Nieve con sangré. •°~Kimetsu no Yaiba~°•

CAPÍTULO 3: Respiración de glicinias

Entre un camino de glicinias Zero caminaba, el viento soplaba y las ramas de los árboles se movian, en el ambiente se podía sentir tensión y miedo por parte de los participantes de la selección final.

Había muchas personas y entre todas esas personas ella destacaba, había una gran diferencia entre la actitud de ella y los demas, la gran mayoría de las personas estaban tensos y con miedo mientras que la peliblanca parecía más bien confiada y decidida.

Zero iba vestida con una capa algo desgastada la cual le perteneció a su padre, tambien llevaba un kimono corto sin mangas y unas botas algo largas que compró en un viaje a Tokyo y también llevaba un sombrero de paja de arroz que le pertenecía a uno de sus hermanos, sabía que el examen duraría mucho y que tal vez quedaría expuesta a el sol haci que trató de ponerse ropa fresca pero que a la vez la protegiera del sol y que también le permitiera moverse, en cuestión de armas trató de ir lo mas prevenidos posible, llevaba dos espadas nichirin las cuales le pertenecieron a su madre, también llevaba unos kunais y cuchillos hechos con el mismo material de las espadas y que llevaba ocultas por todo su cuerpo más aparte llevaba un báculo que le servia para defenderse y aparte era el simbolo de su familia, y también llevaba una cantinflora de bambú.

Les empezaron a dar instrucciones, al parecer el examen duraría una semana en la cual tendrian que matar demonios y después regresar al mismo punto en el que estaban, todos estaban con mucho miedo y preocupación pero Zero por su parte no se imutaba, seguía con la misma actitud, definitivamente lograría sobrevivir.

Cuando dio inicio el examen todos empezaron a avanzar a través de las glicinias, cuando Zero se dio cuenta de que se terminaron las glicinias se dispuso a empezar a avalanzarse por las ramas de los árboles.
Zero se abalanzaba y saltaba a través de los árboles y se detenía de vez en cuando para verificar con su olfato  donde estaban los demonios, cuando detectó uno que estaba a punto de devorar a uno de los participantes, no dudó en ayudar y cambio el rumbo de su camino, desenbaino su espada y se abalanzó hacia el demonio mientras preparaba su ataque.

~Respiración de glicina, primera forma, corte púrpura~

Dijo mientras hacía un corte limpio en el aire a la cabeza de aquel demonio, cuando callo al suelo volvió a enfundar su espada y como vio que aquel chico que salvó no tenía heridas graves volví o a retomar su camino mientras el demonio que mató se hacía polvo.

En el camino pudo encontrar algunos otros demonios y los mató siempre con la primera forma de su respiración. Cuando menos se dio cuenta ya estaba amaneciendo y eso significaba que podía tomar un breve descanso, se sentó recargada a un árbol y tomo agua, empezó a buscar algo que pudiera comer y con fortuna encontró un conejo, lo despellejo y se dispuso a hazarlo con una pequeña fogata que ella misma hizo, después durmió en la copa de un árbol hasta el atardecer, subió por los árboles y se dispuso a movilizarse otra vez, se topó con algunas personas a las cuales salvó de ser devorados, iba y venía y nunca ocupaba otra forma de su respiración que no fuera la uno.

Cuando faltaba tan solo una hora para que amaneciera decidió bajar de los árboles para mejor ir a pie, cuando bajó y empezó a caminar, pudo escuchar unas pisadas rápidas atrás de ella pero cuando se decidió a voltear ya era demasiado tarde, el demonio de un zarpazo le rebanó el torso y una pierna, el dolor era horrendo pero ella ya se había acostumbrado y empezó a regenerarse de poco en poco.

- Valla y yo pensaba que hoy comería-dijo el demonio- ¿Quién imaginaria que encontraría uno de los descendientes de los traidores? Jaja~- en total el demonio tenía 6 brazos y su piel tenía un tono azulado, tenía el torso descubierto y su pelo tapaba su cara.

- Pero tampoco parece que sea tu día de suerte- dijo Zero mientras se incorporaba ya regenerada, desenvaino su espada y trato de rebajarle la cabeza pero el demonio se movió más rápido que ella.