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"Ese puchero me mata como el tenerte a mi lado y no poder besarte"
°°°
El día siguiente...
El chico rubio se levantó con un dolor constante en la cabeza por haber tomado tanto escabio pero ni con eso se podía olvidar de aquella sonrisa de la chica.
Hasta que se le cruzó por la mente aquella frase que se le ocurrió en la plaza, se levantó rápido de la cama y saco su libreta junto a un bolígrafo de tinta negra y a noto su frase.
"todos mueren por verte fumar"
Solo tenía aquella pequeña frase, necesitaba conocerla más a fondo, saber todo de ella, si con solo lo exterior le gustaba no quería saber cómo le iba a tener lo interior.
En su gran reloj de la pared marcaba las dos pero el hambre no se hacía presente en su estómago.
Se fue a la ducha para quitarse ese espantoso olor a vómito y alcohol y así también intentar calmar el dolor de su cabeza.
Apenas salió con una toalla que rodeaba toda su pelvis hasta la espinilla, buscó por todo su armario hasta toparse con una sudadera morada y verde junto aún pantalón de chándal negro y unas zapatillas Nike.
Bajo al Salón y se le hizo extraño que la casa estubiera tan tranquila y sin ningún ruido así que sospecho que su hermano se había con su preciada novia.
El rubio quería estar solo y en calma así que decidió ir al mejor sitio que siempre le transmitía paz, el parque.
Salió de su casa en rumbo aquel parque mientras en sus auriculares se escuchaba su gran canción y amada por todo el mundo canguro.
Por fin llegó y agradeció de que no hubiera nadie, se sentó al lado del rugoso y grande árbol, disfrutando de la paz hasta quedarse dormido con el cantar de los pájaros al Fondo.
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Valentín estaba siendo agitado y también alguien le gritaba haciendo que este se levantara de su larga siesta.
Volvió a ver aquel rostro que tanto añoraba y quería, aquel rostro que no se iba ni un minuto de su mente.
-me había asustado pensé que estabas muerto o te había pasado algo- río algo nerviosa mientras se rascacielos su nuca-.
-tranquila solo estaba durmiendo- río el joven-.
Había un silueta detrás de la chica, Valentín miro hasta que llegó a distinguir aquella silueta con su compañero de FMS el queridisimo cacha.
Al ver eso, muchas preguntas corrían por la mente del rubio, la que más se repetía era "estarán juntos? "
-a pues perdón por haberte molesto- la chica se puso algo triste haciendo que se formara un puchero en sus labios-.
Aquella acción derritió completamente al contrario el cual pensaba que ese puchero le mataba como el tenerla a su lado y no poder besarla y sentir esos carnosos y cálidos labios.
-no pasa nada en serio- puso su mano en la pequeña y suave mano de la contraria-.
Ante aquella acción los dos se quedaron callados mirando sus manos apreciando el tacto del contrario hasta que el chico decidió romper el silencio.
-quieres quedarte? - con las mano sobrante cruzaba los dedos para que le dijera que si-.
-si claro pero tengo que despedirme de Edu, ahora vuelvo- le regalo una sonrisa-.
La hermosa chica se dirigió a donde Cacha y le dio un largo y reconfortante abrazo para luego soltarse y que el castaño le depositará un beso en su frente.
La chica volvió junto al rubio sentándose a su lado acompañada de una sonrisa tierna.
-este lugar es muy bueno para cuando quieras estar solo y pensando en tus cosas- dijo la chica con su cabeza apoyada en el hombro del contrario-.
-si, posta yo vengo aca a pensar o escribir- la miraba de reojo junto a una sonrisa-.
Ella cerro sus ojos para disfrutar más del ambiente de paz junto aquel chico , los dos estaban en silencio pero era un silencio reconfortante hasta que aquel silencio fue interrumpido por el agudo y delicada voz.
-oye tienes cascos? - pregunto la chica mirandole-.
-si claro toma- se saco un auricular de su oido para dárselo a la joven-.
-me gustan tus ojos- piropeo la chica al contrario -.
El se sorprendió hacia aquel piropo, sonrio con un rubor rojizo en sus mejillas, algo que le encantan a Valentín de la chicas es la sinceridad y confianza.
-que canción queres que ponga- alzó una ceja el chico-.
-una tuya, la de Andrómeda si se puede- abrió los ojos sonriendo-.
-te gusta? - cuestionó eufórico-.
-te soy sincera, eres de mis cantantes favoritos y Andrómeda es otro nivel- volvió a cerrar los ojos para disfrutar más de la canción-.
El chico buscó Andrómeda hasta encontrarla y ponerla para después cerrar los ojos y disfrutar de la compañia de la contraria mientras sonaba de fondo su canción Andrómeda.
Sabes esos momentos que te marcan y no se te olvidan de por vida, pues ese era uno para el y era de los bonitos.
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Bue voy avisando porque me vale verga,va a ver segunda temporada de esta novela y el final no les va a gustar pero no me maten.
