Capítulo 5: La borraré

564 60 10
                                    

Una ojiluna caminaba en dirección de la salida de su trabajo pero fue detenida por la voz de su alfa, el cual se acercó con disimulo cuando la vio.

Sasuke: Señorita Hyuga (volvió a llamar con esa voz que hacía que el cuerpo de la ojiluna se sintiera ansioso y triste de alguna manera)

Hinata: Señor Presidente (pronunció ella con una voz baja ya frente al alto azabache, con la mirada aun baja pues no era tan fuerte como pensaba, aún dolía tener que verlo y recordar a su pequeño ser que nunca llegó a tomar entre sus brazos)

Sasuke: ¿Se encuentra mejor? (preguntó con un tono preocupado pero tratando de no mostrarlo mucho)

La ojiluna al escuchar aquella pregunta tan suave de parte del azabache, desviaba su mirada gacha al no saber que responder, pues cuando este se acercó a ella después de que fuera presentada a sus compañeros, su rostro se tornó de un color carmesí y su cuerpo se quedó completamente quieto al estar frente a su alfa con ese aroma fuerte de enojo que desprendía.

Sasuke: ¿Señorita Hyuga? (volvió a llamar esta vez sin formalidad para atraer de nuevo a la realidad a la ojiluna)

Avergonzada de haberse sucumbido en sus pensamientos frente al azabache, este responde con prisa.

Hinata: E-estoy bien señor presidente (se limitó a responder, tratando así de evitar hablar por más tiempo con el azabache que hacía que su corazón se acelerara)

El azabache un tanto dudoso de creer ello, desvía su mirada con su ceño fruncido y doloroso pues no era ningún tonto y se dio cuenta que esta no quería tenerlo cerca. Con ello casi podía confirmar que ella lo recordaba y lo odiaba tal vez.

Sasuke: Es bueno saberlo (dijo con la mirada aun desviada) bueno me tengo que ir (dijo sin más, despidiéndose sin esperar respuesta e irse de inmediato de allí a pasos largos en dirección contraria de la ojiluna) "¿Por qué me preocupé?, después de todo no es mi asunto"

"Claro que es tu asunto (regañó su lobo) sabes muy bien que fue por ti que se puso así esta mañana, el aroma de celos que desprendiste fue muy fuerte para ella"

El azabache ya no queriendo discutir otra ve con su lobo interno ignoró las palabras de este y continuó su camino sin dar respuesta alguna como solía acostumbrar a hacer.

"Eso quiere decir que nuestro vinculo no se borró después de todo" se dijo a sí mismo preocupado de ello, pues si ella había reaccionado al olor que desprendió esa mañana significaba que la marca de hace años no había desaparecido y que es significaba que aún estaban atados.

"Tengo que buscar la manera de borrar esa marca si es que de verdad aún sigue en ella (se dijo serio) no volveré a lastimarla de nuevo (se dijo mientras cerraba sus ojos) pero antes tengo que averiguar si la marca efectivamente aún está en ella" (dijo entre sus pensamientos decididos antes de arrancar su automóvil y dirigirse así hacia su departamento.

La ojiluna quien después de que vio que el azabache se alejó un tanto decepcionado de su corta respuesta, con la mirada triste y temblorosa lo vio alejarse, quedándose para allí mientras veía su silueta alejarse cada vez más.

"¿Por qué tuviste que volver?, esto solo... solo nos lastimará" dijo mientras cerraba sus ojos tratando así de evitar que lágrimas dolorosas salieran desbordantes.

Ya frente a su pequeña casa, luego de haber decidido caminar hasta allí, la ojiluna se adentra a pasos lentos, una vez dentro, esta toma asiento un tanto casada, pero no físicamente sino emocionalmente, ver al azabache y saber que sería su jefe durante un largo tiempo la había destruido de alguna manera.

No lo odiaba, pero el tan solo verlo traían recuerdos dolorosos, ella sabía que debía superar de una ve las cosas pues ya habían pasado 4 años desde que todo sucedió.

[PAUSADA] Abrazame, por favor (SasuHina)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora