9. Desde el Edén.

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Habían transcurrido exactamente cuatro semanas desde que Crowley y Aziraphel, finalmente habían confesado su amor, así como también, habían pasado cuatro semanas desde el supuesto fin del mundo, pero el único motivo por el cuál estos dos acontecimientos parecían estar relacionados, había sido aquel inocente beso entre el ángel y el demonio, como si aquél primer contacto hubiera servido como una especie de tregua entre el bien y el mal, porque tarde o temprano, la guerra entre el cielo y el infierno sería algo inevitable. Mientras tanto, Aziraphel y Crowley seguían disfrutando de sus citas y sus caminatas por el parque, sin embargo, la tensión sexual que estaban experimentando y que cada vez aparecía con más fuerza, estaba a punto de explotar. Ambos ardían en deseo, pero ninguno de los dos tampoco se atrevía a cruzar la línea. El autocontrol de Aziraphel estaba por los suelos, y que decir de él de Crowley, es por eso que el ángel, había organizado todo un itinerario para mantenerlos ocupados. Principalmente, Azira había agregado a sus planes (además claro, de sus respectivas cenas) visitas a museos, funciones de teatro y clubs de lectura, los cuales, en un principio Crowley se negó rotundamente, pero al cabo de uno días, Aziraphel notó la chispa en su mirada, cuando comenzó a leer Persuasión de Jane Austen y Sandman de Neil Gaimam.

-Este tipo es realmente bueno. - confesó el demonio. - Hasta me dan ganas de tentarlo para que escriba nuestra historia.

-¡Crowley! - exclamó Aziraphel sorprendido. - ¿Te refieres a que has incitado a personas en el pasado, para crear sus obras maestras?

-¡Por supuesto que no! ¡Como te atreves! Eso sería demasiado sospechoso. - se excusó, mientras desviaba la mirada, pero Aziraphel comprendió que en realidad, su mejor amigo y ahora novio, solo estaba avergonzado.

-Pues a mi me parece que sí. - le restregó. - Y más que sonarme a tentación, casi parece como un milagro.

-¡Pero no lo es! - aclaró Crowley.

La realidad, era que el demonio si lo había hecho, sin embargo, tuvo que mantener un perfil bajo para que Hastur y los demás no lo descubrieran. En octubre del 2013, cuando paseaba por Irlanda, Crowley terminó en un pub donde, perdido por sus propios demonios, conoció a Andrew John, quién al parecer, se dió un respiro del set de grabación con el propósito de aclarar su mente, luego de unos minutos, ambos caballeros terminaron hablando del cielo y del infierno. Andrew definitivamente estaba en contra de la religión, y Crowley de las malditas reglas ¿Quién carajos le había prohibido a un ángel, enamorarse de un demonio? ¿Cómo era posible que un demonio, pudiera sentir amor hacia su propio adversario? En un principio, a Crowley le jodía bastante los sentimientos que tenía por Aziraphel, pero desde que entró al maldito jardín y lo vió, supo que tenía seguirlo. Sin siquiera pensarlo, la serpiente reptó desde el Edén solo para poder estar cerca del ángel, y esperar el tiempo que fuera necesario para declarar su amor. Andrew sonrió de oreja a oreja cuando escuchó a Crowley contar esa historia, y entonces, la letra de una canción comenzó a escribirse en su mente.

En marzo del 2014, Andrew John mejor conocido como Hozier, lanzó al mercado su sencillo: From Edén, inspirado por el extraño desconocido, en el bar de su natal Irlanda.

-Esa canción es realmente hermosa - dijo Aziraphel, cuando horas más tarde, ambos se encontraban en el auto.

-Lo es. - confesó Crowley, mientras maniobraba el volante.

-Todo en ella me suena muy familiar.

-Es solo una casualidad, ángel. No te compliques.

Aziraphel le dió la razón a Crowley pero en el fondo, algo dentro de él le decía que no era cierto, esa canción era demasiado específica. El demonio se veía reflejado en el ángel, porque tiempo atrás él también fue uno, pero ahora el pobre estaba condenado. Y si sumamos a esto la línea del Edén y del picnic, solo faltó que en la siguiente estrofa, dijera el nombre de Aziraphel.

Presagios Inefables - INEFFABLE HUSBANS -Donde viven las historias. Descúbrelo ahora