Unidos (One-Shorts)

Una Madre sabe

Esto ocurre 6 meses después de la boda de Hiccup y Astrid

La hermosa pareja casada subía a uno de los acantilados con vista al vasto océano que rodeaba al Nuevo Berk, ambos respiraban la brisa profunda y salada que les llenaban los pulmones, sus ojos brillaban mientras miraban la escena delante de ellos, el sol resplandecía en lo alto del cielo estacionalmente cálido, Astrid estaba presionado contra Hipo, su espalda estaba tibia contra sus antebrazos, un par de ojos estaban fijos sobre ella, miro hacia arriba y ve un hermoso verde mirándola, sonriendo, se apoya en el pecho de su marido escuchando los latidos de su corazón y enfocándose en igualar el suyo.
A Hiccup le encantaba sentirla presionada contra él, ese sentimiento de seguridad de sentirla entre sus brazos, fue maravilloso
atrajo a Astrid más cerca y la besó suavemente en la frente, ella se envolvió aún más alrededor de él compartiendo su calor corporal, el momento era perfecto, un tiempo a solas de comodidad y paz
perfectamente contentos de quedarse así para siempre.

Desafortunadamente, ese no fue el caso.

- Creo que deberíamos volver-murmuró Astrid.

-Lo sé.... solo quisiera quedarme aquí contigo- le dijo a su lady mirándo a sus hermosos zafiros

- Yo también- le respondió con una sonrisa-Pero tenemos cosas que hacer, debo ayudar a mamá y tu deberías estar con Gobber y Eret para la recolección de suministros para el invierno- le recordó

-Si debemos darnos prisa antes de que nos alcanza esa época del año

- Entonce jefe perezoso- le dijo con burla-usted debería estar recolectando cultivos en vez de estar acurrucado conmigo

- Si no lo recuerda M'lady, usted era la que no alejaba sus brazos alrededor de mi- sonrió Hiccup siguiéndole el juego

-Claro que no, tú me tenías restringida

-Enserio? La gran Astrid Haddock estaba dominada por su esposo de una sola pierna

Eso bastó para que Astrid le lanzará un golpe en el brazo

-Tu golpe sigue siendo tan duro- comento mientras se masajeaba el brazo
Astrid sonrió orgullosa

-Correcto, entonces te veré para la cena?-dijo Hiccup mientras bajaban del acantilado

Astrid asintio- Con suerte terminaré antes y te veré en el Gran Salon

-Está bien, entonces te veré despues- El se inclinó para besarla,una de sus manos ahuecó su mejilla y la otra se deslizó alrededor de su cintura, se aferraron el uno al otro, disfrutando la unión de sus labios

Cuando se separaron él sonrió y Astrid le devolvió la sonrisa

-Te amo- le dijo con dulzura
-Yo también te amo- le respondió de la misma manera

Ambos tomaron caminos separados, los dos emergieron y continuaron con sus respectivos deberes, como si no hubieran estado ausentes en absoluto. 
Astrid se dirigía directo a la cabaña de sus padres, las cosas habían cambiado durante estos años, en particular, estaba empezando a cansarse de que los aldeanos mayores de la isla le echaran una mirada de reojo a su  plano estómago. De vez en cuando podía escucharlos susurrar sobre cuándo vendría el próximo heredero de Berk

Por supuesto Hiccup tampoco se salvaba de los comentario indirectos, ambos querían hijos, pero ahora era demasiado pronto, tuvieron que concentrarse en sus nuevas vidas juntos antes de agregar otra nueva vida a la mezcla.

Astrid había llegado a la casa, estaba apunto de subir los escalones cuando una horrible ola de náuseas la golpeó. Se detuvo en seco y comenzó a respirar profundamente para evitar que empeorara.Ultimamente se había sentido realmente enferma durante la semana,empezó con ligeros mareos,pero después surgieron las náuseas, no le comento nada a nadie, sobre todo a Hiccup, sabía lo sobreprotector que podría ser con ella(le gustaba,aunque no lo admitiera) Después de 5 minutos de quedarse quieta, Astrid finalmente sintió que podía moverse nuevamente sin que su estómago se rebelara sobre ella.

Empujó la puerta y entro

- Mamá? Estás aquí?

-Astrid! cariño estoy aquí!- una voz femenina llamó desde la cocina.

-Hola Mamá- entro al cuarto mientras saludaba con una sonrisa

-Hola querida- le dijo abrazándola con fuerza- ¿Cómo has estado? Tu padre y yo no te hemos visto últimamente

-Lo siento, las responsabilidades de una jefa me tienen bastante ocupada- le respondió apenada

-No te preocupes querida lo entendemos-le dijo dedicándole una sonrisa cálida

-Gracias Mamá- respondió un poco aliviada

-Entonces manos ala obra, la cena no se preparara sola, cuando tu padre y Hiccup regresen la comida debería estar perfecta-dijo mientras comenzaba a cortar algunas zanahorias

-de acuerdo-dijo Astrid mientras comenzaba a desempacar algunos comestibles que estaban sobre la mesa

Astrid no era una buena cocinera,no hace falta decir que su Yaknog fue realmente un éxito,pero su madre era muy buena en esa área, a comparación de su padre, él había compartido esos genes con ella

De repente un olor agradable lleno sus fosas nasales era algo delicioso,dulce, apetitoso, Astrid ahora realmente tenía hambre,ignorando las náuseas que tuvo anteriormente, comió insaciablemente el plato de fresas que estaban sobre la mesa, su madre la veía extrañada

-Wow, ¿tienes hambre cariño?- preguntó mientras le pasaba algunas galletas que estaban dentro un tarro
Astrid lo tomo gustosa,ella podía comerse todas las galletas de la alacena si pudiera, o tal vez más fresas o mejor aun, si fuera una de esas tartas exquisitas que su madre preparaba!
-Vaya, tenías mucha hambre-dijo levantando las cejas ante el comportamiento de Astrid
-solo un poco- comento mientras colocaba otra galleta en su boca

Cuando el pez chisporroteó sobre el fuego, un olor potente llenó la casa. Por alguna razón, esto hizo que las náuseas de Astrid fueran casi insoportables
Astrid salió disparada de la casa,tan pronto como salió, vomitó en el primer balde que se  encontró

Regresó a la casa, sintiéndose mucho mejor pero algo avergonzada. Su Madre la miró por unos segundos, obviamente sumida en sus pensamientos.

-Cariño te sientes bien?- le dijo mientras le pasaba un vaso de agua

-Estoy bien Mamá-tomo sin dudar el vaso de agua

-No te ves bien

-No te preocupes, solo amanecí mal está mañana- Sus ojos azules se destacaban contra su pálido rostro

-Solo está mañana?- dijo arqueando una ceja sospechando

-Si, es solo un pequeño virus estomacal, desaparecerá el día siguiente-Comento indiferente volviendo ala ralladura de los vegetales  

-Lo que digas querida- decía su madre con un tono incrédulo

Astrid la miró por un momento
pero luego lo ignoro, Bertha sabía exactamente lo que le pasaba a su hija, bueno, almenos lo asumía, pero claramente no era solo un virus estomacal.

Zephyr está en camino! Y la abuela lo sabe, solo falta que se de cuenta la Madre también ( ˘ ³˘)♥