𝐓𝐫𝐚𝐢𝐜𝐢𝐨𝐧 𝐈

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WILLIAM

Tocan la puerta de mi despacho, después de un "Adelante" Lily entra en mi despacho 

- William llegaron los contratos de la nueva sucursal en Londres – dice mostrando unas carpetas 

- Déjalos encima de la mesa – digo sin levantar la mirada del ordenador 

Lily deja los papeles y cuando pienso que se va a ir rodea la mesa se coloca detrás de mí y comienza a masajear mis hombros acto al cual enseguida me tenso  

- Willy cuando vas a entenderás que te amo y que me duele tu rechazo 

- Lily no vuelvas a tocarme - digo quitando sus manos de mis hombros - sabes perfectamente que no quiero nada contigo lo que paso entre nosotros fue solo sexo te lo eh dicho mil veces y la única razón por la que sigues en la empresa es por el apreció que le tengo a tu padre 

- ¿Es por ella verdad? Es por esa estúpida, desde que la conociste has cambiado – grita histérica

- No te permito que ofendas a Sarah y ahora sal de mi oficina antes de que acabes con la poca paciencia que me queda – digo levantándome de la silla y señalándole la puerta 

- Esto no ha acabado – dice saliendo de la oficina azotando la puerta 

La verdad es que Lily ya me tiene harto y si sigue en la empresa por petición de mi padre ya que es hija de un gran amigo suyo, si no la hubiese echado hace tiempo. Reconozco que fue un gran error acostarme con ella pero ahora ya es tarde para arrepentimientos, hablare con recursos humanos para derivarla a otro departamento porque ya no la aguanto más. Dejo el tema a un lado y sigo con el trabajo, diez minutos después suena mi teléfono miro el identificador y en mi cara se forma una sonrisa que solo ella provoca 

- Señorita Jones ¿a qué debo el honor de su llamada? – pregunto juguetón

- Señor Collins que alegría escucharlo de nuevo – me sigue el juego es que esta mujer me encanta - bueno lo llamaba porque quería saber sí tenía sitio en su apretada agenda para cenar conmigo esta noche 

- Mmm pues esta de suerte porque tengo un hueco libre 

- Que suerte la mía señor Collins, ¿le parece bien a las diez? – ríe 

- Perfecto, pero ¿podría saber el motivo de la reunión? 

- Tengo algo muy importante que decirle – dice y ya me ha entrado una gran curiosidad 

- Seré puntual – digo – además serás mía toda la noche 

- Eso me encanta – dice y sé que está sonriendo 

- Te veo en la noche preciosa 

- Te amo – dice y mi cuerpo reacciona con esas palabras 

- También te amo cielo – termino la llamada 

Después de unas cuantas reuniones y revisar un montón de papeles eh acabado por hoy, son las nueve y diez tiempo justo para ir a casa tomar una ducha eh ir a casa de Sarah cojo el móvil las llaves del coche y algunos papeles que debo llevarme voy hacia la puerta cuando voy a salir un sobre pasa por debajo de la puerta me agacho para recogerlo abro la puerta para ver quien lo dejo pero no hay nadie, se supone que el edificio está vacío todo el mundo se ha ido, solo quedo yo y seguridad, dejo el maletín en la masa abro el sobre y dentro hay fotografías, unas fotografías que acaban de destruirme


SARAH

Son las once y William no llega, él no suele retrasarse y si lo hace siempre avisa. Estoy bastante nerviosa no sé cómo vaya a tomarlo, aun ni yo me lo creo. Estoy embarazada, un bebé mío y de William. No es algo que estuviéramos buscando pero sé que será él bebe más querido del mundo. Ya son las dos de la madrugada William sigue sin aparecer estoy preocupada no contesta mis llamadas ni mensajes por lo que decido llamar a Aarón a ver si sabe algo. El teléfono suena y al quinto pitido contesta

Hasta Que Llegaste Tú Donde viven las historias. Descúbrelo ahora