LUJOS/ Emiliaco

Capitulo 1

Aburrido, esa era la definicion de este dia.

Miraba la gran pantalla de television de 82 pulgadas, las peliculas de Harry potter no eran tanto lo mio, pero igualmente siempre las terminaba de ver.

Agarre el control remoto y silencié el televisor.

Mire a Emilio que estaba concentrado en unos papeles con una pluma en la mano. Bostece bastante fuerte.

-Tengo hambre- me queje, pero emilio no me miro

-Hazte de comer- responde dejando unos papeles dentro de un portafolio.

-Quiero salir a comer con mi novio- una pequeña sonrisa se asomo en mi labios.

-No estoy de humor para fingir que te amo- dice todavía concentrado en sus cosas.

-Deberías, algunos medios estan hablando de los supuestos negocios ilegales en los que estas involucrado- Tome el peridico que estaba en la pequeña mesa al lado del sofa.

camine hasta donde estaba joel, y deje el periodico en frente de el.

Dejo la pluma a un lado y tomo entre sus manos las grandes hojas de papel.

-Carajo-cerro los ojos y paso las manos por su rostro con frustracion.

Emilio se levanta tirando el periodico al bote de basura, camino hasta la escalera y desapareció en el pasillo de arriba.

Se escucha el portazo y unas palabras irreconocibles.

-Ponte lindo, vas a conocer a tus lindos falsos suegros-grito emilio desde el segundo piso.

Subi las escaleras encontrándome con emilio apoyado en la puerta de su habitacion.

-Oh! si, estoy tan emocionado - dije sarcásticamente entrando a mi propia habitacion.

Abri la puerta del gran closet repleto de prendas costosas de conocidos diseñadores, camine mirando con detalle cada una de ellas, buscando la mejor opcion.

Estaba lejos de ser un experto en la moda.

La puerta de atrás se abrio.

Cuando di la vuelta estaba Emilio apoyado en el marco de la puerta con una mano ocupada teniendo una llamada.

-Leila, necesito saber que persona da esa información, hare que su vida sea miserable- dice bastante irritado.

Veo que guarda su celular en el bolsillo de su pantalon. Que Emilio estuviese recurriendo a Leila no significa nada bueno, esa mujer no era la definición de santa.

-Agradece que a la prensa le importa mas que aparezca yo en unas fotos tomandote la mano o besandote- Acomode el costoso reloj en mi muñeca.

-Lo se, pero si esto sigue yo ya no sabre que hacer-sonaba cansado- si logro saber quien es el desgraciado, Leila podra encargarse de ello.

-Sabes que siempre estaré para ayudarte

-gracias, pero que te pague grandes cantidades de dinero no significa que tengas que ser empatico conmigo.

Decidi no seguir hablando sobre el tema, y seguí hasta uno de los espejos, Emilio no se fue, se quedo mirando desde la puerta.

-Explicame sobre tu familia

Moví mis dedos encima de mi cabellos tratando de lograr la forma en la que lo quería.

-mamá, te llevaras bien con ella, suele amar a las personas odiosas, mi hermana, Romina, es algo irritable, pero terminaras amándola-lo mire por unos segundos- mi padre, te odiara.