❝36❞

3.5K 463 217
                                    

Hyunjin observó el pequeño cuerpo del chico que se encontraba completamente inconsciente en aquella cama. Ya había pasado algunas horas y le preocupaba que no estuviese despertando, esperaba que todo estuviese completamente bien o no se perdonaría el no haber llegado antes.

El doctor había dicho que todo estaba bien, que solamente se había desmayado por estrés, sin embargo, aquello no quitaba la preocupación que sentía en aquellos momentos.

Miró al peligris a su lado, que se encontraba igual de preocupado que él. Soltó un suspiro dándose cuenta de muchas cosas ¿Ahora vivían juntos? ¿Realmente estaban haciendo todo aquello? No entendía hasta dónde querían llegar con todo lo que habían hecho y lo que seguían haciendo, pero, de alguna manera los entendía.

Si ellos realmente se querían de esa manera, debía de aceptarlo, porque, de todos modos, él no era alguien lo suficientemente bueno como para juzgarlos. Aunque el solo hecho de pensar en aquella posibilidad le daba un poco de inquietud y ni siquiera sabía el por qué o bueno, lo sabía, pero aun no quería aceptarlo.

—¿Ahora viven juntos? —Preguntó a un distraído peligris.

Beomgyu quitó su mirada del cuerpo inconsciente de Jeongin para dirigirla hacia Hyunjin, con el ceño fruncido un poco confundido con aquella pregunta, para luego soltar un suspiro observando con curiosidad al ahora rubio.

—Sí —Respondió con una sonrisa sin apartar su mirada del chico— ¿Por qué? ¿Te molesta? —Enarcó las cejas cuando observó la imperceptible mueca que se había formado en el rostro del chico.

—Para nada, no me interesa lo que hagan con sus vidas. —Dijo tratando de sonar un poco desinteresado frente al peligris.

Pero, aquello era una vil mentira. Si realmente no le importase lo que Jeongin hacía con su vida, no estuviese en aquel lugar en aquellos momentos, esperando porque el chico despertase. Además, tampoco hubiese arriesgado su vida al golpear a aquel idiota, aunque claramente no había sido un problema grande.

No podía describir aquel sentimiento desconocido que había atravesado su corazón al ver a Jeongin siendo golpeado y prácticamente abusado por aquel tipo, le dio nauseas ver a aquel tipo repugnante y quiso proteger con su vida al pelirrojo.

Solo sabía que por primera vez en su vida se había sentido enojado de una manera inexplicable. Era como si su cuerpo reaccionara por sí solo. No podía controlarse y había sacado fuerzas de dónde no sabía que las tenía. Se había dejado controlar por una ira que jamás había sentido, solamente por proteger a Jeongin.

Y el ver los ojos suplicantes de Jeongin, pidiendo ayuda silenciosamente, solo hizo que su enojo aumentara aún más, nadie tenía el derecho de tocar de aquella manera el cuerpo de Jeongin y mucho menos si era sin su consentimiento. El verlo inconsciente, desmayado en aquel frío suelo, le partió el corazón en mil pedazos y le confirmó solamente lo que llevaba pensando en las últimas semanas. Quería protegerlo, asegurarse de que estuviese bien y nadie se atreviese a dañarlo.

Y sí, él lo hubiese hecho por cualquier persona, una ayuda no se le negaba a nadie. Pero... Él no lo había hecho exactamente por eso, aun sabiendo la razón del por qué lo había hecho, no se atrevía a decirlo en voz alta, pero el solo pensar en Jeongin en problemas, lo volvía loco.

Observó el rostro angelical del pelirrojo, el cual seguía inconsciente, sin darse cuenta de que ambos chicos en aquella habitación, estaban muy preocupados por él ¿Cómo podía lucir tan hermoso sin siquiera esforzarse en serlo? No entendía el rumbo que estaban tomando sus pensamientos, pero el solo hecho de ver a Jeongin colocaba todo su mundo de cabeza.

Todo en su interior se descontrolaba confirmando lo que ya sabía, quería proteger al chico sin importar las circunstancias y le aterraba la idea de que estuviese junto a Beomgyu o con alguien más.

I Have U |Hyunin|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora