-oye vene tenemos que hablar – dijo el ruso entrando a la sala donde el venezolano casi se atraganta con su mango al oír esas palabras –
-vamos chamo suelta el beta- dejo su mango de lado –
-Ya tenemos mucho tiempo junto –
Ok, por el momento todo bien.
-Hemos pasado buenos momentos –
Ahora si que odiaba por donde iba la conversación.
- siempre trasmitiendo me tu seguridad – se detuvo un segundo mirando al venezolano – creo poder decir te esto que me he estado guardando por varias semanas -
Listo mas clarito no podía tener lo, el venezolano.
- Ya no sigas con tu discursito mardito que estoi clarito a donde quieres llegar – se levanto de golpe del sofá, logrando que el soviético le mirara confundido – acaso crees que soy mongólico y que nací ayer pues no mi ciela fíjate que no –
-rusia iba a hablar pero el venezolano no lo dejo- yo estaba clarito que no era suficiente para bajar te la calentura, mis carajitos me lo negaron y como el caído de la mata que soy les creí – tomo un segundo para recuperar aire – creí que al ser jevo mío no lo harías, PERO NO te gano el webo caliente y no pudiste amarrar te la correa sino que fuiste regando el jugo de guanábano por to'os lados –
-vene –
-con quien fue – este no lo escuchaba, Rusia no tuvo más remedio que acercar se al menor mientras este seguía con sus teorías – fue con Prusia verdad? Si fue con el te juro qu...Ah –callo después de quedar atrapado entre los brazos del soviético, quien lo callo con un beso –
-iba a decir para conocer a tus hijos – dijo el ruso después de separar se del beso dejando a un avergonzado venezolano –
-pues' haber empezado por ahí -