The Wedding Date🔸»KOOKMIN«

O5

Jungkook le respondió el beso, pero él tomó el control introduciendo su lengua en la boca del rubio. Se sentía tan bien que no se separaron hasta que se les terminó el aire.

-Jimin estás tomado no inicies algo que luego no terminaremos -Jungkook trató de hacer razonar al rubio.

-Shhh, bebí solo un par de copas, se perfectamente lo que estoy haciendo no soy estúpido -Antes de que el castaño volviera a protestar JiMin volvió a besarlo con ansias y pasión. El castaño ya no protestó, llevó sus manos a las caderas del rubio permitiéndole besarle, lamerle y morderle.

Ambos mecieron sus cuerpos al mismo tiempo frotando sus entrepiernas haciéndolos estremecer. El libro que tenía Jungkook en el pecho cayó al piso cuando las manos del rubio se pasaron por su pecho hasta llegar a uno de los pezones endureciéndolos con suaves caricias.

El castaño se sentó sin dejar de besar a JiMin, sus labios eran embriagantes para Jungkook, pasó sus labios por el cuello lamiéndolo y mordiéndolo justo donde termina el cuello e inicia el hombro haciendo gemir al rubio sonoramente.

Como pudo el castaño se levantó del sofá cargando a JiMin en brazos mientras este se aferraba a él con piernas y brazos entre beso y beso hasta llegar a la amplia cama. Jungkook le soltó allí y retiró sus pantalones al igual que los de JiMin el cual al estar libre de prenda se deslizó hasta quedar al centro de la cama en espera del castaño quien tardó solo unos segundos en darle alcance a sus labios volviendo con los besos apasionados.

JiMin le dio espacio al castaño entre sus piernas mientras que con sus manos recorría la ancha espalda del moreno, podía sentir la erección de Jungkook golpeándose contra el suyo en cada embestida que simulaba penetraciones las cuales eran impedidas por la barrera de tela de sus ropas interiores.

-Ahhh… Jungkook! -El rubio se arqueó ante la maravillosa sensación que estaba invadiendo su cuerpo.

-Eres hermoso JiMin -Llevó su mano en medio de sus cuerpos hasta atrapar la erección del rubio bajo la tela de sus bóxers, movió su mano rítmicamente haciendo gemir a Jimin cada vez más alto, aunque le gustaba escucharlo tuvo que callarlo con sus labios o no solo despertaría a los demás habitantes de la casa si no también a los vecinos.

-Jung… Jungkook voy a venirme… ah! -Jadeó el rubio.

-Aún no precioso -Presionó un poco la base del miembro de JiMin evitando que se derramara y se separó de él para terminar de desnudarlos, los ojos del rubio estaba ligeramente empañados de pura excitación.

Cuando ambos estuvieron desnudos JiMin tumbó al castaño y se colocó sobre este repartiendo besos en sus labios, mejilla, cuello, hombro, pecho, bajando lentamente por el abdomen hasta llegar al erguido miembro de Jungkook, ya lo había visto desnudo y recordaba que era más grande que el promedio pero en ese momento le pareció enorme y no tardó en probarlo.

El castaño no esperaba tal hazaña lo cual fue una completa sorpresa para él no pudiendo evitar un sonoro gemido, tuvo que morderse los labios para evitar gritar, no estaba acostumbrado a que le dieran placer, él era el que se encargaba de brindarlo porque para eso le pagaban, allí recordó que JiMin no le estaba pagando por eso y con ese pensamiento se dejó llevar, era la mejor mamada que le habían dado.

El rubio introducía lo más que podía el miembro en su boca y lo sacaba lentamente succionando un poco para volverlo a envolver en su caliente boca, sus manos jugaban con los testículos y sus dientes de vez en cuando presionaban el miembro, pasaba su lengua por la venita de la parte de abajo y volvía a engullirse el miembro cambiando el ritmo constantemente.

-¡Demonios JiMin! De-detente me corro -Jungkook apartó al rubio de su hombría y le besó para controlar un poco su ansia, quería enterrarse en el rubio pero si lo hacía en ese momento seguro se corría y quedaría como un idiota así que se tomó su tiempo en recuperarse.