Todo parecía tan irreal, por fin conseguimos irnos de nuestras ciudad, mudarnos, dejar nuestro pasado y hacer una nueva vida.


- Lo conseguimos - dije feliz en nuestra nueva casa

- Si, lo conseguimos - me dijo mi hermana mientras me abrazaba


Ainara y yo estábamos arreglando las cosas para adaptarnos a la casa, la casa era pequeñita pero humilde.

- Tengo hambre, ¿hay algo de comer? - preguntó mi hermana

- Pues, no hay nada - miré a mi hermana - Tendremos que ir a comprar -


Cuando tenía 15 años estuve trabajando muchas horas para poder vivir mínima mente bien mi hermana y yo, cuando ya tenía el suficiente dinero y tenía 20 años, decidimos mudarnos por fin y... aquí estamos. 

Le ofrecí la mano - Vamos a comprar algo - le sonreí


Fuimos al mercado de abajo de nuestra casa, compramos lo necesario para esta semana, volvimos a casa para colocarlo todo y para que Ainara comiera.


- ¿Quieres dar un paseo para conocer mejor la ciudad? - le pregunté a Ainara

- Vale, vamos - dijo contenta


Estuvimos andando una hora, cuando decidimos irnos para casa me pareció ver a alguien vestido de negro y enmascarado, pensé que era mi imaginación a si que lo ignoré, cuando estábamos a pocas calles de nuestra nueva casa y volví a ver al hombre vestido de negro nos giramos para ir por otro camino pero, vi desde lo lejos a otro hombre vestido de negro.

Le cogí la mano a mi hermana y nos fuimos a comisaría, justo en las escaleras de la comisaría los hombres nos pillaron.


- Hola - dijo uno de los hombres

- ¿Qué coño queréis? - dije mientras protegía a mi hermana y sin ninguna expresión

El otro hombre se rió - ¿Ya no te acuerdas? - me acariciaba la barbilla

- Yo ya no me acuerdo de nada, estoy haciendo una vida nueva - le aparté la mano

Me cogió del cuello de la camisa - Pues cuando hablemos contigo ya te acordarás -

Me reí - Claro que si - le di un cabezazo y al otro le di una patada en sus partes nobles antes de que sacara el arma


Le cogí la mano a mi hermana y justo que nos giramos para ir corriendo a comisaría nos vio un policía, tenía el pelo para atrás y de color blanco. Los dos hombres de negros intentaron huir pero detrás suya había otro hombre con camisa blanca, pelo negro y con gafas de sol.


- ¿A dónde vais nenas? - dijo el peli negro


Los dos policías los esposaron, mientras los llevaban dentro de la comisaría el del pelo blanco nos hizo una señal para que le siguiéramos. Le hice caso, le cogí de la mano a mi hermana y les seguimos.


- Quedaos aquí - nos señaló los asientos que estaban al entrar a comisaría

Asentí, mi hermana apoyó su cabeza en mi hombro, la abracé. Nos pasamos allí unos 10 minutos, estaba tranquilizando a mi hermana haciéndola reír,  cuando empecé a jugar con ella vinieron los dos policías, los seguimos hasta una oficina del piso de arriba de la comisaría. Me senté en la silla y mi hermana en la otra silla.

GTA Roleplay | LilithDonde viven las historias. Descúbrelo ahora