『07』

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Jimin estaba frente al televisor viendo dibujos animados mientras comía un enorme tazón de cereal. Taehyung lo observo en silencio por un momento antes de acercarse a él para cepillar su cabello. Su amigo tembló un poco al sentir su tacto pero rápidamente se relajó y volteo un poco hacia él para sonreírle. Jimin parecía un poco fuera de sí mismo y Taehyung empezaba a preocuparse.

Había pasado apenas una semana pero desde el ataque que sufrió algo había cambiado en Jimin. Cualquier sonido fuerte lo asustaba, todo hombre que se le acercaba lo asustaba... Solía tener pesadillas y los primeros días se la había pasado vomitando. Taehyung sabía que ese comportamiento no era normal así que decidió cuestionarlo y lo sometió al peor interrogatorio de su vida.

Al final Jimin había confesado que en realidad habían sido tres hombres quienes lo atacaron. Había relatado detalles horrorosos de lo que le habían hecho y Taehyung no pudo más que abrazarlo y llorar con él.

Le pidió que acudieran a levantar una denuncia pero Jimin se negó diciendo que no serviría de nada, después de todo no recordaba sus rostros ni mucho menos sus nombres. Él había quedado con un hombre pero al llegar al lugar los otros dos se unieron. Había estado tan asustado que ni siquiera pudo reaccionar o luchar.

—¿Vas a ir hoy también?– preguntó Jimin, sus ojos fijos en la televisión.

—Iré después de salir del trabajo pero puedo volver a casa de inmediato si no te sientes tranquilo.

—No me trates como un bebé.

Taehyung siguió cepillado el cabello de su amigo con cariño. La verdad era que Jimin necesitaba de mucho amor en ese momento. Aquellos hombres lo habían hecho sentir como la peor basura del mundo, lo habían usado hasta el cansancio y luego abandonado de aquella manera tan cruel. No necesitaba preguntar para saber que en ese instante Jimin se sentía en el suelo, pisoteado y con menos valor que un pedazo de trapo sucio.

—Eres mi bebé– dijo y lo abrazó.

Los ojos de Jimin se llenaron de lágrimas que no dejó salir. En cambio su mirada se desvió hacia otra parte.

—Se han ido acumulando– apuntó hacia los recibos sobre la mesa del comedor.

Las deudas estaban consumiendo a Taehyung hasta el punto de dejarlo asfixiado. Servicio de agua, electricidad, gas, renta, transporte, lo del día a día... No alcanzaba para todo eso. Había intentado ignorarlo pero ya era tiempo de ver la realidad, no podía cubrir cada cosa con su empleo actual.

—Ya veré qué hacer, quizás pida un préstamo– trató de restarle importancia.

—Entonces serán los impuestos los que te devorarán. No te preocupes, volveré al trabajo dentro de poco y...

—Jimin quiero que lo dejes.

Hubo silencio, un silencio incómodo y espeso.

—No puedo.

—¿Por qué no?

—No sé hacer otra cosa.

Taehyung resoplo indignado ante aquellas palabras, obligó a Jimin a girar hacia él.

—¡No digas eso!

—¡Pero es la verdad!

—Jimin deja de pensar tan bajo de ti, tú puedes hacer miles de cosas ¡todo lo que pienses y desees puedes lograrlo!

Una carcajada sin gracia brotó desde la garganta ronca de Jimin quien negó con la cabeza y le dio la espalda.

—No soy como tú, Tae.

𝒞𝒶𝓁𝓁 ℳℯ 💋 kooktaeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora