¿cuántas veces? | croazzu.

OO8.

Julieta.

— Mami, estas re linda. — dijo Tomi haciéndome reír. —Te amo.

—Yo también.— me di vuelta para que suba el cierre de mi vestido y eso hizo.
Me abrazo por la cintura y planto un beso en mi mejilla. —¿Qué onda con Nicole?— preguntó, noté que se tensó.

—¿Porqué esa pregunta?

—El otro día no parecía que estaban bien, por eso.

—Ah, sí...— se encogió de hombros.
—Estamos bien, creo... Ella con sus dudas de siempre y yo siento yo.

—Bueno ¿Vamos?— cambié de tema.

Él asintió y salimos por la puerta, hoy teníamos el cumpleaños de su querida novia. Tomás manejó hasta su casa y cuando llegamos se escuchaba la música desde afuera, había gente en todos lados, conocía a algunos nada más.

—Vamos.— Tomás agarró mi mano y entramos a la casa de mi mejor amiga, quien estaba bailando en el medio de la pista con unas chicas. —Hola, amor.

—¡Bebé!— exclamó esta abrazándolo, cuando se separaron, se besaron apasionadamente. —Hola amiga.

—Hola Pecas, feliz cumple.

—Gracias.— le entregué mi regalo y ella sonrió. —Anda a la barra, hay de todo para tomar.— asentí.

—Bueno, vamos que te voy a dar mi regalo.— le dijo Tomás y se fueron arriba, mientras yo me encontraba fingiendo alegría.

No entendía si él me lo hacia a propósito o a donde queria llegar.

Fui hasta la barra y le pedí al barman un vodka con jugo, pero que tenga más vodka que jugo. Luego de tomar un par de tragos, me sentía bastante fuera de mí. Sentí una presencia a mi lado y miré, era un chico que parecía bastante chetito.

—Hola Juli.— dijo con una sonrisa.

Frunci el ceño. —Hola ¿Cómo sabes mi nombre?

—¿Cómo no voy a saber tu nombre?

Me reí. —¿Y vos? ¿Cómo te llamas?

—Martín.

—Nombre de cheto.

Hizo una mueca. —Puede ser... ¿Bailamos?

Asentí y sin soltar mi trago, caminé al medio de la pista. “Safaera” sonaba y me incitaba a mover el cuerpo al compás de la música.

—Tú tiene un culo cabrón, cualquier cosa que te pongas rompes la carretera...— me cantó Martín al oído y solo me reí.

La estaba pasando bien, hace bastante no la pasaba así. Pasé mis brazos por el cuello del chico y nos miramos muy sensualmente. Miró mis labios con descaro, yo me los relamí.

—No hagas eso.

—¿Porqué?

—Por que me dan ganas de comerte la boca.— esbocé una sonrisa.

—Hacelo, entonces.

Pero cuando estaba por hacerlo sentí un agarre en mi brazo, me voltee y era Tomás. —¿Quién es?— me preguntó.

—Martín.— el chico le extendió la mano pero Tomás arrugó la nariz.

—No me interesa conocerte, aunque lamentablemente ya lo hago. Julieta, nos vamos.

—¿Qué?— pregunté confundida.

—Te tengo que contar algo, importante.

Suspiré y miré al chico que estaba apunto de besar. —Martín, me tengo que ir... Em, @cazzu seguime y te devuelvo el follow.— dije riendo.

—Tranquila, ya te sigo.

Asentí y me fui con Tomás, me sentía medio mal por que me haya interrumpido mi hora del chamuyo por tener que contarme algo, cuando si él quería podía hacer lo que se le antojara sin que yo le interrumpa.

—¿Qué pasa?— pregunté una vez que ya estábamos afuera.

—Pasa que...— suspiró. —Estaba cogiendo con Nicole.

—¿Y? No me cuentes eso, Tomás. Me molesta.

—No, ese no era el punto.

—¿Entonces? Sé directo, Tomás.

—Dije tu nombre.

—¿Qué?

—Le estaba dando y dije tu nombre, se me escapó, no sé y aunque intenté convencerla no me cree. Piensa que gusto de vos.

Negué. —Sos un estúpido.

—Sí, pero ahora está enojada.

—¿Y que esperas que haga?

—Decile que yo tengo ojos solo para ella, no sé, inventa algo como siempre
haces.— asentí.

Caminé dentro de la casa buscando a mi amiga, estaba en la cocina siendo consolada por sus amigas mientras tomaba vodka puro de la botella.

—Hey, Pecas...— llamé su atención, tenía el maquillaje corrido, la ropa revuelta y sus ojos rojos. —Eu, no pasó nada. Tomi ya me conto.

—¡Dijo tu nombre, Julieta! Me sentí asquerosa...

Mi pecho dolió. Nicole siendo hiriente parte mil.

—Bueno, tampoco...

—Perdón, no quise decir eso. Lo que pasa es que no puede decirme tu nombre, boluda.

—Nicole, solo se le escapo. Estamos todo el día juntos, se debe haber confundido, no sé.

—Julieta vos y él...

—¡No!— exclamé y me reí.
—Es más, yo estaba con alguien cuando él vino casi llorando a decirme lo que pasó.

Suspiró acomodándose la ropa.
—No lo voy a dejar igual, porque lo amo.

Sonreí a boca cerrada. —Está bien.

—Gracias por apoyarme siempre en mi relación, Juli.

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lean “prohibido” de neo pistea, es un nuevo fic que esta en mi perfil <3