✨⭐Un secreto vergonzoso⭐✨

⭐Capitulo#6 Pijamada⭐

En los siguientes días no pasó nada interesante. La feria del libro ocurriría la próxima semana, Daniel y Elaine ya tenían lista su presentación junto a sus disfraces y decoración. Solo les quedaba practicar, Daniel se confundía o se trababa al hablar, esto le parecía gracioso a Elaine, pero Daniel se la devolvía cuándo le ocurría lo mismo aunque no era tan frecuente.

Actualmente era jueves y, Daniel, se encontraba atragantadose por una pregunta que le hicieron Gabriel y Fredy.

Daniel: Perdón... ¿Cuál era la pregunta? - preguntó luego de haber tomado un poco de su jugo.

Fredy: ¿Te gustaría venir mañana a nuestra casa para una pijamada?. - estaba muy positivo.

Daniel: Bueno... Es que... Amm. - no tenía ni idea de que responder.

Damián: Vamos, Daniel, no seas un amargado - dijo mientras jugaba con su comida.

Daniel: No estoy seguro. - la verdad si quería ir, pero si el asistía sería un gran riesgo para que lo descubrieran.

Gabriel: ¡Di que sí! , verás que será muy divertido. - parecía no tener la mínima intención en dejar que se negara.

Lo pensó un poco y respondió.

Daniel: ¡Le voy a preguntar a mi mamá! - se apresuró a decir tras sentirse presionado.

Los tres le sonrieron y continuaron comiendo. Al terminar las clases se despidió de sus amigos y luego se subió al auto de su mamá junto a su hermano.

Mamá: Hola cariño ¿como te fue?.

Daniel:¡Muy bien mami! - contestó lanzado una sonrisa infantil.

Mamá: Bien, y tu Miguel ¿listo para mañana?

Al siguiente día el grado de Miguel le tocaba exponer, el junto a su compañero expondrán sobre las crónicas de Narnia.

Miguel: ¡Si!, tenemos todos listo, aunque estoy un poco nervioso aún sigo confundiéndome en algunas partes.

Mamá: Tranquilo, solo tienes que repasar un poco más y verás que te saldrá perfecto.

El resto del camino fue muy callado, Daniel dudaba si hablar sobre la pijama en ese momento.

Daniel: Mamá... - habló con un tono serio

Mamá:¿Qué ocurre? - ella ya conocía ese tono.

Daniel: Hoy... Me invitaron a una pijama, mañana

Miguel:¡¡Enserio!! - estaba muy feliz por su hermano.

Mamá:¿Y qué piensas hacer?

Daniel: Les dije que te preguntaría. - se puso a ver por la ventana.

Mamá: Por mi está bien, pero ¿estas seguro que quieres ir? Lo digo por el tema de los pañales.

El ante esto último se sonrojo y respondió.

Daniel: No estoy seguro. - apretaba su puño ligeramente.

Mamá: No te preocupes, encontraremos la forma de solucionar el problema.

Al llegar a la casa, Daniel, subió a su habitación seguido por su mamá quien le cambió el pañal con muchos mimos. Últimamente a ella le encantaba ser muy cariñosa con el a la hora de cambiarlo. Daniel, quien al principio se sentía incómodo, admitió que le encantaba ser tratado de esa manera. Después, su madre salió por comida. Él simplemente se puso una playera de Spider-Man y se puso a hacer su tarea. Paso un rato y su madre regresó con comida china para el almuerzo. Daniel estuvo callado casi toda la comida, hasta que su madre habló.

Madre: Y, ¿ya decidiste que quieres hacer?.

Daniel: No lo sé, no quiero que se den cuenta que uso pañales.

Miguel: Yo creo que deberías ir - comentó desesperado.

Daniel: Pero...

Miguel: Sabemos que tienes miedo por lo que paso con... - no pudo continuar, ya que Daniel lo interrumpió.

Daniel: ¡¡Ya sabes que no me gusta que hablen de él!! . - grito enfadado.

Miguel: Perdón - respiro ondo y siguió. - El punto es que si son tus amigos no deberías de preocuparte por eso, estoy seguro que todo saldrá bien.

Daniel:¿Seguro?

Miguel: Eres un casó perdido hermanito, simplemente confía. - le regaló una cálida sonrisa.

Daniel: Está bien, confiaré.

Terminaron de comer y Daniel continuó haciendo su tarea mientras que su madre limpiaba la cocina. Después de haber acabado su tarea, llamó a su madre para que le cambiará el pañal ya que lo tenía muy mojado. Ella sin ningún problema lo acompañó a su habitación y empezó con el proceso. Le desprendió los laterales del pañal, le limpio toda el área, le espolvoreo talco y por ultimo le colocó y ajustó el nuevo pañal. Todo eso con algunos mimos. Al caer la noche Daniel busco a su padre quien se encontraba en su estudio donde se relajaba y hacia algo de trabajo. El necesitaba su opinión para estar seguro, aunque ya sabía cuál iba a ser su respuesta aún así le preguntaría. Tocó la puerta y pocos segundos después su padre la abrió y le dio permiso para que entrará. Al entrar Daniel se acomodo y empezó a contarle todo. Como el se lo esperaba su padre lo apoyaba a ir, pero él aún no estaba seguro.

Daniel: Pero que pasa si... - fue interrumpido por su padre.

Papá: ¿Recuerdas lo que te dije en tu primer día de clases?

Daniel: Que simplemente era un salto de fé - contestó en voz baja.

Papá: Ya tienes tiempo haberlos conocido, ahora la pregunta es, ¿tu crees que ellos tomarán de mala manera tu problema? - estaba muy atento a lo que contestaría su hijo.

Daniel: No, ellos no harían eso. - ese sentimiento ya lo sintió antes y fue apuñalado por la espalda, pero está vez estaba seguro de eso. - Creo que sí iré jeje - soltó una pequeña sonrisa.

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Al día siguiente, Daniel, estaba entrando a su salón cuando se topó con los gemelos quienes le preguntaron de inmediato.

Gabriel: Y bien, ¿si puedes venir? . - estaba atento a su respuesta.

Daniel: Si, sí puedo - contesto con alegría.

Gabriel:¡Que bien! - él como su hermano estaban felices por la respuesta.

El resto de la mañana fue tranquila. Al acabar las clases, la madre de los gemelos habló con la de Daniel para charlar sobre los detalles de la Pijamada. En el camino a casa, Daniel, iba un poco nervioso e inquietó, movía sus pies de atrás hacia delante una y otra vez. Ya en su casa su madre lo ayudo a esconder sus pañales dentro de su mochila para que no los descubrieran. Daniel estaba feliz pero también estaba nervioso por lo que pasaría, dejó de pensar en eso y bajó a ver televisión para distraerse un poco. Antes de salir su madre le cambió el pañal, ya que se encontraba muy mojado. Ya con todo listo partieron camino a casa de los gemelos. En el camino su nerviosismo se intensificaba y su madre trataba de tranquilizarlo con palabras de aliento. Cuando llegaron, Damián se abalanzó contra él y le dio un fuerte abrazo diciéndole.

Damián: Hola Dani, ¿listo para divertirte? - estaba muy animado.

Daniel: ¡Sí! - respondió con el mismo ánimo y luego saludo a los demás.

Su madre se despidió de él y antes de irse le dijo.

Mamá: Pórtate bien bebé.

Daniel se sonrojo tras lo que acababa de decir su madre, sus amigos se rieron en voz baja para evitar molestarlo. El se despidió y luego entró junto a sus amigos.

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Y hasta aquí el capitulo#6 ahora con título. Si les gustó el capitulo no olviden dejar su voto y comentar lo que les pareció. Sin nada más que decir, hasta la próxima!!! ❤️💙💚💛