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» ◌ ⁺ ┊͙ᵎ ˚ 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐃𝐨𝐬 ˚ ᵎ┊͙ ⁺  ◌ «

—Hola a ti también —finalmente
logró decir, inyectando el sarcasmo suficiente para enmascarar su dolor e inseguridad.

Siwon se detuvo a menos de un brazo de distancia. —¿Qué estás haciendo aquí?

—Vine a verte. —Heechul tragó saliva—. Necesito hablar contigo.

—No. —Siwon negó con la cabeza—. No tenemos nada de qué hablar.

—Hay mucho para...

—Vete, Heechul

El sonido de Siwon diciendo su nombre debilitó su resolución, pero pudo soltar el aliento.

—Por favor. Después del servicio, ¿podemos tan solo...

—No. Cualquier cosa que pasó entre nosotros fue hace cinco años.

—Y todavía duele después de cinco años...

—Tienes que dejarlo ir —Siwon dijo entre dientes. —. Tienes que irte.

—¿Cómo tú lo hiciste? —contratacó.

—No entiendes.

—Tienes razón. No lo entiendo. Es por eso que estoy aquí. —Se acercó un paso más y comenzó a hablar de nuevo, pero Siwon lo detuvo con una mano en su pecho. Heechul no pudo respirar, ese contacto fue el opuesto a los toques cariñosos y apasionados que alguna vez en su pasado compartieron.

—Por favor —susurró—. Sólo dime...

—No tengo que darte explicaciones. —retiró bruscamente la mano—. Sobre todo después de todo este tiempo.

—Entonces, ¿hay un límite de tiempo para lastimar a tu mejor amigo?

—No me dejaste elección. Me estabas conduciendo por un camino peligroso y...

—¿Conduciéndote? La última vez que lo comprobé, podías conducirme a la excitación, no podias dejar de...

—Tienes que irte —gruñó Siwon

—Siwon, ¿podrías escuchar...

—No. No lo haré.

—Sólo quiero hablar contigo.

—Vete.

—Por el amor de Dios, ¿por qué no...

La música cambió. Siwon echó una mirada por encima de su hombro. —Tengo que irme. —Señaló la puerta detrás de Heechul—. Y tú también.

—¿Por qué? ¿Porque soy gay? —Heechul apretó la mandíbula—. ¿O porque tú lo eres?

Wow. Nunca había visto tanto odio en esos ojos, y lo dejó sin aliento

—Suficiente. Ya hemos terminado.

No le dio la oportunidad de responder. En un instante, se giró y caminó de vuelta por el pasillo sin mirar atrás. Unas pocas personas miraron a Heechul, sus expresiones desconcertadas, pero entonces Siwon tomó su lugar frente a ellos. Echó sus hombros hacia atrás, se vistió una sonrisa, y comenzó el sermón como si nada hubiera pasado. Su voz era constante y suave y tranquila sin un rastro de veneno y la sostuvo a través de la iglesia cavernosa, haciendo eco a lo largo de las altas vigas y las paredes de piedra.

Heechul se quedó en el vestíbulo por un momento, todavía recuperándose de que estaba en el mismo espacio que Siwon. De alguna manera, esto dolía incluso más que el rechazo. Como si la venda le hubiera sido arrancada y la herida reabierta, y ahora estaba solo de nuevo. No pudo distinguir las palabras del sermón. Todo lo que escuchaba en la voz del sacerdote era: Fuera.

Y ahora que todo estaba dicho y hecho... ¿qué otra cosa podía hacer?

Con el corazón en la garganta, se volvió y salió por la puerta. El frío lo golpeó en la cara y le picó en los ojos. Cada paso que bajaba por las escaleras de piedra se sentía a derrota, pero no se detuvo hasta que llegó a la acera.

Había una parada de autobús allí, pero necesitaba alejarse mucho más que eso. Entonces, con las manos metidas hasta el fondo en los bolsillos de su abrigo y la cara acurrucada en el cuello, mantuvo la mirada baja y caminó tan rápido como pudo sin ponerse a correr.

Finalmente, levantó la cabeza y miró a su alrededor. La iglesia estaba lejos, detrás de él. Con seguridad, fuera de su vista. De alguna manera todavía podía escuchar los himnos sonando en sus oídos y sentía la voz de Siwon haciendo eco junto con los latidos de su corazón, pero no creía que estos desaparecerían pronto. Al menos estaba fuera de ese edificio y lo bastante lejos como para recuperar el aliento.

Más despacio ahora, continuó caminando hasta que encontró una parada de bús diferente, y cuando el autobús llegó, se acomodó en un asiento y apoyó la frente contra la ventana fría. Mientras el autobús se alejaba de la acera, No pudo evitar que su cabeza volviera a recordar la última vez que estuvieron juntos

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Sins ›𝙨𝙞𝙘𝙝𝙪𝙡‹Donde viven las historias. Descúbrelo ahora