Falso prometido

Cap. 3: La espera

Cap. 3: La espera... 

Jinyoung miro su teléfono por decima vez y volvió a suspirar, odiaba no saber nada de él, odiaba no tener el coraje para hablarle. Jackson no lo había llamado y había ido a verlo en los últimos dos días y él empezaba a preocuparse ¿Su comportamiento de la otra noche había fastidiado todo? Tiro el teléfono a un lado y se acostó en la cama, no estaba de humor para ir a clases hoy.
Repentinamente su teléfono comenzó a sonar y al instante se levanto y miro la pantalla, su ilusión fue en vano, no era él ¿Quién era entonces? Figuraba solo el número ¿Seria Young K? Su teléfono seguía sonando y tenía miedo de atender. Al fin decidió tomar coraje y apretó el botón para aceptar la llamada.
-¿Hola? – Dijo tímido
-¡Al fin atendes hombre!
-¿Bambam?- No podía ser ¿Era él?
-si, el mismo... ¿Qué hacías?
-estoy...en la pieza.
-que aburrido sos - Dijo entre risas- estoy cerca de tu casa ¿Por qué no salís y me acompañas de compras?
-¿Jackson te pidió esto?- Pregunto confuso recordando la ropa que él le pidió a Bambam que le compre.
-no tonto, estoy con ganas de comprarme ropa y...recordé nuestra charla de la otra noche, un nuevo vestuario le gustara a Jackson ¿Qué decís?
-bueno- No pudo evitar sonreír- te espero...

Colgó el teléfono y busco un abrigo, al instante se pregunto cómo consiguió su número y si sabía su dirección. Al llegar a la puerta lo vio estacionando, no pudo evitar sonreír.
-¡Arriba Jin!- Dijo sonriente.

Jinyoung corrió hacia el auto y subió en el contento de salir un rato de su casa, necesitaba despejarse un poco y no pensar tanto en el mayor.

- Hoy compraremos mucha ropa ¿De acuerdo? prepárate...- Arranco el auto y marcharon rumbo al centro comercial.

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Del otro lado de la ciudad y en la casa de Yugyeom, el castaño acababa de entrar en la sala y tirarse en uno de los sillones.
-¿Todo bien?- Pregunto su primo levantando la vista de su revista.
-si, no lo sé- Paso sus manos por su cara intentando quitar sus pensamientos de su mente-mi padre esta fastidiándome con una cena en familia.
-¿Qué hay de malo en eso?- Pregunto sin comprender.
-quiere que invite a Jin y a sus padres- Suspiro -primo, no sé si puedo con esto.
-¿Cuál es el problema? Pensé que ya lo habías aceptado.
-lo sé pero... tengo mis dudas.
-¿Es cierto? ¿O será que temes enamorarte de él?- Jackson se inclino en el sofá mirando a su primo.
-¿Es en serio? ¡Claro que no! Solo....tengo miedo de herirlo ¿Sabes? Él en serio quiere estar conmigo.
-Mira primo- Se acerco mas a él dejando la revista de lado- Jinyoung es un buen chico, si, te quiere y créeme que se nota, pero... ¿Por qué vas a alejarte ahora? Él está dispuesto a hacerlo por vos, quiere esto ¿No?
-si...- Dijo algo indeciso.
-pues...listo - Volvió a recostarse en el sillón- vos planteaste las reglas y él acepto, el que avisa no traiciona...

Jackson miro a su primo intentando convencerse de eso, si, era divertido estar con Jin y besaba muy bien pero ¿Qué pasaba si lo lastimaba? El no quería herir a nadie, sabia lo duro que era el desamor ¿Que debía hacer? Tomo su teléfono pensando en llamarlo ¿Estaría molesto por no haberlo llamado en dos días? Aun no estaba seguro.

-¿Vamos a tomar algo?- Dijo su primo levantándose, Jackson guardo el teléfono y le sonrió.
-me leíste la mente.

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Por su parte, Jin estaba con Bambam en una enorme tienda escogiendo un montón de prendas.

-así que le dije; si no vas a callarte entonces te vas. En serio odio que critiquen a mi chico- Jin sonrió viendo como el menor defendía a Yugyeom.
-Bam...- Dijo repentinamente.
-¿Si?- Paro un momento a mirarlo.
-¿Cómo conseguiste mi numero y...dirección? No recuerdo pasártelas.
-¿Te olvidas que pase a buscarte la otra noche con los chicos? Y el numero, bueno, tengo contactos- Dijo tocándose la punta de la nariz con el dedo índice- ¡Wow! - Tomo un pantalón azul formal, se veía algo entallado, con el venia una camisa blanca impecable - Definitivamente tenes que probarte esto...
-¿Vos crees?- Pregunto tomando el conjunto y mirándolo dubitativo.
-¡Claro! Se te vera genial...- Jin no pudo evitar sonreírle.