Sins ›𝙨𝙞𝙘𝙝𝙪𝙡‹

O3

» ◌ ⁺ ┊͙ᵎ ˚ 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐬  ˚ ᵎ┊͙ ⁺ ◌ «

La cama apenas era lo bastante grande para los dos, pero se las habían arreglaron. No era que estuvieran nunca lo suficientemente separados como para necesitar todo el colchón de todas maneras. Después de todo, este era el único lugar en donde podían estar así de cerca. En cualquier otro lugar, no se acercaban en lo absoluto. Tenían que mantenerse a distancia para que nadie lo notara.

Era allí, en el departamento de Heechul, que compensaban todo ese espacio y tiempo perdido.

No estaban teniendo sexo en ese momento. Lo habían hecho más temprano, y no dudaba de que lo harían de nuevo, pero en ese momento, simplemente estaban... allí. Siwon se sentó contra la cabecera, y Heechul se inclinó contra él mientras las manos del moreno lo recorrían todo —perfección. Durante las últimas semanas, eso se había convertido en lo que más le gustaba a Heechul en todo el mundo, y los dos podían quedarse así durante horas. A veces hablando. A veces besándose. Siempre lo bastante cerca para que su calor corporal se mezclara.

Heechul sonrió para sí mismo mientras se acurrucaba más cerca. Le encantaba que las manos de Siwon nunca estuvieran quietas por mucho tiempo. Si no estaban recorriendo sus brazos, se arrastraban a lo largo de su muslo o su costado o sobre su estómago. El roce cálido y ligero como una pluma era adictivo, y con mucho gusto se había dejado enganchar

En la mesita de noche, el teléfono de Siwon zumbó, sobresaltándo a ambos, y recordándoles que aún existía un mundo fuera de esa habitación.

Siwon maldijo por lo bajo.
—¿Y ahora qué? —Sacó la mano dejando un punto frío en el brazo de Heechul, y se alejó para mirar el teléfono. Luego, refunfuñando algo en voz baja, lo puso boca abajo de nuevo, y reanudaron sus abrazos. Excepto que ahora se sentía, de repente, distante. Sus manos no se movieron tanto. Sus brazos estuvieron más flojos en torno a Heechul, su cuerpo tenso de una manera que no había estado hacía un momento.

—¿Qué pasa? —preguntó Heechul Como si no supiera... esa distancia significaba que la conciencia de Siwon lo estaba molestando, lo que significaba...

—Mi madre.

—¿Qué quiere?

—Nada importante.

Heechul no lo presionó. Probablemente era solo un mensaje de texto benigno. La madre de Siwon siempre le enviaba mensajes sobre una u otra cosa. A veces se preguntaba si sería solo una forma constante de tirar de su conciencia a casa, como recordándole de su familia y el camino virtuoso que lo esperaba afuera de cualquier antro de pecado que pudiera haberlo tentado un día cualquiera.

Con el corazón hundiéndose y el buen humor evaporándose, Heechul observó sus dedos vagando a lo largo del antebrazo de Siwom

—Tu familia todavía no lo sabe,¿verdad?

—No pueden saberlo. —Arrastró sus dedos de arriba abajo por el pecho de su acompañante—. Creen que esto es pecado.

—¿Estás de acuerdo con ellos?

Siwon se quedo callado. Su mano se detuvo, y todo su cuerpo pareció tensarse de repente. Rígido como si no pudiera decidir entre quedarse al lado de Heechul o alejarse. Inhaló lentamente, pero ni siquiera esas largas y suaves inhalaciones fueron convincentes.
Era como si estuviera tratando de parecer relajado cuando se sentía cualquier cosa menos eso. Heechul se giró y tomó la mano de Siwon.