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"Cuando me dices que me amas
solo necesito esas palabras
que nunca cambiarás
solo una vez más. Eres todo en este mundo
para mí, abrázame más fuerte y dolorosamente".
—Best of me.BTS

— ¿No deberías estar en casa con tus padres?— Cuestionó el mayor cuando terminaron de ver la segunda película y acabarse por tercera vez el plato con frituras. Soobin se removió entre las sábanas con sus ojos algo hinchados producto de haber dormido a mitad de la película.

Como pudo abrió los ojos y se recargó en Yeonjun dejando salir un profundo suspiro y después un bostezo. No sabían que horas eran hasta que el celular de Soobin se encendió al aplastarlo.

2:11am.

— ¿debería...? Hace uh semanas que yo...— Yeonjun esperó a que SooBin hablara pero al no recibir respuesta se giró hasta observar a Soobin profundamente dormido con su cabeza apoyada en su hombro. Con cuidado de no despertarlo lo cargó colocando sus manos debajo de sus rodillas para después dejar que su menor acomodara su cabeza en el hombro.

Se dirigió a su habitación dejando el cuerpo del peli-morado descansar y caminó hacia el baño para hacer sus necesidades y lavarse los dientes.

Al salir notó como Soobin tenía hecho un especie de nido improvisado en la cama, hecho con sábanas y algunas prendas que tanto le había costado doblar. Dejó de lado eso y fue a la dirección de su novio que cabeceaba tratando de mantenerse despierto.

— Vamos a dormir, hay que arreglar esto— Yeon intentó mover un poco las sábanas pero Soobin se lo impidió abalanzándose hacia él— ¿Que pasó?

— Es un nido... yo... no pude controlarme— Yeonjun sintió la ternura colarse a través de sus ojos oscuros y su tierna sonrisa, era el primer nido del omega. Soobin poco a poco se levantó y volvió a recargarse en la cabecera de la cama.

— Está bien, entrarás en celo y es normal. — Se puso de pie pero se detuvo al escuchar un pequeño chillido de parte de Soobin— No tardo, iré por otras sábanas.

Y solo así pudo obtener el permiso para ir a buscar a un pequeño cuartito, las sábanas. Llegó a su habitación y él se encargó de hacer que SooBin se acostara a su lado, de cubrirlo con las mantas y sus brazos rodearon la cintura de Soobin para hacerlo sentir protegido.

Soobin soltó un ruidito de satisfacción al tener su cabeza en el pecho de su alfa y que los brazos del mismo le rodearan para mantener el calor en aquel frío clima.

Por otro lado Yeonjun se dedicó de dejar besitos en el cabello de su menor y darle certeras caricias en su cadera y abdomen. No durmió hasta que la respiración de Soobin fue relajada, solo de esa manera logró cerrar sus ojos y dormir con verdadera tranquilidad. La tranquilidad de que si Soobin estaba bien, el también lo estaría.

 La tranquilidad de que si Soobin estaba bien, el también lo estaría

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— ¡No Yeonjun! ¡Ah!— Soobin gritó— D-Deja de hacer e-eso que voy a...

Yeonjun paró de inmediato cuando las lágrimas se colaron de los bonitos ojos de Soobin. Quizás no había sido la mejor idea despertarlo con cosquillas en el estómago.

Imposible »Yeonbin«Donde viven las historias. Descúbrelo ahora