Sandro estaba en su oficina revisando unos papeles cuando su asistente entro
-Disculpe su majestad
-¿Que ocurre? -dijo sin apartar la vista de los papeles
-Tiene una visita
-¿Una visita? -alzo su vista -, ¿Quien es?... Sabes mejor no me digas. Dile a quien quiera que sea que no puedo atenderlo que vuelva después
-Su majestad -el le estendio un pañuelo -, me pidió que le entregará esto si no quería verlo
Sandro tomo aquel pañuelo y con las yemas de sus dedos delineó aquel escudó
-Hazlo pasar -dijo con una sonrisa
Las pesadas puertas se abrieron dejando ver a dos figuras entrar
-Tío -exclamo Nicolás al mismo tiempo que lo estrechó entre sus brazos
-Sobrino, que alegría -apoya su frente con la de el -, ¿Cómo has estado?
-Bien tío -trato de guardar sus sentimientos -, ¿Y el abuelo?
-Se alegrará tanto verte -lo abrazo -, te pareces tanto a tu padre... Que eso le traerá alegría
-Eso espero tío
Los dos caminaron hasta los aposentos del rey Elías. Cuando Nicolás entro vio a su abuelo recostado en su cama pero ya no estaba la sonrisa que el tanto lo caracterizaba. Se sentó junto a el a la orilla de la cama
-Kaios -dijo el anciano con voz cansada -, hijo mío estás vivo
Nicolás no pudo más y dejo que las lágrimas salieran sin control ante aquella escena
-No... Abuelo -tomo su mano -. Soy Nicolás... Tu nieto
-Mi querido nieto -acuno su rostro -, te pareces tanto a tu padre, tan guapo como el y el mismo color de ojos
-Abuelo -limpio sus lágrimas -, te pondrás bien. Ya verás que pronto podrás salir de esta habitación
Vio como su abuelo negaba mientras tosió. El le estendio un vaso de agua
-Mi tiempo a llegado -sonrio -, tengo que reunirme con tu abuela y tú padre. Pero no te preocupes siempre te cuidaremos de dónde quiera que estemos
-Alteza -dijo Dalton -. La reina está aquí
-Pronto -beso la mano de su abuelo -, un lugar donde esconderme
-Entra en ese closet -dijo Sandro
Entraron justo en el momento que la figura de su madre se dejaba apreciar atraves de la rendija
-Buenas noches su majestad -dijo ella -. Mis disculpas por no venir lo a visitar
-Me alegro mucho verte Anastasia -le estendio su mano a lo que ella acepto -, no te he visto desde la muerte de Kaios
-Lo siento -dijo sin mostrar sentimientos -, ser reina no es sencillo
-Eso lo sé -sonrio -, pero estás olvidando algo importante... Tu hijo
-Mi hijo se encuentra en perfecta salud -se levantó -, y está bien protegido
-¿Que te ha pasado Anastasia? -ella le da la espalda -, ¿Dónde está? Aquella chiquilla que pasaba todas las tardes corriendo por los prados
-Muerta y enterrada -lo miro -, junto a mi esposo
-¿Has pensado en tu hijo?
-Simpre he pensado en el bienestar de mi hijo -le hizo saber -, lo he protegido y lo seguiré asiendo hasta el día que yo me muera
-Entonces, ¿Por qué no lo muestras al mundo? -ella nego -, necesitas que el mundo sepa que su futuro rey existe y no lo dejaras desprotegidos
-No, mi hijo seguirá ocultó -le señalo -, hasta que yo lo decida. Nadie debe saber de su existencia, ¡Nadie!
-Estas cometiendo un error -le hizo saber Sandro
-No el error lo cometería si lo muestro al mundo -los miro -. No cometeré el error dos veces
Ella dió la vuelta para irse y algo llamo su atención, miro la puerta del closet y luego a Sandro
-¿Por qué no quieres que sepan que tienes un hijo? -preguto Sandro
-Por que el trono es mío -le hizo saber -, y no quiero que nadie me lo quité. Tengo que protegerlo hasta de mi propia sangre
Se fue de ahí con paso decidido
-Esta mintiendo -dijo el rey Elías -, no a cambiado mucho
-Tio, es mejor que yo me vaya -beso la mano de su abuelo -, vendre pronto a visitarlos
Salió de ahí con Dalton y montaron sus caballos. Hicieron el recorrido hasta la cabaña donde estaban quedando
-Estabas en Apolonia -dijo una voz a sus espaldas -, ¿No es así Nicolás?
-Ma... Majestad -dijo Dalton
Se acercó a su hijo con paso firme y sin sentimientos plasmó su mano en la mejilla de su hijo
-¡Anastasia! -grito Dalton
-¡He dado una orden! -grito -. Si no me respetas como tú reina, hazlo como tu madre, ¡No te quiero cerca de Apolonia o cerca del castillo!
-Anastasia fui yo...
-No lo defiendas -miro a su amigo -, se que fue quien decidió hacer aquella visita
Aquel muchacho se llevó la mano a la mejilla por la impresión pero rápidamente la aparto dejando un rostro impasible
-Yo siempre te he respetado, tanto como mi reina como mi madre -le hizo saber -, pero no podía ignorar el echo que mi abuelo esta muriendo necesitaba verlo
-Aun eres muy joven -le dió la espalda -, no sabes muchas cosas
-Entonces explícame las -la tomo de la muñeca -. Madre, por favor
Solo sintio como aparta su contacto como si le repugnara su cercanía
-Hay cosas que aún no podrías comprender -monto su caballo -, es mi última advertencia. Alejate del reino de Apolonia y mantén un perfil bajo
Se fue de ahí con las lágrimas saliendo de sus ojos, limpio rastro alguno de que aya llorado cuando se acercó a Lingrich
-Majedtad, ¿Gusta un poco de té?
Pregunto Meredith al entrar a sus aposentos, mientras le ayudaba a quitar su capa
-Meredith, ¿Sabes si Margaret está en sus aposentos?
-Su alteza Margaret, está en estos momentos atendiendo a una visita
-¿Que visita? -trato de quitarse el vestido -, ¿Alguna amiga?
Meredith le ayudó a quitar su vestimenta dejándola en camisón
-Majestad... Es la princesa Amelia
-¿Amelia está aquí? -volteo a ve a Meredith -, ¿Que hace ella en mi castillo?
-No... No lo sé su majestad
-Bien, tráeme mis alimentos a mis aposentos -le dió la espalda -, no me apetece cenar en el comedor
-Si, su majestad -se inclinó para después marcharse
Anastasia no pudo estar sentada ni un minuto y empezó a dar vueltas
-¿Que haces aquí Amelia? -murmuro -, ¿Otra ves te vas a interponer en mi camino?
Hola mis queridos lectores se que he estado un poco (mucho), ausenté pero he tenido unos pequeños inconveniente pero espero pronto actualizar las historias.
Espero que sea de su agrado este capítulo ♥️ y creo que le he estado dando muchas vueltas y misterios al asunto pero todo tiene un por qué ☺️
¿Quien creen que es Amelia?. Déjenlo saber en los comentarios
Hasta el siguiente capítulo ♥️😍
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La Reina
Fiction HistoriqueAnastasia siempre a querido ser libre de las paredes del castillo, pero dos muertes, una promesa y la venganza harán que acepte su destino. Aceptando aquel poder que se le ha otorgado todo para encontrar al asesino ¿Lo logra o será más fuerte que e...