LA VIDA EN ROMA| JEON. JK

MARCAS.

(mini maratón)

CAPÍTULO XVII🌹

— ¡Demonios! No sirves para nada, tu madre debió de abortarte cuando tuvo la oportunidad—me tomo por los cabellos—pero a ver si con esto aprendes hacer lo que te digo.

Era frío y oscuro. No podía respirar, mis pulmones se llenaban de agua impidiendo entrar el aire. Pataleaba con fuerza en busca de salir a flote pero su mano me la impedían mientras me hundía cada vez más. En mi cabeza solo podía aparecer la imagen de mis abuelos, quería volver con ellos, no aguantaba más.

—El hotel en Canadá es de ensueños, creo que será todo un éxito—todos los hombres estábamos reunidos en el despacho con mi abuelo y mi padre hablando de algunos negocios familiares.

—No esperaba más de mi nieto—brindamos con algo de vino. Deje la copa cuando escuche los gritos de Jae, todos salimos asustados por los gritos tan horribles que daba mi pequeño hermano. Mi madre ya lo tenía en brazos.

— ¿Qué tienes bebé, ¿Por qué lloras?—mi madre trataba de buscar una respuesta pero era imposible para mi hermano articular algo debido al llanto. Me agache a su lado.

—Jae, mírame—tome su carita entre mis manos—¿dime que pasa?

—E-el-ella—trataba de hablar pero como dije su llanto no lo hacía muy fácil—Ella- entro al agua—rompió en llanto.

— ¡Que!

—Estábamos jugando en el jardín, pero yo le dije que fuéramos a la playa—mi madre lo abrazo.

No, no, no.

Solo podía pensar en lo peor, Salí corriendo junto con mis primos detrás de mí. Como se le ocurre meterse al agua con la marea alta y con este mal tiempo. La briza nos golpeaba muy fuerte pues la tarde estaba cayendo, localice sus tenis en la arena. Sentía que el pecho se me comprimía de tan solo pensar lo peor, las aguas eran turbias y las olas salvajes.

—Fu-fue por ahí—la voz de mi hermanito me saco de mis pensamientos—Ella entro por mi balón. ¡Fue mi culpa! Ella no estaba convencida de que fuéramos—no espere ningún segundo y me quite los zapatos.

—adonde crees que vas—Stefan me tomo por el brazo—estás loco si piensas que te dejaremos entrar al agua.

— ¡Acaso tienes una mejor idea!—a la mierda si esto era una locura.

—No, no la tengo. Usa la cabeza Jeon, que pasaría si tú también quedas atrapado bajo las olas; ya no sería uno si no dos personas ahogadas—me solté de su agarre.

Me estaba desesperando por no saber qué hacer.

— ¡Ya cálmense ambos!—mi madre gritó—Jiwon, llévate a jae. Tenemos que llamar a los paramédicos o alguien que nos pueda ayudar a buscarla.

—tomarían horas en llegar hasta aquí, de todos modos...no creo que ella aun siga viva—de tan solo escucharlo me hierve la sangre.

—Cállate, no digas estupideces—sé que mi padre no tienen la culpa pero aun así no puedo pensar que ella ya no...

—Tienes que tomarlo en cuenta Jungkook, ya paso mucho tiempo bajo el agua—esta vez fue Melissa.

Estábamos todos desesperado por no saber qué hacer, estaba por meterme al agua aun así me lo impidieran. Pero me detuve l oír el grito de Sook.

— ¡Miren! ¡Haya esta!—todos volteamos hacia donde apuntaba.

Sentí que el aire volvía a mis pulmones. Ella estaba tirada por un montón de rocas apiladas, corrí hasta tirarme a un lado de ella: su cara estaba pálida, sus labios morados y todo su cuerpo estaba frío, sin color. Me acerque para escuchar su respiración pero no se oía nada, tome su pulso y eso me alarmó. Leo se puso del otro lado.

—Hay que darle RCP, te avisare cuando tengas que darle respiración boca a boca—abrió su suéter dejando solo una fina y delgada blusa de tirantes. Posiciono ambas manos en la caja torácica dando compresiones simultáneamente—ahora.

Repetimos dos veces más, a la tercera reaccionó escupiendo agua. Sentí un gran alivio, su cuerpo estaba débil por el cual no podía ni levantarse. La tome en brazos para calentarla mientras acariciaba su cabello negro.

—Ustedes, preparen la ducha con agua caliente y busquen ropa seca—mi madre le ordenó a una de las chicas de servicio—tenemos que llevarla adentro.

(...)

Esta semana había sido de locos. Hace horas el doctor había venido a revisarla, los sonidos en las escaleras dejando ver al hombre con bata blanca. Enseguida nos pusimos de pie esperando alguna respuesta.

— ¿Cómo está?—pregunté.

—solo está algo débil y sus pulmones absorbieron mucha agua pero creo que pudieron reanimarla y hacer que expulsara todo. Solo necesita descansar y le deje a tu madre una receta por si llega a tener fiebre.

Deje a los demás con el doctor y subí hasta su habitación. Toque aunque estaba abierta pues mi madre estaba con ella. Me sonrió levantándose:

—Jae me explico todo: no soporto verlo llorara por el balón y se arriesgó antes de que Jae lo hiciera—dejo un beso en mi mejilla—los dejo solos.

Mi madre cerró la puerta, la observe por unos instantes hasta acercarme y tomar asiento a su lado. Su piel ya tenía algo de ese hermoso color bronceado, su labio ahora tenía un tono rosa.

—Estúpida, me diste un gran susto—susurre.

Seguí contemplando, hasta que repare en sus brazos. Ladee mi cabeza un poco pues note marcas ya no muy visibles, las tenía por muchas partes.

Que demonios...

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Regrese ja,ja,ja

Mil gracias por 1k de seguidores. Sigamos disfrutando por mas tiempo:)💜

Me di cuenta que mi hermana tiene youtube Premium y pues me perdi la bangbangcon😭😭 F para mi.

Aqui les dejo un capítulo chicas, nos vemos al rato ;)

Pd: nuestros nenes se ven hermosos con sus nuevos estilos.