Quería llorar, pero simplemente no podía, si lo hacía era obvio que me iría peor.

Escuche sus pasos dirigirse dentro de la residencia, ya se había ido.

—¡___-san! ¿esta bien, ___-san?

Una mano se posó en mi hombro, hablándome suavemente, pero aun así me dolió ligeramente.

—Estoy bien, Karin.

—¡Como puedes decir eso cuando tienes todo el rostro lleno de rasguños!

Agarro mi mano para entrar, al parecer en dirección a su pequeña habitación.

—Siéntate aquí, traeré algunas vendas y medicina.

Karin era algo así como la criada de nuestra familia, o al menos así la llamaba papá, ya que tenia cinco años mas que yo, y era la hija de la que se encargaba de limpiar nuestro hogar, mire la nichirin que seguía en mi mano, disgustada apreté más el puñal de esta.

—No es justo, yo no quiero ser cazadora de demonios ¿Por qué tengo que hacer lo que quiere papá?— murmuré, para seguidamente soltar un suspiro y soltar la katana.

La puerta siendo abierta me liberó de mis ahogados pensamientos, al alzar la mirada una mujer me miraba desde la puerta, sin ningún tipo de expresión al igual que yo.

—Mamá.

Ella cerro los ojos. —Realmente estas decepcionándonos a todos, a tu edad, tu padre ya podía controlar perfectamente la katana rojiza, y a los catorce, era un pilar, ¿y tú?

Trague en seco, no podía responder nada en realidad. Ella me miro de reojo y se fue.

Unos cuantos minutos más pasaron, y ahora Karin entró.

—¡Regresé!— se acercó a mi con una sonrisa, abriendo el pequeño botiquín que traía con ella. —Puede...ya sabe, ¿bajar un poco la parte superior de su traje?— preguntó con un pequeño sonrojo en sus mejillas pálidas, supongo por lo vergonzosa que era.

Asentí empezando a bajar mi ropa, girándome para darle la espalda, soltó un pequeño grito de asombro al verme.

—___-san...— iba a decir algo más pero al parecer se lo guardo, no tenía caso

Sentí el alcohol en un pañuelo pasar por mi espalda, provocándome muecas por el ligero ardor que sentía, siguió limpiando las heridas para finalmente vendarlas.

—Gracias Karin.— cubrí nuevamente mi espalda con mi ropa y la mire.

—No...no hay de que,— respondió con el ceño levemente fruncido. —déjeme  tratar las heridas de su rostro también, por favor.

Lo pensé por un momento antes de responder. —Bien.

Después del pequeño tratamiento de Karin, fui a mi habitación, agarre más vendas que deje en un cajón e iba envolviéndolas en las palmas de mis manos que también tenían heridas que hacían que se vean desagradables para m gusto. 

Camine hacia una mesa, donde reposaba un libro grueso, lo abrí para leerlo un poco.

"—Katana de sangre; también conocida como nichirin maldita, una técnica que solo la familia (t/a) ____ a podido dominar a lo largo de los años gracias a su capacidad de manipular la sangre de varias maneras, la mas conocida espada, y con mas esfuerzo y perdida de sangre, un escudo, la espada que usan es creada por los herreros especiales que sirven a esta familia, esta acumula la sangre del usuario en la espada, envolviéndola por completo, creando una nichirin mejorada, los beneficios son altos, igual que los riesgos, los usuarios al usar esta técnica seguidamente pueden llegar a contraer anemia, por la pérdida de sangre que puede llegar a haber en alguna batalla (..)—"

—Diría que esto es imposible si no hubiera visto a papá usando esta técnica.— susurré cerrando el libro.

Mire por la ventana, el sol empezaba a ocultarse, debía ir a comer algo, algo que no quiero hacer pero debo, si no mi padre vendría a "regañarme".

—La nichirin "maldita" que se presenta en este capítulo como técnica especial usada por la protagonista no tiene nada que ver con la katana rojiza que sale en los últimos capítulos del manga, es algo distinto.

Si quieren algo de referencia, pueden ver a Mirai Kuriyama, de Kyoukai no Kanata. Ysi, la familia de la protagonista posee hemokinesis. 

HEHEH finalmente, umh, espéreme un poquis mas porq debo arreglar y editar unos cuantos caps mas aparte del que sigue, la historia empieza medio floja pero prometo que avanza rápido D:

Prólogo medio fome, pero espero que les guste ( ◜‿◝ )♡