Backwards ➳ n.h

008

Solo los kules van a leer la nota de al final.

Brooke se encontraba en el balcón, admirando las estrellas, pensando en cómo estas alumbraban y adornaban la noche de una forma tan bella. Eran pequeñas pero tan grandes a la vez, nada comparado con Brooke -según ella-.

No entendía por qué le habían dado esa vida, al igual que no encontraba respuesta de por qué el chico le seguía enviando cartas.

Empezó a sentir el viento y las frías corrientes nocturnas. Así que entró a la habitación.

+

Cambiaba y cambiaba de canales, pero no había nada interesante. Decidió escribirle un mensaje a "Edward".

Brooke: Hola, ¿Estas?

Siguió cambiando canales hasta que se rindió. Se quedó mirando el telefono durante unos 10 minutos, él había leído el mensaje pero no le respondía.

Una idea paso por su mente; Si él vió el mensaje, seguramente le mandaría una carta. Entonces el chico la tendría que dejar en su puerta. Lo único que ella tenía que hacer es quedarse junto a la puerta y esperar que la carta llegara para abrir la puerta y verle la cara al chico.

Brooke se había decidido, encontraría a "Edward".

+

Ya llevaba 30 minutos sentada en la entrada, con la mirada fija en la puerta.

Se escuchó un sonido raro en la puerta, claramente no era una mano la que la tocaba pero decidió abrir.

—¿Qué?

La carta estaba ahí, pero no se esperaba que sus ojos vieran ese alguien.

O más bien algo.

+

Brooke seguía mirando ese algo. Estaba en la sala de estar con la carta a su lado pero eso era lo que menos le importaba ahora.

Eso era.. ¿Un auto de juguete?

El chico era realmente ingenioso, le había agregado una pequeña cámara para ver a donde se dirigía. Porque, no podía manejar un auto desde lejos sin ver por donde iba. Se fijaba en cada detalle.

El podía estar viendola a través de la cámara, lo que hacía que Brooke se sintiera observada. No le tomó más importancia y fue a dejar el juguete a secretaría dejando la carta olvidada sobre el sofa.

+

Comía su helado como si su vida dependiera de ello, sentada en una banca dentro del parque más cercano a su departamento.

Alguien se sentó junto a Brooke, quien se limitó a ponerse los audifonos mientras cantaba.

—Painted splattered teardrops on my shirt —Susurró desapacio intentando que nadie la escuchara.

Brooke no era de ese tipo de chicas que les gustaba muchos tipos de música. Escuchaba solo Ed Sheeran, Imagine Dragons y a veces 5 Seconds Of Summer.

Sintió que alguien le toco el hombro, extrañada giro su cabeza, encontrandose con una chica, de más o menos su misma edad. Esta tenía ojos y cabello café, pero era realmente linda. Se quitó los audifonos al escucharla hablar.

—¡Hola! me llamo Leyla. —Habló de forma alegre.

—H-hola, yo s-soy Brooke.

—Lo sé, ibamos a la misma clase en biología. Además que somos vecinas.

—Oh, ¿Vecinas?

Brooke estaba avergonzada de no haberla reconocido, iba en su misma clase. Pero no era su culpa, ella intentaba prestarle atención solamente al profesor, no iba a distraerse para conocer a cada uno de esos estúpidos llamados compañeros. Y si, los odiaba.

—Sip, vivo a tres puertas de tu departamento.

—Ohh.

Se habían quedado conversando hasta que la luz del sol ya se había apagado y lo único que alumbraba la noche eran los pequeños focos de las luces de las calles. Leyla era una de las únicas personas que le habían logrado sacar sonrisas a Brooke en estos últimos años.

—Uh, Brooke.

—Uh, Leyla. ¿Qué pasa?

—No se si te has dado cuenta, pero ese señor nos ha estado mirando por unos ya 20 minutos.

Dirigió su mirada disimuladamente hacia donde Leyla le había indicado. Había un señor de unos 40 años mirandolas fijamente. Tenía unas notables ojeras y ropa poco decente.

—Creo que es mejor que nos vayamos de aquí.

—Pienso lo mismo.

Se pararon y fueron caminando intentanor parecer tranquilas y de manera lenta. Estaban al lado del callejón cuando una mano se puso en el hombro de cada chica. La persona se acerco a sus oídos y susurró.

—Creo que me divertire hoy.

—Corre. —Gritó Leyla, pero antes de lograr dar un paso. El mismo señor que las miraba la tenía acorralada a Brooke con el muro de un viejo edificio.

Leyla no sabía que hacer, solo sabía que no dejaría a Brooke sola. Intentó acercarse pero el señor la golpeó con una botella, la cual Leyla no vió que tenía, haciendola caer inconciente por los pequeños pedazos de vidrio y la fuerza del impacto con el cemento.

El señor presionaba su cuerpo al de Brooke, dejandola sin escapatoria. Quien chillaba y gritaba pero no había nadie cerca que escuchara.

Estaba por sacarle la polera cuando alguien más habló.

—Déjala. Ahora.

Wujuu ¡llegó el super Niall/Edward al recate! Este capítulo creo que esta más largo así que espero que les guste:) y.. Feliz navidad atrasada!!♥ Próspero año nuevo.
Estaba pensando en hacer un grupo de whatsapp, pero no sé si alguien querría entrar, así que comenten si quieren y yo les digo en el próximo cap (si es que hay suficiente personas) para que me den su número por inbox.
Espero tengan una muuy buena semana, chauu.