Un confuso amor (Panjosé)

Enfrentamiento

Narra Panchito

Llegamos a la habitación del hotel y entramos

— chicos ya no puedo con mi alma, iré a dormir— dijo Clarita quien en seguida se fue

— bueno... supongo no va a cenar

En seguida volteé a ver a José que estaba al lado mío y después los dos vimos cómo Donald y Daisy iban a salir de nuevo de la habitación

— ¿a donde van amigos? — preguntó José

— Donald y yo iremos a cenar por ahí— dijo Daisy tomando al pato de la mano

— oh bueno, se divierten— dije, ellos sonrieron y salieron de la habitación... y una vez más José y yo estábamos solos— emmmm hoy fue un buen día— traté de sacar platica en lo que fui a lavarme las manos para hacer algo de cenar

— claro que si y la verdad fue muy lindo acordarnos de cosas de la universidad— dijo José— jamás olvidaré la golpiza de mi vida

— jajaja, perdón, pero la verdad fue más culpa tuya que mía

— jajaja ¡claro que no!— dijo de buen humor sentándose en la mesa para acompañarme en lo que hacía de cenar y dándole un golpe a la mesa con golpe cerrado— tú fuiste el rarito pervertido que dijo que me estaba acosando sexualmente

Me empecé a reír

— pudiste solo haberme ignorado y así te hubieras ahorrado en no haber perdido clases tres días por la paliza que te puse— dije acercándome a la mesa y recargándome

— debo decir que si me asusté esa vez, te vi tan flaco que por eso ni dudé en golpearte pero para mi mala suerte resultaste ser muy fuerte jajaja

Me empecé a reír con el

— está bien, perdóname por eso— le dije— no debí defenderme por que me hubieras golpeado la cara dos veces sin razón alguna perdón

— ¡me dijiste que me estabas acosando!— dijo prendiendo un cigarro mientras reía

— pero me disculpe por estarte acosando wey

Él soltó otra carcajada y después me volteó a ver con una sonrisa y le dio una bocanada a su cigarrillo

— ay Panchito... somos unos cabezas huecas

— Simón, pero me alegro de no ser el único... — le di con el puño cerrado en su brazo— dime ¿que te gustaría cenar?

— haz algo sencillo tampoco quiero que te demores tanto, si quieres puedo ayudarte

— no, claro que no Pepe, tú hiciste la cena tres días seguidos, me toca a mi

— está bien, pero al menos déjame acompañarte

— es lo mínimo que te pido

Seguimos platicando del día de hoy en lo que hacia unos lonches, después nos pusimos a cenar y a platicar de lo felices que estábamos por ver a Donald con Daisy, el patito ya merecía algo de amor pegando al amor de parejas

— ...Donald ya a pasado por mucho y fue de mucha ayuda para el haberse enamorado y más de una persona como lo es Daisy— dijo José mientras se limpiaba el pico con una servilleta

— al chile estoy orgulloso

— también yo...— terminó de decir eso y bostezo

— Oye Lorito, creo que será mejor que te vayas a descansar , estos días no los haz dormido como se debe y te vez apachurrado