Knuckles y Shadow pasaban mucho tiempo juntos. Y el hecho de ver al erizo negro en la aldea junto a Knuckles se hizo normal.
Casi todo el equipo habia aceptado eso.
Una tarde llovia suavemente, leve pero a la que muchos no gustaba. Knuckles habia aprovechado a quello para comer con Shadow en un restaurante. Sabia que el erizo no era fan de estar en multitudes, y con la lluvia no habia muchos afuera. A exepcion de ellos, solo habia tres parejas en el local.
La lluvia traia consigo una suave brisa helada, que todos sentian por que el local carecia de paredes. A Knuckles no le gustaba el frio, pero ver al erizo frente a el le hizo ignorarlo. Conversaban o Knuckles hablaba ya que Shadow se limitaba a escuchar.
—¿Te gustan las hamburguesas? —pregunto Knuckles cuando ya no tenia de que hablar. Un poco ironico pues eso comian.
—Un poco —fue su respuesta.
—y... ¿Cual es tu comida favorita?
—Queso cotagge con fresas —¿Eso era comida? ¡Quien sabe!
Cuando terminaron Shadow los teletransporto a casa del echidna. El mas grande no perdio tiempo y corrio a su habitacion por una manta. Tenia frio y el clima le tentaba a dormir.
—¿Por que no me dijiste que tenias frio? —escucho a Shadow a su lado. Sabia que le regañaria pero una idea llego a su mente.
Se destapo para verlo y sin aviso alguno le tomo de los brazos y lo jalo a la cama, se las arreglo para que ambos quedaran debajo de las mantas. Lo abrazo como peluche y se arrepintio por que el erizo estaba mas helado que el. Pero el parecia comodo con el abrazo.
Y sin darse cuenta Knuckles se quedo dormido. Entre sus sueños salieron a flote recuerdos.
Recordo a su familia. Recordo a quel dia en la que el y sus cinco hermanos habian sido puesto aprueba, como tradicion de su aldea, para ser aceptados como un echidna. Una prueba de combate, que todos aprobaron con exelencia. Solo el habia tenido un detalle, era lento para planear una estrategia.
Desde a quel dia se convirtio en un extraño en su propia casa. Sus padres estaban decepcionados.
Solo duro unos años en esa situacion, cuando decidio irse. Sin nada, solo con ayuda de su fuerza fisica se las arreglo para sobrevivir hasta que llego a su actual aldea. Y luego se convirtio en el quinto integrante del equipo de Sonic.
Y ahora era el ultimo de su especie.
Todo estaba bien. Ellos eran su familia pero cuando Shadow comenzo a acercarse, se sintio diferente.
Cuando Knuckles desperto, tenia una sencacion de nostalgia. La lluvia continuaba, y Knuckles solo se aferro mas al erizo.
Por la mañana Shadow desperto temprano como acostumbraba. Pero su mente habia olvidado que se habia quedado dormido con Knuckles, y el erizo se quedo quieto al sentir como era abrazado con fuerza. No sabia que pensar, pero sintio una pequeña emocion en su cuerpo. El no era de fijarse en detalles como el aspecto fisico, pero ahora si que notaba que el echidna era mucho mas grande y corpulento de lo que parecia. Suspiro levemente ante la nueva sencacion que sentia y lentamente acerco su cabeza al pecho de Knuckles.
Serca de medio dia la lluvia habia parado. Y el hambre habia despertado al echidna. Pero se quedo quieto observando al erizo dormir, y sin darse cuenta sonrio. Se levanto con cuidado y fue a la cocina, se puso un mandil y se dispuso a preparar un desayuno o comida.
Shadow desperto a los minutos y le extraño no ver al echidna. Se levanto y estiro su cuerpo, fue a la cocina y encontro una meza arreglada para dos.
—¡Despertaste! —exclamo Knuckles desde la cocina. —Sientate, el desayuno ya mero esta.
Huevos fritos y como postre fresas. Shadow arqueo una ceja por las fresas, un detalle inusual.
—¿Te gusta? —cuestiono Knuckles illusionado. Y solo recibio una sonrisa, eso fue suficiente.
Despues de terminar a quella comida, Knuckles invito a Shadow a comer un helado. Fue, extraño. Mas de un aldeano se detenia a observar como a la sombra de una palmera, en una banca de roca estaba el echidna y el erizo negro comiendo helado. Era curioso.
Despues del helado, Knuckles y Shadow caminaron por la aldea. El tiempo se pasaba muy rapido, el sol se metia y Knuckles no queria separarse del erizo. En ese dia nadie le llamo, nisiquiera para saber como estaba. Shadow se fue a altas horas de la noche, despues de a ver visto una pelicula con Knuckles. Y asegurarse de que durmiera arropado.
El sonido de la TV inundaba una sala poco iluminada. El lugar era espacioso y lujoso. La TV era de un tamaño considerable y frente a ella habia tres sillones, dos individuales y uno de tres espacios, donde perezosamente estaba el espectador de la TV. Recostado a lo largo del sillon, una figura de pelaje negro con un llamativo diamante en el pecho bebia de un baso con una pajilla que se perdia dentro de su mascara. Una larga cola caia al piso donde se movia constantemente, pero lo mas particular eran sus zapatos o pantuflas de dinosaurio.
Al otro lado del lugar, habia una cocina donde se veya a un erizo verde oscuro pelear con el mircroondas.
—¡Nadie me jode! ¡Yo jodo a quien se me acerca! —grito un erizo verde oscuro. —¡Quien se cree ese mequetrefe para burlarse de mi! —y el erizo estaba por gritar mas fuerte hasta que un zapato se estrello contra su cara.
—¡Callate! —grito el atacante desde la sala.
El erizo se levanto apretando los dientes. Y sin acercarse a la sala grito:
—¡Obligame perro! —pero como respuesta vio que se elevaba una mano con notorias garras y le sacaba el dedo del corazon.
El erizo estaba por seguir peleando, cuando el microondas comenzo a hacer ruido. Saco su pizza y arrastro sus pies con pantuflas de dinosaurio verde, hasta su habitacion. A los minutos se escucho un sonido seco, el chacal fue el unico que lo escucho por estar serca de la entrada. Pero en vez de abrir, observo la puerta como las raro del mundo. Llamaron a la puerta otra vez y se levanto, no dudo en abrir por que sabia quien era. El chacal se hizo a un lado para dejar pasar a Shadow y lo siguio con la mirada hasta su habitacion. El chacal levanto su mascara para sacar su nariz y oler el aire, entonces noto algo y corrio hacia la habitacion del erizo, entro sin tocar y se lanzo a la cama de un salto.
—¡Quitate de encima Infinity! —grito Shadow pero el chacal se empeño en aplastarlo y olfatearlo como perro.
—Tu... —dijo con un tono acusador.
Y el erizo capto su intencion.
—¿Quien es? —cuestiono rapidamente el Chacal. Pero Shadow no respondio. —¡Habla puerco espin!
—¡No me digas a si!
—¡Rata entonces! ¡¿Quien es?! ¡¿Es el enorme echidna que colgaba del arbol?! —y nuevamente no tuvo respuesta.
—¡¿Por que ladras tanto perro?! —grito el erizo verde mientras entraba a la habitacion.
—El amargado consiguio novio —dijo Infinity.
—Tu tambien eres un amargado y ... Espera, ¿que dijsite?
—Shadow tiene novio
Silencio absoluto.
—¡¿Y cuando pensabas decirlo?! —grito el erizo verde. —¡¿Quien fue el suicida?!
El erizo negro se negaba a hablar y como solucion al acoso de sus compañeros, se tapo con sus mantas y se hizo bolita. A unque siguieron jodiendole.
