La mañana llegó igual de tranquila que siempre, con su sol radiante y canto de los pájaros. Levi y yo nos arreglamos para ir a casa, sin antes llamar a unos chicos a que nos ayudarán a subir hasta allá.
Llegamos a casa a eso de medio día y al parecer nadie estaba en casa, los dos alfas se habían ido con el bebé, los jóvenes dejaron el equipaje en la sala y de nuevo les pagamos y les dimos agua.
Hacemos el almuerzo para los cuatro pero ellos nada que aparecen. No me preocupa, pues tal vez eren ha vuelto a irse; levi desempaca su ropa y la acomoda en su closet, yo hago lo mismo y de hecho eso sigo haciendo.
Tengo puesto el vestido naranja pastel de ayer, unos zapatos normales. Acomodé en la parte más escondida del closet la caja con mi ropa favorita. No me siento preparado para mostrársela a eren. Esa ropa es muy importante para mi, quiero esperar el momento adecuado para que el me note a mi y mi hermosa ropa.
Doblo la ropa mía y de eren, está doblada por supuesto, pero su olor resalta más cuando muevo su ropa. Una camisa me llama la atención, una camisab que no estaba doblada y al parecer es reciente. La llevo a mi nariz e inhalo ese aroma maravilloso y único. Se me pone la piel de gallina y cierro mis ojos para dejarme llevar por una nueva fantasía.
Un calor fuerte me abrasa por completo, siento mis piernas temblar al igual que mis manos; trato de calmarme lo mas que puedo, pero el olor de eren aun sigue en su camisa y en la habitación, intento levantarme inútilmente, pues una humedad en mi parte trasera se presenta, obligándome a caer de frente al piso. Me remuevo un poco experimentando esos síntomas de celo que se me hacen conocido; no ahora, no quiero estar en celo, eren se irá y me dejará solo. No quiero que me deje, no quiero estar solo otra vez.
- Eren.
Lo llamo, se que no está en casa pero lo llamo, me arrastró a la cama y como puedo me subo a ella. La almohada huele a él, las cobijas y la camisa sigue impregnada de su olor. Volteo la mirada hacia la puerta e insisto nuevamente. Lo llamé de nuevo, sin parar de recorrer mi cuerpo con mis manos, quitandome la ropa despacio, esperando inpasiente a que eren sea quien la retire. Eren no llega, no siento su presencia ni nada, no estába cerca. Llamé otra vez, suplique mientras las lágrimas brotaban de mis ojos y ya estoy desnudo del todo; mi interior estaba cosquilleando y humedeciendose más.
- Alfa, ¿que esperas? Ven.
Lo llamo, está vez intentando llamarlo a través de ese vínculo inexistente, no me rendí y sigo llamando. Siento voces abajo, trato de levantarme pero igual que la vez anterior intento llamar su atención. Me envuelvo en la sabana que esta a un lado y me escondo de su mirada, así no haya entrado aún se que me dirá algo que no me gusta, empacara su ropa y se irá hasta que mi celo pase.
Debo tranquilizarme, pues una idea llega a mi mente.
Tal vez si no le demuestro que estoy en celo talves se quede. Me dolerá mucho, mis ganas de aparearme tendré que ocultarla al máximo, no podré tocarme en la habitación y menos liberar tantas feromonas que sea notable incluso para levi y su esposo. Será difícil.
Con las manos temblando y lo más rápido que puedo intento venirme para calmar mis ganas, no demoro mucho y me visto. Me arreglo el cabello y salgo a la puerta, abro despacio y salgo hasta el pequeño barandal que muestra la parte de abajo de la casa.
Los dos han llegado, uno sonriente y el otro serio y tosco como siempre. Me acerco a las escalas y sostenido e bien para no caerme con la debilidad de mis piernas bajo despacio.
Y ahí esta el, con esa mirada seria y sexy, esos ojos que me recorren el cuerpo, esos ojos se detienen a mirarme de pies a cabeza, dejándome la sensación de siempre, necesitado de él. Mi interior se humedece aún más, me sostengo con ambas manos y lo llamó con la mirada.
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LUNA LLENA [Ereri]
RomanceEl solo creer que mi vida sería perfecta fue un total error. Pues a fin de cuentas no hay que confiar en los estereotipos, pues te puede salir muy mal.