Capítulo. 1🪷

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En Yokohama, una de las mas bellas ciudades de todo Japón, ocurría un problema, para ser más claros en una de las oficinas de medicina y creador de hoteles, se estaban escuchando gritos por doquier, pero solo de la oficina principal, ahí cierto ca...

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En Yokohama, una de las mas bellas ciudades de todo Japón, ocurría un problema, para ser más claros en una de las oficinas de medicina y creador de hoteles, se estaban escuchando gritos por doquier, pero solo de la oficina principal, ahí cierto castaño miraba aburrido la ventana, mientras era regañado por un hombre rubio y de lentes, a decir verdad él no supo cuando dejo de prestar atención al hombre de ideales, solo sabía que cada cosa que salía de su boca era aburrido.

—¡¡Dazai!!¿Estas prestando atención? Es un asunto serio

—Vamos Kunikida, eso no es para nada serio, ¿Quien querría casarse por obligación?

—Ese es el punto Dazai, si no te casas por qué quieres, será por obligacion, además eres un maldito holgazán que hasta pereza le da estar con una mujer.

—Te equivocas —menciono sonriendo de manera coqueta he estado con muchas en la cama, y créeme que ellas ni queja tienen

—¡No me refería a eso maldito idiota! —le arrojo un libro directo a la cara, pero el Castaño logro esquivarlo mientas hacia un puchero

—Podrias dejar eso de lado, no tengo interés en nada de lo que mencionas.

-—Dazai, te lo diré por última vez -le tira a la cara un sobre con varias fotos, y el castaño simplemente retiro de su cara- escoge a alguien que te guste o simplemente al azar para un matrimonio o yo mismo escogeré una para que te haga la vida de cuadritos, alguien que realmente te moleste, y te debe grandes beneficios, me importa poco si lloriqueas

—Es lo único que importa —suspira, y deja su menton reposar en su mano— por algo decidí sacar mi empresa yo solo... cuando Mori la estaba dejando de lado por irse de vacaciones

—Solo has lo que te dije y sin reproches, lo que haya pasado con el no es de nuestra incumbencia ya, el abandono la empresa y es tu obligación sacarla adelante

Suspiro pesadamente mientras sacaba las fotos de aquel sobre Bien, pero solo que no le agradara nada de mi o ella a mi, a menos que detrás de la foto diga que quiera hacer un suicidio doble

El rubio se fue fastidiado de ahí, el castaño suspiro realmente cansado, ya hace meses le habían dicho que debía conseguirse una pareja, y que le diera beneficios, pero le era aburrido, cada vez que conocía a una chica le proponía suicidio doble y estás le veían en ocasiones riendo pensando que era broma e impactadas, hasta molestas, por supuesto todas rechazaban la propuesta dada, eso frustraba al castaño.

Pero se preguntaran quien es el, bueno Dazai Osamu, un empresario y dueño de una gran cadenas de hoteles y hospitales, anteriormente esa empresa le pertenecía a Mori Ogai, quien era el tutor legal de el castaño, quien de la nada abandono la empresa y dejo que decayera, por lo que el castaño se empezó a hacer cargo, lo hizo impresionantemente.

La discusión anterior, se debía a qué al ya tener 29 años, Dazai debía tener ya una pareja establecida, pero no era así, el no tenía interes en ello, por lo que le veía innecesario buscar una pero ahí estaba, observando aquellas fotografías de aquellas chicas de buena familia, latinas, europeas, occidentales, había de montón, solo había 3 chicas que le llamaba la atención, una chica rubia, europea, una chica de cabello azulado claro, japonesa, y una chica pelinaranja con ojos azul cielo, la última en especial le llamo la atención, al parecer le habían tomado la foto desprevenidamente.

Dazai sin mas suspiro y se levanto llendo a la oficina del rubio que anteriormente le gritaba, entro como si de su casa se tratase, llamando la atención de las dos personas que se encontraban ahí dentro, el rubio de lentes y un peliblanco, Dazai se les acerco, le lanzó al escritorio las fotos, el rubio las miro detenidamente y después alzo una ceja mirando a Dazai

—No sabía que esos eran tus gustos, pero de acuerdo

—¿De que hablas? —alzo una ceja dijiste que escogiera y eso hice solo con ellas.

—De nada en específico, organizaré una cita con cada una y hablaras con ellas, si alguien te acepta obviamente será con quién te casarás

El castaño simplemente asintio y se fue, como era de esperarse 2 de las 3 chicas de ahí le rechazaron y prácticamente lo echaron a patadas del lugar, la última era la pelinaranja, quien sin mas uno de los sirvientes principales de la familia afirmó que ella acepto el compromiso sin queja y sin conocerle, pero algo andaba mal y Dazai lo sabía, Atsushi estaba nervioso y eso no indicaba nada bueno.

—Nakajima Atsushi-kun, ¿Que te pasa?

—N-Nada, Dazai-san...

—Claro que si, estás más nervioso que de costumbre —le miro detenidamente

—Y-Yo... Dazai-san, ¿Esta seguro de este matrimonio?

—Bueno, ella acepto sin decir mas ni conocerme, asi que lo mínimo que puedo hacer es conocerla

—Si.. bueno, pero...

—¿Pero?

—Dazai-san, esa chica, es mas bien un chico

El castaño se quedó meditando el asunto, ¿había escuchado bien? Dijo que era un chico, ¿En que se había metido? Todo el camino estaba reconciderando el hecho de beber el aceite de carro y morir o cualquier otra cosa, sobre todo regresar a casa o decirle que el se había muerto, que el compromiso se había disuelto, que suerte para la proxima, después de todo, estar con hombres no era lo suyo, pero sabia que Kunikida le gritaría hasta hacerlo dormir y prefería no hacerlo, no quería escuchar los largos e insoportables reclamos de él, aunque eso no le quitaba el arrepentimiento y ahora Atsushi se sentía culpable por darle una paranoia interna a su jefe, no era su intención alterarle, incluso Akutagawa se lo advirtio pero, como se sintió acorralado no tenia mas opcion, pero ahora debía de cuidar de que su jefe dejara de ver ese tan poco atractivo aceite para carro y tratar de que el estuviera vivo para cuando llegaran.

El castaño se quedó meditando el asunto, ¿había escuchado bien? Dijo que era un chico, ¿En que se había metido? Todo el camino estaba reconciderando el hecho de beber el aceite de carro y morir o cualquier otra cosa, sobre todo regresar a casa o d...

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Así es esta hermosa historia inconclusa volvió al fin, preparen era para el drama de sus vidas, las risas, nla lloradera,n la enredadera, por que si Noches en arabia esta de la chingada en cuanto a trama esta esta peor.

Matrimonio por convenienciaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora