RubirexMonth

Superpoderes

-Rubius, deja de jugar.- Bufó el menor sosteniendo la espada en posición defensiva.- Concentrémonos en salir de aquí de una buena vez.

No hubo una respuesta verbal, el único sonido que se escuchaba en esa oscura cueva era el de las gotas de agua cayendo por las estalagmitas.

Observaba su entorno atentamente con una respiración tranquila, esperaba encontrar cualquier perturbación en el aire o algo por el estilo que le permitiera saber dónde se encontraba el otro chico. 

La fuerza en su espalda que le hizo desestabilizarse y soltar su arma lo reveló.

-¡Rubius!- Exclamó enojado.- ¡Detente, rata!

Nuevamente silencio.

Con el ceño fruncido, se agachó para recoger la espada desconfiado. Desde que habían encontrado esas pociones en la casa de la bruja, el mayor solo había estado jugando con sus nuevos "superpoderes" de invisibilidad y visión nocturna que obtuvo de los frascos.

¿Rubius fue tan tonto como para quebrar los frascos en sus pies sin saber qué podía pasar? Sí, pero por lo menos no fue tan tonto como el albino que le incitó a probarlo y ahora se arrepentía de haberlo hecho.

Hace más de media hora que debían salir de ahí para informarle a Merlón del éxito de la misión y aquí los tenían perdiendo el tiempo.

Si tan solo pudiera ver en la oscuridad de la cueva seguramente ya se hubiera marchado él solo del lugar...no sin antes lanzar una piedra gigante a lo Indiana Jones al interior del lugar para aplastar a su estúpido novio.

-Rubius, te juro por los dioses que después de esta me voy a vengar el triple.- Amenazó apretando la empuñadura de su espada.- Así que aprovecha la visión nocturna que tienes y sácanos de aquí.

Pensó que con esas palabras lo haría recapacitar y por fin colaboraría, pero antes de darse cuenta un frasco de color azul fue roto en sus pies ¿Pero qué?

Se sintió débil y mareado, sus piernas cedieron dejándolo arrodillado jadeante. Quería vomitar.

-Lo siento, lo siento.- Escuchó por fin la voz del híbrido sin tener claro si estaba cerca o lejos.- Pensé que daba visión nocturna, culpa mía... ¿Willy? ¿Estás bien?

No, no estaba bien. 

-Idiota.- Fue lo único que logró antes de desmayarse, no supo nada después de eso.

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-Mhp...- Murmuró con una mueca de disgusto, poco a poco iba despertando hasta abrir completamente los ojos confuso, ¿Dónde estaba?

Lo primero que notó fue la superficie el techo de una cama estilo feudal. Se incorporó un poco contemplando mejor todo y cayendo en cuenta de inmediato: Casa de Vegetta.

Era claramente el cuarto principal de su mejor amigo, y no lo decía por los obvios cuadros narcisistas de este sino por el estilo y color empleado en la habitación.

Estaba confuso, ¿qué hacía ahí? Lo último que se acordaba era estar con Rubius en una cueva haciendo el tonto y ahora...

El ruido de la puerta le llamó la atención, dejando entrar al de ojos amatista que le miró brevemente sorprendido antes de sonreírle con amabilidad.

-Willy, compañero.- Saludó.- Veo que despertaste, ¿estás mejor?

La pregunta le hizo fruncir el ceño: ¿mejor?¿A qué se refería con eso?

-¿Dónde está Rubius?- Habían demasiadas cosas en su cabeza que le perturbaban.-Estaba conmigo cuando...- Intentó recordar, pero todo era negro.- ¿Qué pasó? ¿Qué hago aquí? ¿Nos atacaron? ¿Está bien?

Vegetta resopló con una sonrisa divertida y juguetona, le parecía adorable la conducta inconsciente que adoptaba el albino cuando se trataba del híbrido.

-Está bien, fue él quien te trajo.- Explicó tranquilizándolo.- No tengo muy claro que pasó porque hablar con Doblas es tratar con un niño pequeño que no te quiere contar toda la historia.-Alzó los hombros.- Lo que sé, es que te trajo inconsciente pidiendo ayuda mientras intentaba explicar algo sobre unas pociones que daban superpoderes o algo así...

Vegetta siguió hablando, pero Willy ya había dejado de escuchar después de las pociones. Los recuerdos habían regresado a su memoria.

El hijo de su madre le había dado una poción de debilidad.

-¿Dónde está?- Gruñó deteniendo al contrario en su narración.

-¿Rubén? Fue a avisarle a Merlón de vuestra misión.- Respondió con duda.- ¿Por qué pareciera que vas a ir a apuñalarlo con tu espada? Te recuerdo que fue tu héroe al traerte hasta aquí.

Eso último lo dijo con burla, pero era obvio que estaba preocupado por su amigo oso ante la expresión asesina que tenía el albino en su rostro

-Sí, bueno.- Se levantó de la cama sonriendo de lado.- No te preocupes, voy a ir a agradecerle.

A su manera, claro está

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Notas de la autora

Día 11: Superpoderes. Terminado

Vale, en estos tres días sin internet he pensado varias cosas:

1. Encontrar todas las historias de una de GustaboxConway es super complicado por culpa de el fandom que no se decide el puto nombre del shipp.

1.1 Que por cierto, horribles los nombres del shipp... en serio, y lo peor es que lo encuentras en todas las estructuras morfologicas posibles: Intenabo, Internabo, Intendetenabo, Conabo.. no los culpo, Gustabo tiene la culpa con ese nombre que culo, literalmente.

2. Estoy muriendo por no poder ver los directos de Roleplay. Incluso creo que voy a entrar en ansiedad por culpa de eso.

3. Mis notas seguro son más largas que el capitulo, pero necesitaba desahogarme. Se supone que este capitulo era del 11 y ya es 12, ayer no tuve ánimos de continuarlo.

4. Traté de ver si mis vecinos tenían, pero los capullos tienen todos contraseñas. So...F

5. Descubrí que mi galería de música es la hostia, debería escucharla más a menudo xd

6. Espero que la situación no me haga pausar esta historia, les iré informando :'v

7. Los quiero

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